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+*** START OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK 44120 ***
+
+Note: Images of the original pages are available through
+ the Google Books Library Project. See
+ http://www.google.com/books?id=s3ECAAAAYAAJ
+
+
+Nota del Transcriptor:
+
+ Letras itálicas son denotadas con _líneas_.
+
+ Las versalitas (letras mayúsculas de tamaño igual a las
+ minúsculas) han sido sustituidas por letras mayúsculas
+ de tamaño normal.
+
+ Letras oscuras son denotadas con =signos de igual=.
+
+
+
+
+
+LA CAZA DE LA PERDIZ
+
+CON ESCOPETA, AL VUELO
+
+Y CON
+
+PERRO DE MUESTRA
+
+por
+
+MANUEL SAURÍ
+
+
+ El que sabe cazar la perdiz al vuelo,
+ con perro de muestra, debe cazar bien á
+ todo, lo mismo ánade, codorniz ó becacina,
+ que conejo, liebre ó jabalí, etc., etc.
+
+ BARON DE CÓRTES, =Recuerdos de caza=.
+
+
+Barcelona
+Manuel Saurí, Editor
+1877
+
+Es propiedad del autor y editor.
+
+Queda hecho el depósito en manos de los cazadores.
+
+Barcelona.--Imprenta de la Viuda Miró y C.ª, Sobradiel, 10.--1877.
+
+
+
+
+PRÓLOGO.
+
+EL PORQUÉ DE LA OBRA.
+
+
+He puesto este epígrafe al prólogo de mi _obra_, y creo no ando
+acertado, pues antes debia preguntarme: ¿A qué escribir de caza despues
+de publicado el libro: _Los cazadores_, parto del ingenio del fecundo
+novelista Enrique Pérez Escrich, y el titulado: _Recuerdos de caza_,
+escrito por el infatigable émulo de san Eustaquio, señor baron de
+Córtes?
+
+En esto está el _quid_ de mi osadía; y todo el que haya tenido la
+fortuna de leer las producciones que acabo de citar, comprenderá el
+móvil que me ha guiado al dar á la estampa estos apuntes, si es que se
+toma el trabajo de leer mis dislates.
+
+He dicho y adelante.
+
+
+
+
+TRAJE DEL CAZADOR.
+
+
+Aunque parezca secundario ocuparse del traje que debe usar el cazador,
+únicamente me limitaré á encargar que éste sea sencillo y sin jactancia.
+Interiormente llevará camiseta de franela, lo cual le evitará muchos
+resfriados si tiene la prudencia de cambiarla al llegar de la cacería á
+la casa ó parada. Esto prenda de ropa es más conveniente en verano,
+aunque parezca improcedente por el excesivo calor que hace. Conviene
+asimismo acostumbrarse al uso de la alpargata, llevando escarpines de
+lana: el pié va resguardado y se pisa en blando; así se trepa mejor el
+monte. En ciertos terrenos debe usarse el zapato claveteado, lo cual
+evita resbalones; borceguíes y pantalon ancho, para que la rodilla
+juegue con comodidad: el cuerpo abrigado con blusa ó chaqueta
+desprovistas de aberturas, ojales y colgajos, ni tampoco conviene llevar
+leontina en el reloj, pues todas estas cosas ofrecen el inconveniente de
+que al hacer uso de la escopeta, se enredan con el pié de gato ó bien
+con el disparador, y esto, además de interrumpir y hacer perder un
+tiempo precioso para apuntar la pieza de caza, que se va sin poderla
+saludar, tambien puede acarrear (punto importante que se debe evitar)
+algun lance desagradable, tal como que se dispare la escopeta sin el
+beneplácito del cazador. Lo cual, á más del susto que ocasiona, es
+fuente de lamentables desgracias.
+
+Las camisas se usarán anchas de cuello, sin pretensiones ni
+ridiculeces, cubriéndose la cabeza con un sombrero ligero, de alas
+regulares, item más, un pañuelo de seda sujeto en la sien; con lo que se
+evitan los dolores reumáticos de cabeza, y es un gran preservativo
+contra el frio. En época de calor debe evitarse que el sudor corra por
+el rostro, cosa tan molesta.
+
+
+
+
+LA ESCOPETA.
+
+
+El arma es conveniente que sea de dos cañones, sistema Lafaucheux; su
+peso poco más ó menos de seis libras y media á siete; inferior á este
+peso tiene el inconveniente que al salir el tiro hace un pequeño
+movimiento de vibracion y perjudica la seguridad del mismo, y de más
+tambien fatiga demasiado al cazador, lo cual no hay que echar en saco
+roto. El arma de dos cañones tiene la ventaja de poder efectuar lances
+por duplicado. Muchas veces al primer tiro se yerra la pieza, y se
+alcanza con el segundo; otras, despues de haber tirado arranca otra
+pieza cercana y aún se mata, y además (esto es lo principal) el cazador
+anda por esos mundos de Dios con más garantía contra cualquier
+eventualidad: en toda querella que se suscite es más respetado.
+
+Basta que el calibre de la escopeta coja el cartucho marca 16. Los
+gallitos deben caer siempre á voluntad del cazador; así es que los
+puntos han de estar si no al pelo, _entre col y col lechuga_.
+
+Gastando 40 á 50 duros en una escopeta, se obtiene una buena arma de
+caza; lo demás es cuestión de puro lujo, sin ninguna influencia en la
+precision del tiro.
+
+
+
+
+MUNICIONES.
+
+
+La pólvora debe ser escogida, bastando con que el buen probador señale 5
+grados. El cartucho se empleará de cartulina fina, para que entre y
+salga sin necesidad de saca-cartuchos. Una vez haya servido, debe
+tirarse, pues tiene sus inconvenientes el volver á usarlos. El plomo ó
+sea los perdigones, en los meses de agosto, setiembre y octubre basta
+emplearlos del número 6; en noviembre, diciembre, enero y febrero, entre
+el 4 y el 5. En esta época del año la perdiz se tira á mayor distancia,
+y como está en su apogeo, necesita el plomo mayor para hacerla dar la
+voltereta.
+
+
+
+
+PERRO PERDIGUERO.
+
+
+El verdadero compañero del cazador es sin disputa el perro; por lo
+tanto, debe buscarse dócil, obediente é inteligente. Sabido es que, como
+aquél comparte las glorias y fatigas con tan leal _amigo_, los dos se
+reparten cariñosamente el almuerzo, aunque sea á trueque de quedarse el
+amo con apetito.
+
+Las castas del perro _seter-pointers_ no han dado en nuestro país los
+resultados que eran de esperar, de suerte que los cazadores hánse fijado
+en los perros perdigueros, ampurdaneses, mallorquines y navarros, los
+cuales han producido mejores resultados por su obediencia y por no
+adelantarse tanto como los _seters_ y _pointers_. Como éstos recorren el
+terreno que debe seguir el cazador, quítanle la ilusion al indicarle la
+pista.
+
+Hay perro (de castas cruzadas como el podenco-sabueso) que apenas tiene
+facha de perdiguero, y sin embargo da buenos resultados, pero necesítase
+mucho rigor para domarlos; una vez logrado esto, son incansables y
+dóciles, y nunca se aspean.
+
+Exigid del perro que tenga buenos vientos, firme muestra y blanda boca,
+y con estas circunstancias, si el cazador sabe cazar y matar, de seguro
+tendrá un excelente compañero que seguirá bien á un peon, y cobrará las
+aliquebradas. En tal caso dejad para otros la casta y la hermosura, pues
+esto es secundario.
+
+Las perras son generalmente más dóciles y finas, pero tienen cierto
+inconveniente que la naturaleza no ha querido evitar, por cuyo motivo
+los cazadores prefieren el macho.
+
+Es conveniente cortar el rabo al perro, pues al moverse agita las matas,
+se estropea hasta el punto de ensangrentarse con los zarzales, echa á
+perder las uvas y bate las mieses; si bien esta operacion de cortarles
+el rabo les afea, porque no hay duda que es más bello y sublime cuando
+está de muestra con la cola paralela al horizonte.
+
+Se observará que cuando arquean el rabo los perros de raza pura, indica
+liebre; un poco inclinado pero recto, conejo; con la punta al horizonte,
+perdiz; recto y un poco levantado, codorniz. Al perro bien castizo le
+repugna traer la becada, guiones, las pollas de agua, y sobre todo los
+_sabocs_, y algunos hasta los palomos.
+
+Hay cazador que para lograr un perro de _primo cartello_, págalo á
+cualquier precio, creyendo que depende del can si mata más ó menos
+perdices; y éste conoce á tal punto el cambio de dueño, que se han dado
+casos de demostrar su agrado al nuevo amo abandonándole en el mismo
+momento que se hace la prueba. Sobre esto pudiera llenar unas cuantas
+cuartillas, mas sólo me limitaré á aconsejar que el que quiera un buen
+perro _que se lo haga_.
+
+
+
+
+MODO DE TIRAR A LAS PERDICES.
+
+
+Esta es la parte más comprometida para dar una sucinta esplicacion del
+modo cómo deben matarse al vuelo las perdices, por la sencilla razon de
+que es difícil iniciar en el asunto á aquellos que no han tenido la
+satisfaccion en su vida de matar media docena de perdices al vuelo.
+
+El cazador que en sus correrías anuales puede contar con un promedio de
+por cada tres tiros una perdiz, hay que proclamarle buen tirador. Aunque
+en salidas determinadas cuente triunfos tales como hacer dar la
+voltereta á todas las que tire, acontece asimismo (y bien á menudo) que
+se dispara diez ó doce veces la escopeta y sólo se matan un par de
+piezas, de manera que, por cálculo aproximado, á un buen tirador le sale
+la proporcion mencionada.
+
+Al arrancar del suelo y al echarse al vuelo la perdiz, el cazador debe
+estar sereno, hacer una pequeña suspension y con ligereza echarse la
+escopeta á la cara; seguir á la perdiz en su rápida carrera,
+encañonarla, y cuando se interpone con el punto de la escopeta, entonces
+sin calcular distancias debe efectuarse la presion del dedo sobre el
+disparador; y seguro que obrando así cae la pieza.
+
+La perdiz que marcha de frente ó sea de cola es la fácil de matar: las
+que van atravesadas debe comprenderse la velocidad que llevan, para
+apuntarlas á la cabeza, y haciendo un insignificante movimiento con el
+brazo izquierdo (que es el timon), se las toma la delantera. Así hay
+probabilidades de matarlas. Lo mismo requiere la perdiz que viene de
+arriba ó sea de frente, é indispensablemente pasa por encima de la
+cabeza del cazador: segun se presenta este lance, la regla mejor es
+volverse rápidamente y tirar cuando haya pasado; no obrando así y
+disparando cuando viene de frente, este tiro si se acierta es de
+_chamba_, pues á veces se requiere tomarla un metro por delante y la
+misma pieza acude á la muerte, dando un tumbo, y con la velocidad y el
+choque de la caida, se abre.
+
+La perdiz que, sorprendida entre el cazador y el perro, no le queda
+fácil salida y empieza con aquel canto alarmante que aturde, llegando á
+echar excrementos, y se remonta repullada, á ésta el cazador debe con
+serenidad seguirla apuntando, y al hacer la suspension para extender el
+vuelo en la direccion que se le antoja, entonces hay que disparar, pues
+es la mejor oportunidad de matarla. El tiro es fácil.
+
+Cuando el perro pone muestra, la satisfaccion es tan importante, que
+afecta la parte física de un modo notable. El corazon late tan
+agradablemente, que no se puede describir, y no recuerdo que tan
+singular impresion me la haya evitado un segundo, dejando de imitar á
+muchos que dan gritos al perro, y tocándole con el pié le excitan para
+que rompa la muestra.
+
+Este lance debe resolverse siempre por sí solo; y mientras se admira la
+_sublimidad_ del perro, se va el cazador colocando de manera que pueda
+tirar á la perdiz sin que le estorben los árboles. Ésta arranca de un
+modo desesperado; el cazador, por poco que lo sea, goza y disfruta dando
+_gusto al dedo_ á las mil maravillas, y debe matar la pieza. Es un caso
+indispensable; el perro lo exige por la leccion que recibe, y el cazador
+tiene un disgusto si la yerra: en todo el dia caza de mal humor, á no
+ser que muy luego alcance victorioso desquite: de lo contrario pasa un
+dia _de perros_.
+
+Para tirar al vuelo á las perdices se necesita calma y serenidad. Los
+grabados franceses nos quieren demostrar eso pintando á cazadores que
+cuando les sale al vuelo una pieza, abren tranquilamente la caja del
+rapé, toman un polvo, y luego apuntan y matan. Cualquier cazador
+práctico comprenderá que ésta es la manera gráfica de demostrarle que no
+debe precipitarse, pues la precipitacion es causa de que se vaya la
+caza; sin embargo, es preciso un término medio. En nuestro país las
+perdices no permiten tomar rapé, ni siquiera fumar en pipa.
+
+Sucede al más _pintado_ que yerra la mejor pieza, y eso depende muchas
+veces de estarse mirando la perdiz sin cuidar del guia de la escopeta,
+que generalmente se dispara sin apuntar. Acontece lo expuesto cuando la
+perdiz sale de sorpresa y se va desprevenido y absorto en _importantes_
+meditaciones.
+
+Tampoco debe olvidar el aficionado á caza que el apuntar bien depende
+mucho del brazo izquierdo, el cual juega un principal papel en el _arte
+de tirar con precision al vuelo_. Al colocar la escopeta á la espalda,
+si bien este movimiento debe ser suave, en cambio requiérese soltura,
+apoyando en seguida la cara á la culata para entreguardar bien al
+encañonar la caza y seguir la rapidez y el más leve movimiento de la
+pieza, haciendo importante papel el brazo izquierdo que acompaña el
+encañoneo; y cuando el cazador comprende la oportunidad, entonces el
+dedo cumple con su obligacion y se palpan los buenos resultados, pues
+infaliblemente la pieza cae herida ó muerta. El disparador de la
+escopeta debe siempre caer á voluntad del tirador; el inconveniente más
+leve hace errar la caza, y no por ser un mal tirador sino por efectos
+materiales del arma, que deben corregirse.
+
+He cazado con amigos que no saben matar de otro modo que por medio del
+tiro _á tenazon_, y no obstante, algunas veces me han dejado asombrado
+por su destreza en despachar las piezas; pero confieso que jamás me han
+satisfecho, y he tenido ocasion de manifestárselo. El aficionado
+acostumbrado á esta clase de tiro, el dia que tiene la _buena_ hace
+prodigios. Aún la perdiz no ha arrancado un metro del suelo, cuando ya
+está tendida en él, y si la caza les sale de cerca la destrozan: como no
+tienen espera, tiran aunque sea á cuatro pasos de distancia; si la pieza
+recoge la _flor del tiro_, queda en disposicion de echarla al muladar.
+Por lo demás, si tienen la _mala_, en una cacería de cinco ó seis dias
+no matan ni una pieza, á pesar de ser los que tiran más. Atendido lo
+cual aconsejo á todo cazador que se corrija de este _vicio_ y haga un
+estudio para tirar despues de encañonear y seguir bien la pieza: si así
+lo hace, encontrará un verdadero placer al matar en buena regla una
+pieza de caza.
+
+
+
+
+1.º DE AGOSTO.
+
+
+Memorable fecha, y sin embargo para muchos pasa desapercibida, mientras
+que los cazadores aguárdanla con tanta impaciencia, que casi raya en
+locura. Se cuentan las semanas y hasta las horas que faltan para llegar
+al dia ansiado, _el 1.º de agosto_, en que la ley de caza autoriza á los
+españoles poder hacer uso del derecho que les ha estado vedado durante
+cinco meses, prohibicion justa é indispensable para que las perdices
+estén en amores y la naturaleza nos dé en cambio la fecundidad, es á
+saber: que de un par de perdices salga un bando de 18 á 21.
+
+El cazador deberia tener en su gabinete, entre los objetos de caza, un
+cuadro adornado de precioso marco, destacándose en el fondo una
+inscripcion en letras de oro que le recordara perennemente el dia 1.º de
+agosto.
+
+ * * * * *
+
+No cabe duda que ese dia le tienen fijo en la memoria más de cien mil
+españoles, si no todos cazadores, á lo menos muchos que creen serlo, por
+el mero hecho de tener escopeta, perro y licencia de caza. Por mi parte
+puedo afirmar que hace veinte años que en tal fecha no he faltado al
+monte: pues se experimentan muchas impresiones, queriendo uno
+multiplicarse para hacer _descubrimientos_; la imaginacion acude á todas
+partes; se está cazando, pongo por caso en Moncada, se ha descubierto
+el terreno, y uno dice para su coleto: «mejor me habria ido á la _Torre
+dels frares_, allí dejé bastantes pares; pero... ¿y si me hubiese
+dirigido á _Roca de droc_?... no, el tren sale demasiado tarde, y cuando
+se llega al cazadero, ya molesta mucho el rubicundo Febo; además, habrán
+ido los de Molins de Rey.» Por último, reflexiona que los puntos
+mencionados debe reservarlos para otro dia, y caminando con calma en
+busca de agua cristalina y alguna sombra, dispónese á ir pasando el dia
+para no estropearse y _hacer piés_, preparándolos para las futuras
+salidas, que deben ser, seguramente, de más provecho que las primeras.
+
+Las perdices en el mes de agosto.--La caza de la perdiz en el mes de
+agosto se diferencia completamente de las demás épocas del año. La ley
+deberia, con rigor, á lo menos no permitir cazar hasta el 15 de dicho
+mes. Si bien es verdad que por razon del clima hay comarcas en que las
+perdices son más crecidas, como por ejemplo en el litoral, en cambio en
+la alta montaña van muy atrasadas, hallándose muchas cluecas empollando
+aún sus huevos: de ahí resulta que algunos cazadores inexpertos, cuando
+el perro les queda de muestra y al salir la perdiz, que apenas se
+remonta un palmo del suelo, le encajan el tiro, y pueden irse ufanos á
+su casa con el trofeo de una clueca sin plumas en la panza, é
+indirectamente dejando desamparadas á veinte ó más perdices que iban á
+salir del huevo, lo cual causa un perjuicio irreparable y reprensible.
+
+Basta ya de digresion, y volvamos al modo cómo deben cazarse las
+perdices en agosto.
+
+Mucha ventaja llevará el cazador y se ahorrará no pocas subidas y
+bajadas, si muy temprano, antes de la salida del sol, se coloca en un
+cerro. El canto del _perdigon_ bravo anuncia á los _perdigachos_ que se
+han recodado y pasado á _joc_ la noche; mueven la cabeza y guiados por
+la perdiz van subiendo al cerro, haciendo _piu_, _piu_, _piu_. Cuando
+aperciba el cazador ese canto, debe huir del cerro y no volver á él
+hasta que pasen á lo menos quince dias, pues las perdices que mataria
+apenas tendrian el tamaño de las codornices: todo cazador decente debe
+ir en busca de otro lance, y sólo le es permitido hacerlas volar para
+saber si el bando está completo; ensayo muy peligroso, por lo que voy á
+expresar. Cuando sale el bando ¿quién se detiene? es bastante difícil, y
+esto produce consecuencias fatales.--Los _padres_, permítaseme la
+expresion, en defensa de sus _hijuelos_ van _peonando_ y guiando el
+bando adelante por la inseguridad que tienen en el vuelo de los
+_pollitos_; el _perdigon_ con un movimiento rápido divide el bando, y la
+perdiz con la otra mitad aproximadamente y á retaguardia, haciendo
+_chac_, _chac_, _chac_, hasta que el perro se les viene encima; entonces
+vuelan, y la pobre perdiz que en defensa de sus hijos quedó á
+retaguardia, paga con la vida su amor filial. Cometida tal hazaña por el
+cazador, muy fácil le es acabar con el bando, pues los jóvenes con su
+_piu_, _piu_, se descubren muy fácilmente y se dejan matar á mansalva, y
+las pocas que quedan echan de menos á la madre, de suerte que cuando
+viene la noche (estas siempre son frias) mueren por faltarles el calor
+natural que les da el regazo materno.
+
+Este es uno de los inconvenientes que tiene el cazar la perdiz en la
+época citada. Discutiendo algunas veces sobre si es mejor ó no que el
+bando lleve el macho, sólo me han sostenido lo contrario los aficionados
+al _reclamo_, pero jamás me han dado una razon sólida, mientras les he
+podido objetar el auxiliar que es del bando el _perdigon_. Éste, en la
+época del celo y en la de la cria, se defiende admirablemente del
+gavilan, garzas, gaig, mochuelo, y hasta de los perros, saliendo casi
+siempre victorioso cuando menos de las aves citadas, y en las demás
+épocas del año se deja agarrar sin oponer la menor resistencia. ¡Lo que
+puede el amor paternal!
+
+Volviendo ahora á entrar en materia diré, que para cazar en el mes de
+agosto se requiere una táctica generalmente diferente de las demás
+épocas del año. En primer lugar, debe madrugarse mucho, ir ligero de
+ropa, llevando siempre una camisa de repuesto en el zurron. Las perdices
+se hallan en los cerros á la salida del sol, pero al cuarto de hora ya
+descienden á las querencias, métense en los rastrojos y comen los granos
+de trigo que despues de la siega han quedado desparramados por el suelo:
+si por casualidad aún están en el campo las gavillas, de seguro que las
+perdices se hallan cerca. Si se notan por el camino las señales que las
+aves retozando han dejado en el suelo, el cazador puede hacerse cargo
+por ellas si el bando está á punto de darle una leccion: se ha de fijar
+en si hay excrementos, y si son tiernos, no debe moverse de aquella
+querencia, porque en el alto (segun la hora), en el centro ó bajos
+estarán las perdices. El perro principia á dar señales y sale el bando,
+generalmente todas á la vez: entonces el cazador debe observar, primero
+si están buenas para _apeonar_, luego contarlas aproximadamente, y
+además, y esto es lo más esencial, comprender á dónde se dirigen. Una
+vez echado el cálculo obsérvese bien el terreno (si es desconocido) para
+poderlas salir de modo que vayan allá donde las destina aproximadamente
+el cazador. El vuelo que han dado, de seguro es corto, pero hay que
+tener presente que el poder que les falta en las alas, en cambio
+súplenlo _peonando_, dándose el caso que muchas y muchas veces se pierda
+el _bando_ entero, que no se hallan en ninguna parte aún viéndolas la
+parada, y se pierden miserablemente las horas más frescas de la mañana
+sin dar con ellas, resultando que en algunas ocasiones de _peon_ han
+vuelto poco más ó menos de allí donde habian salido la primera vez.
+Generalmente eso sucede cuando uno se empeña en querer saber más que el
+perro: éste, por ejemplo, coge vientos, quiere inclinarse á los bajos, y
+uno le llama arriba ó vice-versa; y, cuántas y cuántas veces por no
+haber querido creer al perro, se ha ido una pieza que se la habria
+tirado á _tout plaisir_, y uno se queda contemplando con un palmo de
+narices y diciendo para sí: «¡qué mal has hecho en no seguir la
+tendencia del perro!»
+
+Si el cazador halla el bando en esta época, debe estar convencido de que
+tirará, por lo cual es preciso ir con mucha calma y sin precipitacion,
+observando el más leve movimiento del perro. Cuando se dispara y cae la
+pieza, estarse quieto, que se va á disparar el otro cañon, y
+efectivamente así sucede: las perdices ya no se levantan todas; al
+segundo vuelo obsérvese bien que si la vez primera fueron quince, ahora
+sólo han salido ocho ó nueve. ¿Dónde están las otras? Cargue el cazador
+y tenga paciencia, llame al perro; quieto y cartuchos otra vez, faltan
+seis ó siete perdices; calma, que son de usted, señor cazador. Siga
+apuntando bien que matará; ha llegado su _cuarto de hora_, y verá V.
+como á veinte ó treinta metros una de otra y dos á la vez y en un
+pequeño círculo, dispara algunos tiros bien provechosos.--Cuando esté
+persuadido el cazador de que en dicho terreno, ya por las que ha muerto
+ó bien por las que ha errado, no queda ninguna, diríjase sin pérdida de
+momento hácia donde se ha ido el resto del _bando_. ¡Cómo late el
+corazon en el trayecto que media del punto donde han salido las perdices
+al que se las ha visto parar! Usted echa sus cálculos: «he muerto
+cuatro; vamos, esta mañana llegaré á seis, porque... ahora sabiendo
+dónde están bien mataré un par.» Y así entretenido el cazador, sale de
+la hondonada otra _bandada_ de perdices: fijándose en ellas, como es
+natural, para ver á dónde se dirigen, una vez en autos debe hacer caso
+omiso de ellas é ir siempre á las mismas del primer _bando_. Nunca ha de
+ilusionarse el cazador por la abundancia: éstas ya las encontrará otro
+dia. Valen más las menos, que se han de dejar _pisar_ la tercera vez que
+se tienen en juego. Que haya tiento y se coloquen bien los piés;
+domínese bien el terreno, no precipitarse, que cuando arranque la pieza
+se cansará V. de apuntar, y al disparo mídase el terreno, que aún no hay
+diez metros de distancia al sitio en que cayó.
+
+El matar perdices en esta época, sobre todo al arranque del tercer
+vuelo, es más fácil que tirar á las codornices, por ser mayor la pieza y
+salir generalmente de cola y con poca velocidad: siga, pues, el cazador
+el terreno con cuidado, y tire á todas; pero si observa que el perro
+saca un palmo la lengua afuera gracias al calor, entonces conviene tocar
+retirada, buscar plácida sombra, descansar media horita, fumar un
+cigarrillo de papel y volver en seguida al mismo sitio, describir un
+semicírculo, cruzarlo por derecha é izquierda, y se verá como el perro
+vuelve á coger vientos. Con el tiempo trascurrrido las perdices se han
+llamado unas á otras con sus cantos, han salido de su escondrijo, y el
+perro las señala á las mil maravillas, recreándose el cazador tirando un
+par de tiros. Se mira el reloj: son, por ejemplo, las diez; el sol
+achicharra, apenas se mueve una hoja, y si se está cerca de la posada ó
+hacienda, lo mejor es irse á casa á descansar: el perro se rehace y al
+dia siguiente el cazador se encuentra más entero y dispuesto á volver á
+la lid mejor que el dia anterior. El cazar requiere calma, pero en el
+mes de agosto calma y astucia, saber serpentear los terrenos, buscar los
+frescales, que es donde las perdices tienen querencia. Jamás se busque á
+la parte que da el sol y sí en las umbrías, y en los viñedos frondosos,
+y en los torrentes.
+
+Todo lo que no sea seguir este consejo es perder el tiempo, atropellar
+el perro y fatigarse inútilmente, y lo que se ha tomado como recreo,
+sirve de molestia y puede acarrear una enfermedad.
+
+La caza de la perdiz en esta época del año diferencíase completamente de
+la de los demás meses. El _bando_ de perdices está siempre á la órden de
+las _viejas_, y éstas comprenden hasta dónde llega el poder de sus
+_hijuelos_ para el vuelo, y pocas veces intentan cruzar el sendero y van
+quedándose á la misma ladera ó mano que se ha escogido para cazar; el
+vuelo es tan corto que apenas alargan á 300 metros, pero en cambio
+_peonando_ al tocar el suelo cambian de direccion tan fácilmente, que al
+llegar al sitio donde se han visto echar, no se halla ninguna, y de
+_peon_ han pasado la sierra y de otro vuelo se han quedado en una
+querencia en direccion contraria, sucediendo que uno pierde el tiempo
+tan _miserablemente_ en conjeturas, que la _rabieta_ va haciendo su
+efecto y el aburrimiento se apodera del cazador y hasta del perro. Esta
+es la parte _infeliz_ del cazador que ha trocado el bienestar de su casa
+para ir á sudar el _kilo_ sin poder disparar la escopeta, abandonando
+algunas veces quehaceres de importancia; pero tal es la _ley del
+cazador_, y para llegar á matar algo en buena regla se necesita:
+aficion, aficion, aficion.
+
+
+
+
+SETIEMBRE.
+
+
+Buena fecha, pero no la mejor. Si bien entran las perdices en la edad de
+la _pubertad_ y dan _más juego_, aún no están del todo emancipadas de
+quien les dió el sér, aún no han pasado la muda, no obstante de ser
+todas _pintadas_, conservando tan sólo dos ó tres plumas en el arranque
+de las alas, plumas que en Cataluña llamamos _mussolas_.
+
+En esa época del año la perdiz satisface más los goces del cazador y el
+perro las señala mejor, tal vez porque el terreno generalmente es más
+fresco, por cuyo motivo nota más los rastros, quedando muy á menudo de
+muestra. Ya las perdices han abandonado aquel canto tan empalagoso
+_piu_, _piu_, _piu_, y principian á _hombrear_ imitando á las viejas,
+pero sin poder dar aún sus _timbres_. Su carne ya no siente á hormigas y
+á langostas; al contrario, en la época del año que nos ocupa es cuando
+constituyen el mejor bocado, pudiendo recomendarse á toda persona falta
+de apetito.
+
+Para cazar las perdices en setiembre, si hay viñedos en el terreno que
+se escoge, búsquelas siempre el cazador en dichos sitios, pues tienen
+grande aficion á la uva. Jamás dejan aquel pasto, y como el sol aún
+molesta con sus rayos, sucede que se mantienen quietas en los pámpanos.
+Si se encuentran por primera vez en las viñas de diez á doce del dia,
+esperan mucho, pero ya salidas de allí no vuelven aquel mismo dia,
+hasta que las reclaman las viejas, yéndose á otras querencias.
+
+En esa época ya intenta la perdiz pasar al vuelo una hondonada,
+quedándose á la parte opuesta del cazador, y cuando se ve que trasponen
+el cerro, hay que fijarse bien en la inclinación que escogen, pues la
+buena vista ahorra muchos pasos inútiles, dando el resultado de abreviar
+el tiempo, que en estas circunstancias es oro. Que ande ligero el
+cazador, pero sin precipitarse, pues el pulso y los latidos del corazon
+jamás han de ser más fuertes de lo natural, á fin de que al llegar el
+ansiado momento se aprovechen los tiros y pueda hacerse doblete y hasta
+carambola. El lance de la carambola es el que halaga más al cazador, y
+motivo hay para ello. Muchos confunden con la carambola el matar una
+pieza con cada cañon; la carambola es lo que saben y hacen con
+frecuencia algunos buenos tiradores, es decir, arrancar al vuelo dos
+perdices á la vez, yendo una por ejemplo hácia la derecha y la otra
+hácia la izquierda. En este caso el cazador consumado ya comprende la
+velocidad y alcance de entrambas, apunta á la que le parece más cercana
+y sin precipitarse dispara; se vuelve, apunta á la otra, pero listo, y
+dispara haciendo dar á las dos la voltereta, ó á lo menos así lo cree.
+Entonces debe dirigir el perro á la aliquebrada ó que le parece que lo
+está, para que la _cobre_, y si lo acierta, seguro que se cuelga las dos
+perdices al zurron. Esta _suerte_ es la que requiere más serenidad y
+calma, pues algunos con el goce que produce la carambola alborotan el
+perro llamándole á derecha é izquierda, en cuyo caso hay bastantes
+probabilidades de perder alguna de las piezas; y aun he visto á
+cazadores perder las dos por ser aliquebradas y el perro de pocos
+sentidos.
+
+La carambola que acabo de explanar es la de más mérito, y se hacen
+pocas, sobre todo en diciembre y enero. En setiembre es más fácil, pues
+no es tan rápido el vuelo. Efectúanse otras carambolas, si bien no de
+mérito superior. Cuando el _bando_ marcha describiendo un semicírculo, y
+se les disparan de cola, los dos cañones, matándose dos piezas, esto
+tambien se llama carambola; el cazador queda satisfecho y basta, porque
+de todos modos son episodios que complacen.
+
+Hay que perdonarme mis contínuas digresiones, pues son hijas del
+entusiasmo que en mí produce el recuerdo de lances inolvidables.
+
+Volvamos, pues, á esas perdices que con su vuelo han traspuesto el cerro
+y que el cazador hábil ha adivinado el sitio escogido para su descanso.
+¿Le gustaria á V. que el puesto elegido fuese un pequeño torrente con
+hermosa campiña en ambos lados y abundancia de piedras á mano? Seguro de
+una contestacion afirmativa, allí coloco á mi cazador, quien antes de
+llegar ya ve marcharse una perdiz. Mejor fuera que se hubiese esperado,
+pero no debe hacerse caso, pues dicha perdiz iba de _peon_; hay otras.
+Fíjese el cazador en la que ha tenido la poca vergüenza de marcharse sin
+decir _adios_ y por lo tanto sin podérsela hacer los honores de
+ordenanza. Se ve parar á alguna distancia en el mismo torrente, donde
+hay un árbol como señal. Allí debe V. encaminarse, pero... el perro se
+queda de muestra á la ladera de torrente; magnífico. Vuela una perdiz de
+la parte opuesta; si es larga no la tire V.; observe y verá que poco más
+ó menos va donde ha ido la primera, y con el ruido que mueve al marchar
+salen tres ó cuatro del mismo lado donde está V.; estas son las que
+olfateaba el perro. Ahora es ocasion de disparar la escopeta y de matar
+ó dejar de matar; pero está V. en regla y debe seguir, pues faltan
+otras. Eche V. alguna piedrecita, porque con el tiro las compañeras han
+quedado aturdidas, esperando ocasion propicia para largarse; y como el
+perro trabaja entusiasmado por los bajos del torrente, las perdices
+salen de las matas, tan bajas que casi el perro las alcanza con el
+hocico, y en ese estado arrancan con un miedo cerval. _Piñac_, _piñac_,
+_piñac_, óyese momentáneamente. Estas perdices dan tiempo al cazador
+para todo; para prepararse, apuntar bien y dar _gusto al dedo_. Cuando
+se esté convencido de que todas han salido, hay que dirigirse sin
+pérdida de momento hácia las que se han visto marchar al asomarse al
+torrente, y de seguro se tirará bien á estas. Obrando así y con tino es
+como se consigue buena provision de piezas. Cuando un _bando_ ha tenido
+la _desgracia_ de elegir como guarida un torrente, no desperdicie la
+ocasion el cazador afortunado que por allí transite, pues se divierte
+envidiablemente un par de horas.
+
+Todo cazador verdadero que se encuentra con un _bando_ de perdices y con
+su buen cazar las conduzca á sitios que tienen _mataderos_, no debe
+abandonarlas para ir en busca de otras, pues las que nuevamente halle le
+harán luchar y perder un tiempo siempre precioso, además que no todos
+los bandos obedecen al plan preconcebido por el cazador. Nunca hay que
+olvidarse de las que todavía no han volado, pues siempre la _perezosa_
+es el mejor tiro.
+
+
+
+
+OCTUBRE Y NOVIEMBRE.
+
+
+La mejor época del año para gozar cazando y matando perdices, es octubre
+y noviembre. El calor ya no molesta, y el perro caza todo el dia
+perfectamente. Si en ese tiempo el perro no rastrea bien y no encuentra
+las aliquebradas, hay que deshacerse de él, pues es dar pan á quien no
+lo merece.
+
+En dichos meses el cazador se siente más ágil y las cuestas no son tan
+_amargas_, pudiendo hacer bien ocho horas de jornada. La salida de casa
+debe ser á las 8 y retirarse á las 5 de la tarde. Es muy importante
+encontrar á la perdiz que ya haya comido, y esto se logra entrando de
+lleno en el cazadero á las ocho de la mañana. Se caza á esa hora para
+evitar las humedades que generalmente deja el rocío, y porque mientras
+no estén secas las matas el perro siente muy poco.
+
+Para cazar las perdices en esa época del año se requieren más
+conocimientos, y el cazador consumado saca mucho partido de las que
+encuentra, dándose juego todo el dia, pues ya las perdices que han
+perdido el carácter de pollas, se fraccionan y van por su cuenta y
+riesgo. De suerte que el cazador debe, despues de elegido el terreno,
+formarse un plan y calcular bien las horas del dia que con su
+conocimiento y destreza puede colocar las perdices en terrenos bien
+escogidos de antemano para tirarles á su gusto y para que las salidas
+sean mortales.
+
+Ante todo ha de recorrer las mesetas de los cerros, buscar
+minuciosamente los comederos y esquivar un poco en las laderas; lo cual
+ahorra muchos pasos, bajadas y subidas, ahorro que no es de despreciar.
+
+Supongamos que vayan saliendo perdices á medida que se ejecute ese
+paseo; hay que despreciarlas y no impacientarse. Si tuviese el cazador
+el mal gusto de correr tras ellas, echaria á perder la jornada. Siga,
+pues, su tarea, que ya irán volando otras, como efectivamente sucede, y
+una vez recorridos los cerros que el cazador se habia propuesto, siendo
+poco más ó menos las diez de la mañana sin que se haya disparado un
+tiro, entonces llama al perro, toma un bocadito, fuma un cigarrillo, y
+mientras, se hace cargo del terreno, tranquilamente y sin olvidar el más
+pequeño detalle. Luego se vuelve á emprender la marcha, desandando el
+camino andado, tomando los senderos del promedio del cerro; de esta
+suerte va indemnizándose el cazador del rato que ha estado sin tirar,
+pues las perdices, escamadas de sus querencias, principian á resistir la
+muestra del perro, saliendo una tras otra, y con tino y buena puntería,
+el perro va trayendo las que se matan. A éste le da el cazador la tripa
+de la perdiz, empero si caen muchas bajo el plomo de la escopeta no es
+prudente regalar al perro con todas las tripas, pues les producen
+indigestiones: de consiguiente se le distrae dándole un poquito de pan y
+pasándole la mano cariñosamente por el lomo. El perro necesita ser bien
+acariciado, porque todo lo comprende y cumple de este modo mejor, y está
+á la obediencia de la más leve indicación del cazador.
+
+Seguiremos, pues, tranquilamente el camino indicado, llamando al perro
+si se adelanta: no conviene que vaya arrancando perdices si el cazador
+no puede tirar. Si se conoce el terreno, casi todas han de oir silbar
+los perdigones. Al encontrarse el cazador á ese punto de la cacería, no
+le aconsejo el descanso, pero sí que no le abandone la calma: el
+descanso no conviene, pues las perdices van saliendo de su asombro, y
+algunas de peon, otras de un vuelo, huyen de la ladera en que se ha
+propuesto cazarlas, perdiéndose inútilmente el tiempo empleado si se
+dejan cuando están cansadas; del segundo ó tercer vuelo apenas queda
+ninguna: de modo que la persecucion requiere actividad. Recórranse todas
+las matas, y donde no se pueda bajar, se arroja alguna piedra. Cuando se
+cree limpia materialmente la ladera, váyase en busca de las que se han
+visto retroceder, con la seguridad de encontrarlas y tirar todos los
+tiros á muestra del perro.
+
+Si se observa que las perdices van de pecho á tomar los cerros, y son
+por ejemplo las cuatro de la tarde, no hay que molestarse en
+perseguirlas, pues poco daño se las hará. Por tanto, dejarse de nuevas
+fatigas, y pausadamente abandónanse los bajos, se traspone la parte
+opuesta de la senda que se ha seguido por la mañana, recogiéndose para
+descansar y comer, que en ese caso bien necesitado está de reposo el
+cazador.
+
+De esta manera cazan las perdices los que se precian de cazar con arte,
+esto es, tomando siempre los altos. Cuando á uno le da por ser
+caprichoso y contra todas las reglas de la caza se empeña en principiar
+la cacería por los bajos y hondonadas, aunque halle las perdices, éstas
+se van de un vuelo á las cimas, y entonces poco daño se las hace. Sólo
+se puede tomar el cazadero por la mano baja cuando sopla con fuerza el
+viento, pues las perdices están á redoso; mas en este caso lo mejor es
+no salir á caza, pues el perro tampoco apercibe nada y se pierde
+miserablemente el tiempo.
+
+En el mes de octubre prepara el cazador la diversion para el resto de la
+temporada. En agosto descubre las crias, pero en octubre conoce ya
+fijamente dónde escogen sus querencias y tambien dónde las ha de dar la
+muerte. De manera que cuando hace el halagador descubrimiento de que en
+tal ó cual comarca hay perdices, debe ir allí á estudiar sus vuelos, y
+si los acierta, de fijo tiene asegurada una buena campaña de invierno.
+
+
+
+
+DICIEMBRE Y ENERO.
+
+
+Época poco agradable para dejar la cama; dias cortos, frios, lluviosos y
+fuertes heladas. Apenas la perdiz nota el menor ruido, ya vuela; en
+ninguna parte está bien. En este periodo del año come bellotas y las
+carnes se le vuelven acorazadas. La pólvora debe ser de primera y el
+perdigon granadito, número cinco. Se caza como se ha descrito
+anteriormente, con la sola diferencia de que los vuelos de las perdices
+son más largos y las horas de provecho de doce á dos de la tarde. Fuera
+de estas apenas podrá el cazador disparar un tiro. Si ha helado y se
+mantiene la escarcha, las perdices se encuentran en los raseros y
+metidas en las hondonadas ó barrancos, al abrigo del cierzo. No obstante
+estos inconvenientes, es la época del año en que queda más satisfecho el
+cazador cuando mata una perdiz, puesto que están en toda su pujanza y
+fuerza de vuelo: al momento de dar su tan acelerado brinco apenas dan
+tiempo de seguirlas ni un segundo; al instante se hallan fuera del
+alcance del tiro. Generalmente en estos meses la carambola está vedada
+para el cazador. El que cuelga al morral media docena de perdices,
+matadas en buena ley, se le puede con justicia darle el dictado de buen
+cazador y tirador.
+
+
+
+
+FEBRERO.
+
+
+En este mes el cazador no debe desperdiciar un solo dia. ¡Cuántas
+reflexiones acuden á la mente, y por cierto algunas muy tristes! Con los
+años entra el cálculo; y ¿quién sabe? Aunque todavía no peinemos canas,
+tal vez el año próximo habremos dejado de pertenecer al mundo de los
+vivos. ¿Si será mi destino que por última vez recorra el monte en que me
+encuentro? Mas, al diablo las ideas tétricas; todo en este mundo tiene
+su lado malo. Ocupémonos, pues, de las agradables impresiones que se
+experimentan cazando los _pares_.
+
+La naturaleza, que anuncia la proximidad de la primavera y que en todo
+es fecunda, hace que las perdices entren en amoríos y cada par se vaya
+ya fijando en sitios á propósito para el logro tranquilo de su objeto.
+El cazador hábil y que conoce lo que es el mundo, al internarse en un
+valle observando minuciosamente el país que se propone recorrer, debe
+echarse la cuenta del sitio que él escogeria si tuviese que requerir de
+amores á alguna aldeanita, esto es, reservado y al abrigo de todo
+airecillo, libre de visitas importunas. Aunque parezca extraño, en esos
+sitios que tu imaginacion poetiza debes ir á sorprender á las enamoradas
+perdices y darles cruel muerte, ó bien un susto mayúsculo. Esta es la
+ley del mundo, no respetar ni aun las cosas más sagradas.
+
+En esa época es muy fácil matar las perdices, porque resisten firmemente
+la muestra del perro. La hembra vuela primero, y caso de que el cazador
+la tire, no se mueva, pues aún falta el macho, el cual queda en el
+terreno muy _preocupado_ buscando á su dulcinea: en este caso arranca
+poco menos que de los piés; le apunta el cazador y casi casi puede decir
+que el negocio es seguro. Por esta circunstancia es preciso, cuando sale
+la perdiz, recorrer bien el terreno en un corto ruedo, y de fijo se mata
+el macho. Si las dos salen á un tiempo, se observa que la hembra va con
+la cabeza erguida y el macho la lleva baja, erizando las plumas y
+dejando colgar un poco las alas. Si se fija bien el cazador, jamás se
+equivocará tocante á este punto tan importante. Es preferible matar los
+machos, que abundan.
+
+¡Y cuántas veces se matan los dos! En tal caso, ¡qué alegría é impresion
+más agradable! El cazador se cree un sér privilegiado; mira á derecha é
+izquierda, todo ufano, pensando para sus adentros que nadie le aventaja
+en eso de tirar bien. ¡Vana ilusion! lo que hace uno lo hacen cien mil,
+pero no todos lo aprecian del mismo modo.
+
+Los pares no hacen los vuelos tan largos, y fijándose bien el cazador en
+la direccion que toman á poca distancia del cerro que trasponen, allí se
+hallarán. En la época que nos ocupa dejan mucho rastro, así es que el
+perro guia perfectamente hácia el sitio de su querencia. Algunas veces,
+de mí sé decir, sobre todo, que en el último tercio del mes de febrero
+he perdonado á la hembra. ¿Y por qué? se me preguntará. Porque me acude
+la idea de que en el terreno en que estoy dando la última mano, tal vez
+faltaria el bando en agosto, y hay sitios tan privilegiados que es muy
+sensible no queden en ellos perdices.
+
+Todo cazador debe dar por religiosamente terminada la campaña de la
+temporada, el último dia de febrero. Y supuesto que hemos llegado á él
+en nuestra descripcion cinegética, pasemos ahora á exponer las reglas
+generales y consejos que la experiencia nos ha sugerido.
+
+
+
+
+VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE CAZAR SOLO Ó ACOMPAÑADO.
+
+
+Hasta el presente el lector-cazador habrá observado (y digo
+lector-cazador porque al que no sea aficionado á la caza poco le
+agradezco que fije la vista en mis apuntes), que únicamente me he
+ocupado del modo de cazar cuando se va solo al monte en busca de
+perdices.
+
+Cazar solo, tiene el inconveniente de que uno se vuelve _salvaje_ é
+insociable, pues esto de enmudecer todo el santo dia es muy poco
+halagüeño. Sin embargo, el cazador se aburre, y no más, cuando
+trascurren horas enteras sin ver una pieza; si salen éstas al paso, la
+cosa varía de aspecto.
+
+Fácil es suplir la soledad llevando un criado, quien además de cargar
+con el peso, prepara el _gaudeamus_: con todo, no basta semejante
+compañía, ya que la conversacion jamás puede elevarse á grande altura.
+
+El mejor modo de cazar es con un compañero simpático, no formando los
+dos más que una sola voluntad; y aunque al llegar á las posadas no se
+hace la misma bromita que cuando van juntos varios, en cambio, cazando
+bien pueden sacarse grandes ventajas de la expedicion si son dos los
+tiradores. Ya en el terreno, el uno aguarda al otro, y se tiene ocasion
+de admirar y aplaudir un buen tiro; además, se puede seguir con tiento
+al perro que le rastrea un peon; se consulta el órden de caza, y dos
+votos condescendientes no tardan en estar conformes, cediendo un poco
+cada uno en sus pretensiones. ¿Sucede lo mismo siendo cinco ó seis
+cazadores en el monte, aunque sea gran maestro y conocedor del terreno
+el que guie la cacería? No, pues es muy difícil la _ciega_ obediencia á
+la voz del _jefe_; á lo mejor uno se queda rezagado, al otro se le ha
+dejado al tiempo de pasar un arroyo, otro no quiere cambiar de lado sin
+consideracion al que todo el dia le ha tocado un mal sendero. Esto y
+mucho más sucede cuando se caza con varios compañeros. ¿Y los perros? He
+aquí otro inconveniente. Al primer tiro, caiga ó no caiga la pieza, dan
+tal embestida que baten el terreno á doscientos metros de distancia, y
+los cazadores, ya sea con el silbato ó bien á grandes voces, ó
+llamándolos por su nombre les reprenden; de suerte que, tan bien
+preparado queda el terreno, que ya puede estarse tranquilo el cazador,
+liar un cigarrillo y fumárselo, despues de lo cual puede tambien pasarse
+la escopeta al hombro y seguir andando; de seguro que no tendrá que
+hacer uso de ella. Más extenso seria sobre este particular, pero
+suponiendo que lo que acabo de manifestar está al alcance de cualquier
+cazador experimentado, mis reflexiones sólo van dirigidas á los
+importunos que quieren siempre salir á cazar formando guerrillas y órden
+de parada.
+
+El señor baron de Córtes trata del mismo asunto en sus _Recuerdos de
+caza_, y si yo fuese á describir los inconvenientes que ofrece el cazar
+cinco ó seis á _mano gallega_, convertiríame en plagiario de dicho
+señor, además de que no sabria expresarlo con tanta lucidez.
+
+Añadiré, para concluir, que todo el que tenga un buen perro no lo lleve
+á ninguna cacería en que los compañeros pasen de tres, pues de seguro
+que el can adquirirá resabios difíciles de remediar.
+
+
+
+
+TERRENOS Y RECUERDOS AGRADABLES.
+
+
+Todos los cazadores muestran preferencia y predileccion por aquellos
+cazaderos donde más _víctimas_ han hecho. La caza de la perdiz en
+Cataluña, generalmente, hácese por terrenos penosos y montes bastante
+elevados. En este caso se encuentran las montañas de los alrededores de
+Barcelona, y como tanto se ha ido poblando y la aficion á la caza va en
+aumento, sucede que á los _domingueros_ les queda muy poco recurso para
+cazar, resultando que muchos regresan á su casa sin haber podido
+disparar la escopeta. Esta falta de caza motiva que gran número de
+aficionados se metan en el ferro-carril, largándose en busca de mejor
+fortuna, y sólo se detienen, ya sea entre Martorell y Gelida, ó bien
+bajan en Molins de Rey y llegan hasta Vallirana, en cuyos puntos hay
+excelentes cazaderos, pero muy quebrados; y como la caza se va
+extinguiendo, ya por la grande aficion que se ha despertado, ya por la
+poca vigilancia en dejar cazar en tiempo de veda y con ardides, esto
+hace que las cacerías den muy pobres resultados, y que el que regresa á
+su casa con un par de perdices se da por muy dichoso, pues ahora en los
+terrenos indicados no siempre se mata.
+
+Otros escogen la salida por la parte de Moncada, alargándose algunos
+hasta Montmeló, cazando por Sant Fost, Martoreyas y Rexachs, terrenos
+malos, si bien en ellos siempre hay perdices, y en el bosque y malezas
+puede tirarse á alguna becada, las cuales huyen de las _vernedas_ cuando
+hay fuertes heladas. El que tiene la voluntad de cazar en los
+mencionados terrenos va mojado todo el dia, pues allí la neblina es muy
+pertinaz. Si afortunadamente se logra hacer bajar las perdices hácia el
+Besós, á pesar de que hay mucha maleza, puede dispararse con provecho
+alguna vez la escopeta á muestra de perro. Esos terrenos son muy
+penosos, ya por la topografía del país, así como por las humedades, por
+cuyo motivo la experiencia aconseja no ir con frecuencia á dicho sitio.
+
+Otro cazadero hay, tal vez el más predilecto por parte de las perdices
+para hacer sus crias; refiérome al monte de Moncada, en cuyo cerro
+descuellan las ruinas del ex-telégrafo y cuerpo de guardias. El cazador
+barcelonés que no haya cazado en ese cerro, cuente que le falta algo por
+ver, pues además de la perspectiva que desde él se descubre, hay ricos
+manantiales de agua, inclusa la célebre _Font del ferro_, que da frente
+al Besós, y por la parte opuesta la no menos renombrada _Font de mitja
+Costa_ (hoy dia bastante abandonada), en cuyo sitio los cazadores han
+echado muchas _chuletadas_. Tales son las ventajas que ofrece el cazar
+en ese monte, porque si la caza no va bien, en cambio se indemniza con
+el almuerzo y el bello panorama que disfruta la vista, olvidándose del
+cansancio que produce la llegada hasta el _telégrafo_, por cuyo punto es
+indispensable tomar la mano del cazadero, y de seguro que á la mañanita
+siempre se encontrarán perdices, las cuales dan juego al cazador todo el
+dia: hay sorpresas buenas y por la mano baja se caza bien.
+
+Hoy dia tales salidas figuran en la categoría de las llamadas de
+recurso, ya que los ferro-carriles han acortado prodigiosamente las
+distancias, de suerte que los que pueden disponer de algun tiempo lo
+emplean en ir en busca de cazaderos lejanos, ya sea al confin de la
+provincia ó á otra lindante con la nuestra.
+
+En las estaciones de Calaf, San Guim, Tárrega, no pasa tren sin que
+bajen de él algunos cazadores procedentes de Barcelona. Los que se apean
+en Calaf se dirigen á los cazaderos distantes tres ó cuatro leguas,
+dándoles tales batidas en los primeros meses, que luego quedan pocas y
+_escamadas_, por cuyo motivo se caza bien en Calonje, Prats de Rey,
+Coletas, Torá, Biosca, etc.
+
+Los que bajan en San Guim... ¡oh! esa ya es harina de otro costal. De
+este punto y de su campiña hablaré apasionadamente, bien lo sé; pues se
+me figura que voy á hacer el elogio de un hijo de mis entrañas. Con la
+benevolencia del lector-cazador, que espero me conceda, me tomaré la
+libertad de ser algo extenso en este párrafo. Es terreno aquel que
+conozco palmo á palmo. Desde San Guim á Calaf, de la Rabasa á Cervera, y
+por otro lado de Pujal y Santa Fé y de Rubiñan á Talavera, cuadrilátero
+de diez leguas, hay un sinnúmero de cazaderos tan bellos y agradables,
+que nada mejor puede exigir el cazador. La primera vez que cazé en dicho
+sitio era bisoño en el arte, yendo agregado á la _cuadrilla_ de los
+_cazadores de Gracia_, todos honrados menestrales. Agustin Cusí siempre
+era el que llevaba la batuta en la cacería y merecia el puesto de
+director, pues sabia cazar, y matar mejor, hallándose además dotado de
+un conocimiento especial para decir: _allí están las perdices_. Este
+buen amigo, sea por simpatía ó por lo que fuere (lo cual le agradezco
+en el alma), dióme muy buenas lecciones, lástima que no las aprovechara.
+Como por falta de salud tiempo hace que Cusí no puede salir á la caza,
+han trascurrido algunos años desde que campo por mis respetos, pero de
+mi pecho no se ha borrado el agradecimiento y el grato recuerdo de mi
+excelente maestro.
+
+El cazador que en San Guim pueda disponer de una semana _redonda_ cuenta
+con grandes recursos, ya que cada dia le es dado cazar en terrenos
+nuevos y de buenas querencias; y advertiremos á los de Madrid, por si
+alguna vez quieren visitarnos, que aunque no podemos ofrecerles el
+_Pardo_ ni _Viñuelas_, tenemos en cambio _La Panadella_, _El Bosch d'en
+Carbasa_ y otros sitios. Aunque sea á riesgo de disgustar á algun amigo,
+no puedo con aquello de _tente lengua_... dejar de mencionar como le es
+fácil á uno gozar una semana enterita en San Guim, cazando cada dia en
+terrenos diferentes.
+
+El tren llega al medio dia, y por consiguiente, aunque se esté afanoso
+de escopetear las perdices, por necesidad (bien que por poco tiempo) hay
+que limitarse á cazar en los alrededores de la estacion, donde nunca
+faltan un par de bandos que, tomándolas bien en mano, condúcelas el
+cazador á las cercanías de Freixanet ó bien á San Domí, y aprovechando
+los tiros aún se lleva uno señales de caza á la posada. He aquí poco más
+ó menos lo que puede hacerse en la tarde del primer dia. Recomiendo á
+los cazadores para alojarse, el _hostal_ situado á tiro de pistola de la
+estacion, ó bien, no estando demasiado fatigados y con humor de andar un
+cuarto de hora, se acomodarán bien y como en familia en casa Riera, de
+Amorós, grupo de tres casas. Allí vamos á parar con mi amigo Suñol
+(Paco), y es tanto el cariño que profesamos á los de la casa y éstos nos
+corresponden tan bien, que solemos sacrificar el siguiente dia de
+nuestro arribo, no acudiendo hasta el venidero á los cazaderos que _in
+mente_ hemos destinado como teatro de nuestras _proezas_.
+
+Al otro dia ya uno puede tomar por el monte dejando á su espalda el
+pueblo de Freixanet y dando la cara á Cervera. A simple vista el cazador
+quedará sorprendido del hermoso terreno que pisa, querencioso para la
+caza. A ambos lados, montañas de tres horas de extension, en medio de
+fértil valle cubierto de campos de trigo, viñedos y alguna que otra
+hortaliza. Si bien en este terreno las perdices se van largas, se las
+conduce á las últimas estribaciones del monte, ó sea en los bajos, y
+como siempre ahí es donde se las hace daño, aconsejamos al cazador que
+al término de esta jornada, agradabilísima por los lances que
+sucesivamente se presentan, descanse y pida asilo en Montpalau,
+pueblecito situado en una eminencia. Allí moran los Vilaplana, sencillos
+labradores que se desviven por dar buena pitanza y mejor cama á todos
+los cazadores que se presentan. Si durante esta jornada, como es muy
+probable, sólo se ha logrado recorrer una parte del cazadero, conviene
+emplear el dia siguiente para batir el resto. Al salir del pueblo se
+irán siguiendo los montes que quedan á la izquierda, y corriéndose
+siempre hácia Cervera, se van llevando las perdices adelante; al tercer
+vuelo intentan éstas retroceder para volver á sus querencias, y entonces
+es cuando se las castiga. Semejante cacería concluye siempre á medio
+dia, enfrente del pueblo de Santa Fé; y á la sazon ha de calcular el
+cazador si le conviene retroceder por los bajos hasta el punto de
+partida, ó atravesar la hondonada y cazar de regreso en la solana que
+hay entre Santa Fé, Vergós y Altadill. Para esta parte de la cacería
+casi más vale emplear otra jornada, pero si los cazadores son dos ó tres
+y saben cazar, aunque hay pocas perdices se las conduce bien y se las
+escopetea mucho. El monte presenta infinitas sesgaduras y hay bastantes
+matas, por cuyo motivo la caza resiste bien la muestra del perro. El
+término de esta jornada es Altadill, pueblecito de cuatro casas paralelo
+al norte de Montpalau y que sólo dista un cuarto de hora de él.
+
+El siguiente dia se toman providencias para cambiar de cazadero; y éste
+debe ser el de _La Aygua escampada_, distante una legua escasa del
+pueblo de Montpalau, y como por lo regular el término de la cacería es
+_Timó_, la experiencia aconseja que el cazador se encamine al _Mas d' en
+Jaumet_, situado á la derecha de la carretera y dos horas lejos de
+Cervera y quince minutos de _Timó_. La cacería ha de principiar por la
+mañana, en las estribaciones del pueblo de la Rabasa, y desde este punto
+ya el cazador sabe lo que debe hacer todo el dia. Descúbrese á la
+izquierda otro pueblo, el de Montbrió, y en los cerros de la derecha
+pasa el tren de Zaragoza, donde está emplazada la via. A lo lejos se
+divisa _Timó_, rodeado de montecillos cubiertos de matas de tomillo, y
+si las perdices vánse por aquel lado, se las zurra de lo lindo, pues
+esperan mucho. Los terrenos que acabo de describir llevan el nombre de
+_Aygua escampada_. Los montes tienen bastante base, pero escasos
+desaguaderos, por cuyo motivo las lluvias se han abierto cauces, y sin
+ser quebrado el terreno se hace penoso para el cazador á causa de las
+muchas subidas y bajadas; mas, si se logra meter las perdices en estos
+sitios, arrancan todas arrepulladas y se las tira bien. En los terrenos
+que acabo de citar, aunque no he hablado de la liebre, por no ser este
+mi objeto, las hay abundantes y se tiran bien, no pasándose dia que no
+se vean cuatro ó cinco, lo cual presta nuevo aliciente al cazador que se
+mete por tales andurriales.
+
+Penetremos ya en el célebre _Mas d'en Jaumet_ y vamos á ver cómo nos
+trata la Antonia, á quien han dejado sola, pues su hija (Antonieta)
+enlazóse con un rico propietario dels Hostalets, pueblo que dista media
+hora del _Mas_. La casa está que ni pintada para los cazadores:
+espaciosa sala, buenas alcobas y camas blandas, mesa muy regular, pues
+hasta saben presentar un buen puchero, alimento muy conveniente al
+cazador para reponerse de las fatigas del dia. De esta casa, cuya _fama
+voló algun dia por el mundo de los cazadores_ (estilo cajetillesco), van
+desapareciendo sus antiguos dueños, á medida que va ausentándose la caza
+de sus contornos. Muchos cazadores han dejado de frecuentarla por lo
+tristes que allí se hallan, y sólo impenitentes, tales como mis amigos y
+excelentes cazadores Suñol (Paco), el _rebelde_ Vilaseca y un _servidor
+de ustedes_, acudimos allí con frecuencia, pues conocemos bien las
+querencias de la caza y el sitio en que podremos matar las piezas, con
+la certeza de asegurar hasta el número de disparos que debemos efectuar
+segun el punto adonde conduzcamos las perdices.
+
+Mas, al pensar el cazador que quince años atrás siempre se llevaba en
+movimiento una cincuentena de perdices, mientras que ahora en llegando á
+noviembre cuando se encuentra un bando de seis ó siete es un
+acontecimiento, apenas tiene calma para escuchar á los idiotas pastores
+y rabadanes que dicen: Este año á lo menos hemos cogido en el término de
+Montbrió unos _cuatrocientos huevos_ y más de veinte _hembras en sus
+nidos, con el lazo_ (histórico). Y no se crea que se necesita mucho
+tiempo para recorrer el término citado, pues basta media hora escasa.
+Sólo cito á Montbrió como ejemplo; los pastores se alaban en todas
+partes de hacer lo mismo, aunque esté presente el alcalde del pueblo, y
+hasta se lo contarán á la primera pareja de la guardia civil que
+encuentren.
+
+Abandonemos, pues, el _hostal d'en Jaumet_ con el corazon dolorido por
+no poderlo visitar más á menudo, ya que en sus alrededores falta el
+principal aliciente del cazador, la caza, y emprendamos la jornada
+llamada de la _Carretera_ hasta la Panadella.
+
+Esta cacería, constitúyela el terreno _mejor del mundo_. Figuraos (me
+dirijo al cazador que no haya estado) una red de montecillos (tal vez
+ascienden á cien), que un par de cazadores inteligentes recorren en una
+jornada: cada uno de estos montes forma una pequeña meseta donde
+juguetean las perdices comiendo alguna bellota, al par que con el paso
+de las carretas que transitan á doscientos metros de allí se entretienen
+y acechan los excrementos que van dejando las caballerías en el camino,
+pues esas aves son aficionadas al grano que encuentran entre el
+estiércol. Serpentea la carretera por entre dichos montecillos, y desde
+la Panadella, ya provincia de Lérida, hasta Cervera, forma un plano
+inclinado encajonado entre dos angostos rierales, que llevaron la
+desolacion á Tárrega, en setiembre del 74, hinchados por las grandes
+lluvias de aquellos dias. El cazador que sabe lo que hacen las perdices
+en estos terrenos, ha de seguir por la mañana los lindes de la
+carretera, si bien son tan querenciosas de dichos sitios las aves, que
+hay dia que de arriba á abajo se pierde el tiempo sin poderse salir de
+allí, y esto trabajándolas bien, en cuyo caso lo que más disgusta son
+los testigos, pues para cazar cómodamente se necesita estar solo.
+
+Cuando las perdices atraviesan al vuelo la carretera, no hay que
+molestarse en perseguirlas. El cazador que conoce este juego debe cazar
+de modo que las obligue á quedarse en la misma ladera, y que de ésta
+pasen á los bajos de Palamós, preciosa ribera de zanjas: allí quedan
+pegadas como con obleas y por la tarde reciben una zurra de padre y
+señor mio.
+
+En todas estas cacerías conviene ir acompañado de un mozo que cargue con
+las liebres, pues éstas se matan á menudo: hay bastantes, salen bien y
+en limpio.
+
+Podria contar muchos lances de las liebres que se encuentran en este
+terreno, pero ya he manifestado que me apartaria del objeto de este
+libro. Diré sí, para inteligencia de los aficionados, que se matan en
+abundancia.
+
+Hora es ya de regresar al punto de donde salimos al emprender nuestra
+cacería, es decir, San Guim, y entremos otra vez en casa Riera de
+Amorós, donde seremos recibidos con agrado.
+
+El cazador, cazando cuatro dias seguidos ya tiene suficiente, máxime
+cuando uno observa que el perro sigue aspeado y casi de mala gana,
+pero... queda otro terreno que todo conocedor de él no puede dejar de
+recorrer; me refiero al célebre _Bosch d'en Carbasa_, llano de mas de
+una legua en cuadro, donde se encuentran buenos bandos de perdices,
+liebres y en invierno becadas. En ese terreno se fusilan muchos árboles,
+aunque las perdices arranquen de cerca, pues es tal la espesura de la
+arboleda que sólo se las tira bien aprovechando un claro. Conviene,
+pues, dar una fuerte batida y cruzar por todos lados para sacarlas de la
+dehesa y llevarlas á los márgenes de los montes vecinos, ya que allí se
+dejan parar por el perro. Demos fin á este capítulo, porque nos llaman
+otros asuntos _importantes_ relativos al noble arte cinegético.
+
+
+
+
+CAZAR DE MALA LEY.
+
+
+Los verdaderos cazadores dicen que caza de mala ley todo aquel que va
+con el _reclamo_ y forma con el ramaje un _tollo_, y en el cerro ó en
+sitio á propósito para su objeto emplaza su _jaula_, y con el
+_cuchichí_, _cuchichí_ atrae al perdigon, dejándole muerto en el
+terreno.
+
+Este modo de cazar tan en boga en Madrid, segun nos describe el señor
+Escrich en su obra _Los Cazadores_, donde aparecen las maravillas de sus
+reclamos _Chaparro_ y _D. Juan_, me ha hecho en verdad muy poca gracia.
+El mal ejemplo es contagioso, y si éste dimana de un cazador aficionado
+á la escopeta y al perro, aún es menos excusable. No basta citar en
+apoyo del _reclamo_ la obra _Arte de cazar la perdiz_, impresa en
+Sevilla en 1855, en la cual, fundándose su autor en que todos los
+cazadores son unos _traidores_, declara que cualquier medio empleado
+para matar la caza es justificable. Si este argumento se pusiera en
+práctica, no habria caza posible; el _reclamo_ tampoco serviria. Era lo
+que bastaba para concluir con toda clase de volatería, en cuyo caso la
+escopeta podria emplearse en cazar ranas y murciélagos, que bien valdria
+la pena de tirar á estos dos bichos á falta de cosa mejor.
+
+En Cataluña hay poca aficion al _reclamo_, pero los que así cazan no
+llevan el título de cazadores, y hasta en su propia casa ocultan el
+_arma-farol_ homicida si ven entrar un cazador de escopeta; les
+avergüenza su método de caza. En Cataluña sólo van al monte á fijar el
+reclamo los _cazadores_ panzudos.
+
+Otros medios muy repugnantes se emplean para exterminar la caza, tales
+como los _lazos_, el _caldero_ y _cerquilla_, la _rameta_ y las
+_corridas_ que la dan en varias comarcas, cuyo nombre es _á la
+cansada_..... pero todos los que emplean estos ardides, son conocidos
+entre los cazadores, con el nombre de _rateros_.
+
+Si los gobernadores de provincia pudiesen ocuparse más de la
+administracion, pasando severas circulares á los alcaldes de los pueblos
+para que denunciaran estos abusos á cuantos faltan á la ley de caza, no
+tendríamos que deplorar su completo exterminio. El mal es grave, y urge
+poner coto á tantos desmanes.
+
+Hace tiempo sólo se pide la licencia de caza á la vista de Barcelona. En
+los demás puntos nadie repara quien lleva escopeta y á lo que va. De
+seguir así, la caza en España sólo será un recuerdo legendario.
+
+
+
+
+NUESTROS CAZADORES.
+
+
+Es justo que dedique un capítulo de mi _obrita_ como recuerdo á nuestros
+émulos de san Eustaquio. Los viejos cazadores de esta provincia van
+desapareciendo para no volver. La sencillez de sus costumbres, la poca
+importancia que daban al mérito y fama que en su tiempo conquistaran de
+excelentes cazadores, sus escopetas de chispa, los cañones Ripollenses,
+de los _tres sietes_, sus cacerías en los alrededores de Barcelona, la
+mortandad de perdices que continuamente hacian en lo que hoy llamamos el
+_Putxet_[1], sus salidas á los fosos de las murallas con traillas de
+perros, matando á la sazon más conejos allí donde ahora se levantan los
+mejores edificios de la capital, que actualmente en cualquiera salida á
+la distancia de veinte y cinco kilómetros, todo esto es digno de
+recordacion. ¡Y con cuánto placer se escuchan aún tan agradables
+conversaciones! ¿Quién no se deleita al oirles? Aún quedan restos de tan
+honrosa pléyade, disminuida por los achaques y la vejez, abriéndose paso
+los contemporáneos, para quienes se ha simplificado mucho la diversion,
+merced á los últimos adelantos, y sobre todo á las vías férreas, que
+permiten recorrer en poco tiempo la provincia de uno á otro confin.
+
+ [1] Pueblo situado á cuatro kilómetros de Barcelona.
+
+Entre nosotros viven los Mateus, los Angladas, los Anfruns, los Torras,
+los Sandiumenges, los Martorells, los Suñols y muchos otros tan diestros
+como los mencionados, cuya aficion á la caza raya en delirio,
+lamentándose de verla desaparecer por las causas indicadas.
+
+Lástima es que habiendo tanta predileccion en Barcelona por el ejercicio
+de la caza, carezcan los cazadores de un punto de reunion. Años atrás se
+abrió un casino con el objeto de hablar de cacerías y hasta para
+reclamar colectivamente sobre cualquiera infraccion de la ley de caza;
+pero... tuvo que cerrarse por algunas pequeñeces y miserias. Resultado
+de esto es, que el que quiere saber algo de las salidas debe acudir á
+los establecimientos de los amigos Anfruns y Maciá, y allí siempre se
+coge algo al vuelo.
+
+Algun tiempo servian para el caso algunos establecimientos; pero como la
+política lo invade todo, ésta tiene siempre la palabra, y los cazadores
+que no están por _música_, poco á poco han dejado de frecuentar aquellos
+centros.
+
+Esto ha contribuido á que el noble arte de la caza se haya elevado á
+poca altura en Barcelona y á que muchas de las buenas cacerías que
+todavía se llevan á cabo pasen completamente desapercibidas para el
+_mercado_ de los cazadores.
+
+
+
+
+MÁXIMAS Y CONSEJOS.
+
+
+Los cañones de la escopeta deben mirar siempre al cielo.
+
+ * * * * *
+
+Aunque se tenga la seguridad de que está descargada la escopeta, cuando
+se está en actitud de descanso jamás deben apoyarse los codos en la boca
+de los cañones, ni dirigirlos nunca en direccion á ningun compañero.
+
+ * * * * *
+
+Si una pieza marcha en direccion á algun punto que haya la más remota
+probabilidad de hacer daño, no se le tira.
+
+ * * * * *
+
+En los sitios de pasos peligrosos para las caidas, se pondrá el
+disparador de la escopeta al _seguro_.
+
+ * * * * *
+
+Antes de pasar los umbrales de tu casa ó la de cualquiera, se descargará
+la escopeta.
+
+ * * * * *
+
+Buscarás la caza en verano en los umbriles, y en invierno en las
+solanas.
+
+ * * * * *
+
+Se cazará siempre contra el viento, para evitar que la caza se aperciba
+de las pisadas del cazador y ser más favorable al perro que recibe los
+vientos de ella.
+
+ * * * * *
+
+Si te has propuesto cazar varios dias seguidos, el primer dia debes
+retirarte temprano, para acostumbrarte á la fatiga.
+
+ * * * * *
+
+No bebas mucha agua, pues hasta cierto punto ésta no apaga la sed, y sí
+quita las ganas de andar. Lo mejor es _tragos_ de _vino aguado_.
+
+ * * * * *
+
+Cuando yerres muchas piezas, entonces descansa un poco, y de este modo
+la excitacion se calma y se tira mejor.
+
+ * * * * *
+
+La caza cansada es la que se debe perseguir. No tengas capricho de ir en
+busca de nueva.
+
+ * * * * *
+
+Cuando obsequies á algun amigo á cacería, en terreno desconocido para
+él, cédele siempre los sitios de preferencia.
+
+ * * * * *
+
+En las cacerías se conoce la buena educacion de las personas.
+
+ * * * * *
+
+Cuando se vaya á alguna cacería en compañía de varios amigos y se
+pregunte al regreso por quién ha muerto más ó menos piezas, la
+contestacion debe ser: _tantas piezas en total_.
+
+Jamás lleves al entrar en los pueblos la caza colgada fuera del morral,
+pues hace muy _niño_.
+
+ * * * * *
+
+Si no quieres _deshonrar_ el buen nombre de cazador, no debes, en
+cualquier caso que te encuentres, comprar ninguna pieza de caza.
+
+ * * * * *
+
+No creas que sean buenos cazadores los que todos los dias cambian de
+escopeta y perro.
+
+ * * * * *
+
+Cazador que use anteojos, pocas perdices matará.
+
+ * * * * *
+
+No lleves el perro perdiguero en las cacerías de conejos.
+
+ * * * * *
+
+Si en algo estimas el perro, no lo prestes á nadie.
+
+ * * * * *
+
+Si alguna vez tienes alguna querella en el monte por asunto de caza,
+transige siempre á favor del dueño ó colono.
+
+ * * * * *
+
+Siguiendo las máximas y consejos indicados, puedes lanzarte por esos
+mundos de Dios, amigo cazador, con toda la tranquilidad y satisfaccion
+que requiere el cazar, con escopeta, al vuelo y perro de muestra.
+
+
+
+
+EPÍLOGO
+
+Dedicado al Teniente general D. Lorenzo Milans del Bosch.
+
+
+Escrita la presente obrita ó lo que quiera llamarse, llega á mis manos
+el libro que V. acaba de publicar, titulado: _La Caza. Utilidad de su
+conservacion._ Doy á V. la más cordial enhorabuena por su nueva
+elucubracion y por el fin laudable que en ella se propone, es á saber:
+la conservacion de la caza por medio de una ley previsora que evite su
+exterminio.
+
+Cuando leí el libro _Los Cazadores_, su autor D. Enrique Pérez Escrich,
+admiré el gracejo con que está escrito; mas ¡con cuánta amargura víle
+hacer la apología de los reclamos y dar á los que los usan el título de
+cazadores! En mi concepto los tales no son más que unos _fusileros_.
+
+Despues el señor baron de Córtes, en su libro _Recuerdos de caza_, sale
+indirectamente á la defensa del cazador de buena ley, es decir, con
+escopeta, al vuelo y perro de muestra, y por deferencia (no puede ser
+otra cosa) transige con el reclamo; empero á condicion y como recurso de
+la edad madura, pues parece que al señor baron ya le fatigan los
+_repechos_. Con todo, estoy convencido, atendida la valía de ese
+cazador, que no _deshonrará_ las glorias conquistadas en su larga
+carrera cinegética.
+
+Su libro, señor Milans, vale mucho, y los cazadores lo han de reconocer
+así. La caza va desapareciendo de nuestras fértiles comarcas, siendo
+tanto lo que se abusa en el asunto que, como dice V. muy bien, ésta
+pronto será un mito.
+
+Mientras se permita á los pastores llevar perros de sentido para que á
+lo mejor se dirijan á la yacija de la liebre y la devoren los gazapos, ó
+destrocen las polladas de las perdices, y que los _rabadanes_ cojan los
+huevos comiéndoselos en tortilla; mientras por las fiestas mayores de
+los pueblos de corto vecindario se tolere que la juventud se reuna y
+tome posiciones en las eminencias, y, _allá va, allá viene_, cansen á
+las perdices cogiendo de una vez dos ó trescientas, para con su producto
+pagar el gasto de la fiesta, presidida siempre por el señor alcalde;
+mientras en Cataluña, y sobre todo en la Segarra, haya tantos
+_ramalistas_ que á mansalva y á engaño, de un tiro maten diez ó doce
+perdices; mientras en los pueblos de Levante se vean tantos _ñiñoleros_
+que á montones las estrangulan; mientras haya el _caldero_, y la
+_linterna_ y la jaula con el _reclamo_, y pueda salir éste en pleno dia
+á vista y paciencia de las autoridades de la capital de España; mientras
+existan gobernadores de provincia que telegrafien porque en tal ó cual
+sitio se ha extraviado un reclamo; mientras un propietario con su
+jaulita y el _cuchichí_ pueda atraer á su propiedad caza que no le
+pertenece y matarla en cualquier época del año; mientras á los
+indivíduos del somaten se les permita sin licencia de caza piratear por
+todos los montes; mientras... ¡esta es la gorda!... anuncien los
+papeles públicos que en marzo, abril, mayo, junio y julio, _el señor
+presidente del Consejo de ministros, etc., con el conde tal ó cual y el
+ex-ministro de esa ó de aquella procedencia han salido á cazar á los
+montes de_...; mientras vea V. todo eso, inútil que se canse en escribir
+libros para la conservacion de la caza. Si se aplicara la ley
+principiando por los de arriba y por los que han de dar buen ejemplo, no
+dude V. que los de abajo cumplirian mejor.
+
+Mi humilde opinion es que basta la ley que hoy rige en la materia, con
+tal de que se cumpliera.
+
+La que V. propone limita la época de caza á cinco meses, y de aprobarse
+¿sabe V. lo que sucederia? Que los cazadores que observamos
+estrictamente la ley, haríamos inútilmente el sacrificio de dos meses,
+mientras que los _rateros de monte_, el uno por ser propietario, el otro
+porque la caza _se le come la sembradura_ (éste la extermina en caso
+necesario hasta con estrignina), el de más allá para venderla, la
+perseguirian lo mismo que ahora.
+
+V. no ignora, mi general, que en nuestro querido país sacan en las
+fondas perdices cluecas en el mes de mayo, y en julio perdices pollas,
+lo cual consideramos los españoles bocado delicado, sin rechazarlo
+enérgicamente. Así pues, mientras miremos la cosa con tanta calma y no
+se respete la ley, sino que, al contrario, hasta por lujo se infrinja;
+mientras, repito, no se ponga un correctivo á todo esto, sostendré que
+la ley de caza que rige es buena y retebuena, siempre que se cumplan sus
+artículos, y en este caso, yo ó cualquiera, sin ser cazador de fama ni
+mucho menos, como los Pepe Real, Ahumada y otros, admitiria por mi
+cuenta, en compañía de mi _Pito_, el noble desafío con que les brinda V.
+de matar, en noviembre del 77 y en campo libre, las seis perdices que V.
+les propone.
+
+Dispense V. mi osadía, señor Milans, en dedicarle este epílogo. Si es de
+su agrado, quedará muy satisfecho,
+
+ Su paisano Q. B. S. M.
+ Manuel Saurí.
+
+ Barcelona 15 de diciembre de 1876.
+
+
+FIN.
+
+
+
+
+ÍNDICE.
+
+
+ Págs.
+
+ PRÓLOGO.--El porqué de la obra. 5
+
+ Traje del cazador. 7
+
+ La escopeta. 9
+
+ Municiones. 10
+
+ Perro perdiguero. 11
+
+ Modo de tirar á las perdices. 13
+
+ 1.º de Agosto. 17
+
+ Setiembre. 25
+
+ Octubre y noviembre. 29
+
+ Diciembre y enero. 33
+
+ Febrero. 34
+
+ Ventajas y desventajas de cazar solo ó acompañado. 37
+
+ Terrenos y recuerdos agradables. 39
+
+ Cazar de mala ley. 49
+
+ Nuestros cazadores. 51
+
+ Máximas y consejos. 53
+
+ EPÍLOGO.--Dedicado al Teniente general D. Lorenzo
+ Milans del Bosch. 56
+
+
+FIN DEL ÍNDICE.
+
+
+
+
+MANUEL SAURÍ, EDITOR. BARCELONA.
+
+EXTRACTO DEL CATÁLOGO.
+
+
+=El pastelero moderno=.--NOVÍSIMO MANUAL DE PASTELERÍA. El más completo
+de los publicados hasta el dia. COMPRENDE las fórmulas más usuales para
+la confeccion de toda clase de pastelería, tanto francesa como italiana,
+española, inglesa y alemana, y el MODO DE COCER LOS PASTELES SIN HORNO.
+Libro de suma utilidad PARA PASTELEROS Y FAMILIAS. Escrito por una
+notabilidad en el arte.--=Mil fórmulas para pasteles y 100 grabados.= Un
+t. 8.º mayor, 12 reales.
+
+=Arte de hacer vinos.= Manual Teórico y Práctico del arte de cultivar
+las viñas, el cultivo y abono de las tierras, eleccion y plantacion de
+las cepas, sus enfermedades y modo de curarlas; de la poda y cava; modo
+de hacer el vino natural y artificial, etc., por D. Nicolás de
+Bustamante.--Un tomo en 4.º con una lámina, 12 reales.
+
+=Las plantas industriales.= Tratado curioso del cultivo y
+aprovechamiento de las plantas testiles, oleaginosas, tintóreas y otras
+que son objeto de la industria; por varios agrónomos. Obra de sumo
+interés para los tejedores, estampadores, tintoreros y pintores; para
+los fabricantes de aceites, vinos, aguardientes, licores, sidras, y en
+fin, para los cosecheros ó cultivadores de dichas plantas.--Un tomo en
+8.º mayor, 12 reales.
+
+=Manual del diamantísta y del platero.= Tratado de las piedras
+preciosas, finas é imitadas, de los metales, su aleacion, esmalte,
+soldadura y demás procedimientos relativos á estas artes; segunda
+edicion. Un tomo en 8.º mayor, 10 reales.
+
+=Manual completo del tintorero.= Obra teórica y práctica puesta al
+alcance de los tintoreros, quitamanchas y toda clase de personas, por A.
+D. Vergnaud; segunda edicion, refundida y considerablemente aumentada
+segun los adelantos del dia. Un tomo en 8.º mayor, con láminas, 20 rs.
+
+=Manual para construir toda clase de relojes de sol=, por J. de Arfe,
+adicionado con un tratado de los relojes de sol horizontales,
+verticales, laterales. Ilustrado con 28 grabados intercalados en el
+texto para su mejor inteligencia; segunda edicion. Un tomo en 8.º mayor,
+4 rs.
+
+=Manual completo del encuadernador y rayador.= Nueva edicion corregida y
+aumentada, con láminas. Un tomo en 8.º, 14 rs.
+
+=Fábulas de Esopo=, corregidas y aumentadas con las de otros famosos
+autores. Nueva edicion con grabados _sui generis_. Un tomo en 8.º, 5 rs.
+
+=Historia de la vida y hechos= y astucias sutilísimas del rústico
+Bertoldo, la de Bertoldino su hijo, y la de Cacaseno su nieto. Nueva
+edicion con grabados _sui generis_. Un tomo en 8.º, 6 rs.
+
+=El Buffon de los niños.= Compendio de Historia Natural. Arreglado para
+la enseñanza pública y adoptado en clase de premio, por D. M. Pons y
+Fuster; tercera edicion con más de cien grabados, 10 rs.
+
+=El oráculo de Napoleon=, ó sea _El libro de los destinos_. Un tomo en
+4.º, quinta edicion con una gran lámina, 10 rs.
+
+=Libro del destino=, del amor y de la fortuna. Un tomo en 16.º, 4 rs.
+
+=El oráculo de las señoras y señoritas=, consejero del bello sexo. Rica
+impresion en 8.º mayor, 8 rs.
+
+=El talisman de los sueños y de visiones nocturnas=, por Miguel
+Nostradamus, famoso astrólogo: tercera edicion. Un tomo en 8.º, 6 rs.
+
+=Juegos de manos= ó sea arte de hacer diabluras, por Minguet, con
+grabados. Un tomo en 8.º, 4 rs.
+
+=Flores de invierno=; coleccion de juegos de manos. Un tomo en 8.º con
+grabados, 8 rs.
+
+=El libro negro= ó la mágia, ciencias ocultas, explicaciones de célebres
+talismanes, el arte de adivinar por los naipes y el de ECHAR LAS CARTAS,
+llave de sueños é infinidad de grabados: séptima edicion. Un tomo en
+8.º, 10 rs.
+
+=Nuevo arte de cocina=, teórico práctico, adicionado con un tratado de
+hacer conservas y en forma de apéndice. El Manual del licorista, por D.
+Juan Altimira: sexta edicion. Un tomo en 16.º, 6 rs.
+
+=El lenguaje de las flores y el de las frutas.= Un tomo en 8.º mayor,
+con grabados y cromos, 10 rs.
+
+=Secretos de la naturaleza=, por Jerónimo Cortés. Nueva edicion
+refundida y aumentada. Un tomo en 8.º can grabados, 4 rs.
+
+=Ramillete de felicitaciones=, para todas las ocurrencias de la vida:
+novena edicion. Un tomo en 16.º, 4 rs.
+
+=Cria del conejo doméstico.= Sistema celular, con ahorro de tiempo y
+dinero segun experiencia de muchos años, por Manuel Martorell y Peña.
+Segunda edicion aumentada. Un cuaderno con láminas, 4 rs.
+
+=El estado interesante.= Manual de la mujer embarazada, remedios fáciles
+y seguros para corregir las afecciones del embarazo, por el Doctor D.
+Antonio Pons y Codinach, segunda edicion, 4 rs.
+
+=Manual de la madre de familia.= Contiene: afecciones propias de la
+mujer embarazada y medios de remediarlos, con arreglo al sistema
+homeopático. Consejos á las madres. Enfermedades de los niños de pecho,
+y su tratamiento por el mismo sistema, por D. Pedro M. Brun, licenciado
+en medicina y cirugia. 1 tomo en 16.º 4 rs.
+
+=Tesoro de juegos de sociedad.= Contiene las reglas y leyes de más de
+treinta juegos permitidos en toda clase de sociedades, casinos,
+reuniones particulares y cafés. El tresillo, billar, ajedrez, whist,
+dómino, lotería, chaquete, damas, solo, cuidadela, malilla, ecarté,
+batalla, báciga, etc., etc. Segunda edicion corregida y aumentada, 6 rs.
+
+=Libro de chistes=, chascarrillos y bromazos. Un tomo en 16.º, con
+grabados, 4 rs.
+
+ENCICLOPEDIA HIGIÉNICA DE LA BELLEZA. =Fisiología descriptiva de las
+treinta bellezas de la mujer.= Análisis histórico de sus cualidades
+físicas y morales, sus perfecciones é imperfecciones, temperamentos,
+fisonomías, carácteres, consejos higiénicos para conservar la salud y la
+hermosura, cuidados del tocador, y ramillete de fórmulas de perfumería
+higiénica. Obra escrita en francés por el célebre médico é higienista A.
+Debay; traduccion de Mariano Blanch. Un tomo en 4.º, magnífica
+impresion, 14 rs.
+
+=Víctor Hugo=.--ÚLTIMO DIA DE UN SENTENCIADO Á MUERTE.--_El reo de
+muerte_ y _El verdugo_, por Espronceda. Un tomo 8.º mayor, 4 rs.
+
+=Víctor Hugo=.--HOMBRES CÉLEBRES. _Mirabèau_. _Voltaire_. _Lamennais_.
+_Imbert._ _Galloix_. _Lord Byron_. _Valter Scott_. Un tomo en 8.º mayor,
+4 rs.
+
+=Víctor Hugo=.--EL AÑO TERRIBLE. 1 tomo en 8.º mayor, 8 rs.
+
+
+
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+ * * * * * *
+
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+Nota del Transcriptor:
+
+Errores obvios de imprenta han sido corregidos.
+
+Páginas en blanco han sido eliminadas.
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+*** END OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK 44120 ***
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@@ -1,2006 +0,0 @@
-The Project Gutenberg eBook, La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y
-con Perro de Muestra, by Manuel Saur
-
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-This eBook is for the use of anyone anywhere at no cost and with
-almost no restrictions whatsoever. You may copy it, give it away or
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-with this eBook or online at www.gutenberg.org
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-
-Title: La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y con Perro de Muestra
-
-
-Author: Manuel Saur
-
-
-
-Release Date: November 6, 2013 [eBook #44120]
-
-Language: Spanish
-
-Character set encoding: ISO-8859-1
-
-
-***START OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK LA CAZA DE LA PERDIZ CON ESCOPETA,
-AL VUELO Y CON PERRO DE MUESTRA***
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-E-text prepared by Carlos Coln and the Online Distributed Proofreading
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-Note: Images of the original pages are available through
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-
-
-Nota del Transcriptor:
-
- Letras itlicas son denotadas con _lneas_.
-
- Las versalitas (letras maysculas de tamao igual a las
- minsculas) han sido sustituidas por letras maysculas
- de tamao normal.
-
- Letras oscuras son denotadas con =signos de igual=.
-
-
-
-
-
-LA CAZA DE LA PERDIZ
-
-CON ESCOPETA, AL VUELO
-
-Y CON
-
-PERRO DE MUESTRA
-
-por
-
-MANUEL SAUR
-
-
- El que sabe cazar la perdiz al vuelo,
- con perro de muestra, debe cazar bien
- todo, lo mismo nade, codorniz becacina,
- que conejo, liebre jabal, etc., etc.
-
- BARON DE CRTES, =Recuerdos de caza=.
-
-
-Barcelona
-Manuel Saur, Editor
-1877
-
-Es propiedad del autor y editor.
-
-Queda hecho el depsito en manos de los cazadores.
-
-Barcelona.--Imprenta de la Viuda Mir y C., Sobradiel, 10.--1877.
-
-
-
-
-PRLOGO.
-
-EL PORQU DE LA OBRA.
-
-
-He puesto este epgrafe al prlogo de mi _obra_, y creo no ando
-acertado, pues antes debia preguntarme: A qu escribir de caza despues
-de publicado el libro: _Los cazadores_, parto del ingenio del fecundo
-novelista Enrique Prez Escrich, y el titulado: _Recuerdos de caza_,
-escrito por el infatigable mulo de san Eustaquio, seor baron de
-Crtes?
-
-En esto est el _quid_ de mi osada; y todo el que haya tenido la
-fortuna de leer las producciones que acabo de citar, comprender el
-mvil que me ha guiado al dar la estampa estos apuntes, si es que se
-toma el trabajo de leer mis dislates.
-
-He dicho y adelante.
-
-
-
-
-TRAJE DEL CAZADOR.
-
-
-Aunque parezca secundario ocuparse del traje que debe usar el cazador,
-nicamente me limitar encargar que ste sea sencillo y sin jactancia.
-Interiormente llevar camiseta de franela, lo cual le evitar muchos
-resfriados si tiene la prudencia de cambiarla al llegar de la cacera
-la casa parada. Esto prenda de ropa es ms conveniente en verano,
-aunque parezca improcedente por el excesivo calor que hace. Conviene
-asimismo acostumbrarse al uso de la alpargata, llevando escarpines de
-lana: el pi va resguardado y se pisa en blando; as se trepa mejor el
-monte. En ciertos terrenos debe usarse el zapato claveteado, lo cual
-evita resbalones; borcegues y pantalon ancho, para que la rodilla
-juegue con comodidad: el cuerpo abrigado con blusa chaqueta
-desprovistas de aberturas, ojales y colgajos, ni tampoco conviene llevar
-leontina en el reloj, pues todas estas cosas ofrecen el inconveniente de
-que al hacer uso de la escopeta, se enredan con el pi de gato bien
-con el disparador, y esto, adems de interrumpir y hacer perder un
-tiempo precioso para apuntar la pieza de caza, que se va sin poderla
-saludar, tambien puede acarrear (punto importante que se debe evitar)
-algun lance desagradable, tal como que se dispare la escopeta sin el
-beneplcito del cazador. Lo cual, ms del susto que ocasiona, es
-fuente de lamentables desgracias.
-
-Las camisas se usarn anchas de cuello, sin pretensiones ni
-ridiculeces, cubrindose la cabeza con un sombrero ligero, de alas
-regulares, item ms, un pauelo de seda sujeto en la sien; con lo que se
-evitan los dolores reumticos de cabeza, y es un gran preservativo
-contra el frio. En poca de calor debe evitarse que el sudor corra por
-el rostro, cosa tan molesta.
-
-
-
-
-LA ESCOPETA.
-
-
-El arma es conveniente que sea de dos caones, sistema Lafaucheux; su
-peso poco ms menos de seis libras y media siete; inferior este
-peso tiene el inconveniente que al salir el tiro hace un pequeo
-movimiento de vibracion y perjudica la seguridad del mismo, y de ms
-tambien fatiga demasiado al cazador, lo cual no hay que echar en saco
-roto. El arma de dos caones tiene la ventaja de poder efectuar lances
-por duplicado. Muchas veces al primer tiro se yerra la pieza, y se
-alcanza con el segundo; otras, despues de haber tirado arranca otra
-pieza cercana y an se mata, y adems (esto es lo principal) el cazador
-anda por esos mundos de Dios con ms garanta contra cualquier
-eventualidad: en toda querella que se suscite es ms respetado.
-
-Basta que el calibre de la escopeta coja el cartucho marca 16. Los
-gallitos deben caer siempre voluntad del cazador; as es que los
-puntos han de estar si no al pelo, _entre col y col lechuga_.
-
-Gastando 40 50 duros en una escopeta, se obtiene una buena arma de
-caza; lo dems es cuestin de puro lujo, sin ninguna influencia en la
-precision del tiro.
-
-
-
-
-MUNICIONES.
-
-
-La plvora debe ser escogida, bastando con que el buen probador seale 5
-grados. El cartucho se emplear de cartulina fina, para que entre y
-salga sin necesidad de saca-cartuchos. Una vez haya servido, debe
-tirarse, pues tiene sus inconvenientes el volver usarlos. El plomo
-sea los perdigones, en los meses de agosto, setiembre y octubre basta
-emplearlos del nmero 6; en noviembre, diciembre, enero y febrero, entre
-el 4 y el 5. En esta poca del ao la perdiz se tira mayor distancia,
-y como est en su apogeo, necesita el plomo mayor para hacerla dar la
-voltereta.
-
-
-
-
-PERRO PERDIGUERO.
-
-
-El verdadero compaero del cazador es sin disputa el perro; por lo
-tanto, debe buscarse dcil, obediente inteligente. Sabido es que, como
-aqul comparte las glorias y fatigas con tan leal _amigo_, los dos se
-reparten cariosamente el almuerzo, aunque sea trueque de quedarse el
-amo con apetito.
-
-Las castas del perro _seter-pointers_ no han dado en nuestro pas los
-resultados que eran de esperar, de suerte que los cazadores hnse fijado
-en los perros perdigueros, ampurdaneses, mallorquines y navarros, los
-cuales han producido mejores resultados por su obediencia y por no
-adelantarse tanto como los _seters_ y _pointers_. Como stos recorren el
-terreno que debe seguir el cazador, qutanle la ilusion al indicarle la
-pista.
-
-Hay perro (de castas cruzadas como el podenco-sabueso) que apenas tiene
-facha de perdiguero, y sin embargo da buenos resultados, pero necestase
-mucho rigor para domarlos; una vez logrado esto, son incansables y
-dciles, y nunca se aspean.
-
-Exigid del perro que tenga buenos vientos, firme muestra y blanda boca,
-y con estas circunstancias, si el cazador sabe cazar y matar, de seguro
-tendr un excelente compaero que seguir bien un peon, y cobrar las
-aliquebradas. En tal caso dejad para otros la casta y la hermosura, pues
-esto es secundario.
-
-Las perras son generalmente ms dciles y finas, pero tienen cierto
-inconveniente que la naturaleza no ha querido evitar, por cuyo motivo
-los cazadores prefieren el macho.
-
-Es conveniente cortar el rabo al perro, pues al moverse agita las matas,
-se estropea hasta el punto de ensangrentarse con los zarzales, echa
-perder las uvas y bate las mieses; si bien esta operacion de cortarles
-el rabo les afea, porque no hay duda que es ms bello y sublime cuando
-est de muestra con la cola paralela al horizonte.
-
-Se observar que cuando arquean el rabo los perros de raza pura, indica
-liebre; un poco inclinado pero recto, conejo; con la punta al horizonte,
-perdiz; recto y un poco levantado, codorniz. Al perro bien castizo le
-repugna traer la becada, guiones, las pollas de agua, y sobre todo los
-_sabocs_, y algunos hasta los palomos.
-
-Hay cazador que para lograr un perro de _primo cartello_, pgalo
-cualquier precio, creyendo que depende del can si mata ms menos
-perdices; y ste conoce tal punto el cambio de dueo, que se han dado
-casos de demostrar su agrado al nuevo amo abandonndole en el mismo
-momento que se hace la prueba. Sobre esto pudiera llenar unas cuantas
-cuartillas, mas slo me limitar aconsejar que el que quiera un buen
-perro _que se lo haga_.
-
-
-
-
-MODO DE TIRAR A LAS PERDICES.
-
-
-Esta es la parte ms comprometida para dar una sucinta esplicacion del
-modo cmo deben matarse al vuelo las perdices, por la sencilla razon de
-que es difcil iniciar en el asunto aquellos que no han tenido la
-satisfaccion en su vida de matar media docena de perdices al vuelo.
-
-El cazador que en sus correras anuales puede contar con un promedio de
-por cada tres tiros una perdiz, hay que proclamarle buen tirador. Aunque
-en salidas determinadas cuente triunfos tales como hacer dar la
-voltereta todas las que tire, acontece asimismo (y bien menudo) que
-se dispara diez doce veces la escopeta y slo se matan un par de
-piezas, de manera que, por clculo aproximado, un buen tirador le sale
-la proporcion mencionada.
-
-Al arrancar del suelo y al echarse al vuelo la perdiz, el cazador debe
-estar sereno, hacer una pequea suspension y con ligereza echarse la
-escopeta la cara; seguir la perdiz en su rpida carrera,
-encaonarla, y cuando se interpone con el punto de la escopeta, entonces
-sin calcular distancias debe efectuarse la presion del dedo sobre el
-disparador; y seguro que obrando as cae la pieza.
-
-La perdiz que marcha de frente sea de cola es la fcil de matar: las
-que van atravesadas debe comprenderse la velocidad que llevan, para
-apuntarlas la cabeza, y haciendo un insignificante movimiento con el
-brazo izquierdo (que es el timon), se las toma la delantera. As hay
-probabilidades de matarlas. Lo mismo requiere la perdiz que viene de
-arriba sea de frente, indispensablemente pasa por encima de la
-cabeza del cazador: segun se presenta este lance, la regla mejor es
-volverse rpidamente y tirar cuando haya pasado; no obrando as y
-disparando cuando viene de frente, este tiro si se acierta es de
-_chamba_, pues veces se requiere tomarla un metro por delante y la
-misma pieza acude la muerte, dando un tumbo, y con la velocidad y el
-choque de la caida, se abre.
-
-La perdiz que, sorprendida entre el cazador y el perro, no le queda
-fcil salida y empieza con aquel canto alarmante que aturde, llegando
-echar excrementos, y se remonta repullada, sta el cazador debe con
-serenidad seguirla apuntando, y al hacer la suspension para extender el
-vuelo en la direccion que se le antoja, entonces hay que disparar, pues
-es la mejor oportunidad de matarla. El tiro es fcil.
-
-Cuando el perro pone muestra, la satisfaccion es tan importante, que
-afecta la parte fsica de un modo notable. El corazon late tan
-agradablemente, que no se puede describir, y no recuerdo que tan
-singular impresion me la haya evitado un segundo, dejando de imitar
-muchos que dan gritos al perro, y tocndole con el pi le excitan para
-que rompa la muestra.
-
-Este lance debe resolverse siempre por s solo; y mientras se admira la
-_sublimidad_ del perro, se va el cazador colocando de manera que pueda
-tirar la perdiz sin que le estorben los rboles. sta arranca de un
-modo desesperado; el cazador, por poco que lo sea, goza y disfruta dando
-_gusto al dedo_ las mil maravillas, y debe matar la pieza. Es un caso
-indispensable; el perro lo exige por la leccion que recibe, y el cazador
-tiene un disgusto si la yerra: en todo el dia caza de mal humor, no
-ser que muy luego alcance victorioso desquite: de lo contrario pasa un
-dia _de perros_.
-
-Para tirar al vuelo las perdices se necesita calma y serenidad. Los
-grabados franceses nos quieren demostrar eso pintando cazadores que
-cuando les sale al vuelo una pieza, abren tranquilamente la caja del
-rap, toman un polvo, y luego apuntan y matan. Cualquier cazador
-prctico comprender que sta es la manera grfica de demostrarle que no
-debe precipitarse, pues la precipitacion es causa de que se vaya la
-caza; sin embargo, es preciso un trmino medio. En nuestro pas las
-perdices no permiten tomar rap, ni siquiera fumar en pipa.
-
-Sucede al ms _pintado_ que yerra la mejor pieza, y eso depende muchas
-veces de estarse mirando la perdiz sin cuidar del guia de la escopeta,
-que generalmente se dispara sin apuntar. Acontece lo expuesto cuando la
-perdiz sale de sorpresa y se va desprevenido y absorto en _importantes_
-meditaciones.
-
-Tampoco debe olvidar el aficionado caza que el apuntar bien depende
-mucho del brazo izquierdo, el cual juega un principal papel en el _arte
-de tirar con precision al vuelo_. Al colocar la escopeta la espalda,
-si bien este movimiento debe ser suave, en cambio requirese soltura,
-apoyando en seguida la cara la culata para entreguardar bien al
-encaonar la caza y seguir la rapidez y el ms leve movimiento de la
-pieza, haciendo importante papel el brazo izquierdo que acompaa el
-encaoneo; y cuando el cazador comprende la oportunidad, entonces el
-dedo cumple con su obligacion y se palpan los buenos resultados, pues
-infaliblemente la pieza cae herida muerta. El disparador de la
-escopeta debe siempre caer voluntad del tirador; el inconveniente ms
-leve hace errar la caza, y no por ser un mal tirador sino por efectos
-materiales del arma, que deben corregirse.
-
-He cazado con amigos que no saben matar de otro modo que por medio del
-tiro _ tenazon_, y no obstante, algunas veces me han dejado asombrado
-por su destreza en despachar las piezas; pero confieso que jams me han
-satisfecho, y he tenido ocasion de manifestrselo. El aficionado
-acostumbrado esta clase de tiro, el dia que tiene la _buena_ hace
-prodigios. An la perdiz no ha arrancado un metro del suelo, cuando ya
-est tendida en l, y si la caza les sale de cerca la destrozan: como no
-tienen espera, tiran aunque sea cuatro pasos de distancia; si la pieza
-recoge la _flor del tiro_, queda en disposicion de echarla al muladar.
-Por lo dems, si tienen la _mala_, en una cacera de cinco seis dias
-no matan ni una pieza, pesar de ser los que tiran ms. Atendido lo
-cual aconsejo todo cazador que se corrija de este _vicio_ y haga un
-estudio para tirar despues de encaonear y seguir bien la pieza: si as
-lo hace, encontrar un verdadero placer al matar en buena regla una
-pieza de caza.
-
-
-
-
-1. DE AGOSTO.
-
-
-Memorable fecha, y sin embargo para muchos pasa desapercibida, mientras
-que los cazadores agurdanla con tanta impaciencia, que casi raya en
-locura. Se cuentan las semanas y hasta las horas que faltan para llegar
-al dia ansiado, _el 1. de agosto_, en que la ley de caza autoriza los
-espaoles poder hacer uso del derecho que les ha estado vedado durante
-cinco meses, prohibicion justa indispensable para que las perdices
-estn en amores y la naturaleza nos d en cambio la fecundidad, es
-saber: que de un par de perdices salga un bando de 18 21.
-
-El cazador deberia tener en su gabinete, entre los objetos de caza, un
-cuadro adornado de precioso marco, destacndose en el fondo una
-inscripcion en letras de oro que le recordara perennemente el dia 1. de
-agosto.
-
- * * * * *
-
-No cabe duda que ese dia le tienen fijo en la memoria ms de cien mil
-espaoles, si no todos cazadores, lo menos muchos que creen serlo, por
-el mero hecho de tener escopeta, perro y licencia de caza. Por mi parte
-puedo afirmar que hace veinte aos que en tal fecha no he faltado al
-monte: pues se experimentan muchas impresiones, queriendo uno
-multiplicarse para hacer _descubrimientos_; la imaginacion acude todas
-partes; se est cazando, pongo por caso en Moncada, se ha descubierto
-el terreno, y uno dice para su coleto: mejor me habria ido la _Torre
-dels frares_, all dej bastantes pares; pero... y si me hubiese
-dirigido _Roca de droc_?... no, el tren sale demasiado tarde, y cuando
-se llega al cazadero, ya molesta mucho el rubicundo Febo; adems, habrn
-ido los de Molins de Rey. Por ltimo, reflexiona que los puntos
-mencionados debe reservarlos para otro dia, y caminando con calma en
-busca de agua cristalina y alguna sombra, dispnese ir pasando el dia
-para no estropearse y _hacer pis_, preparndolos para las futuras
-salidas, que deben ser, seguramente, de ms provecho que las primeras.
-
-Las perdices en el mes de agosto.--La caza de la perdiz en el mes de
-agosto se diferencia completamente de las dems pocas del ao. La ley
-deberia, con rigor, lo menos no permitir cazar hasta el 15 de dicho
-mes. Si bien es verdad que por razon del clima hay comarcas en que las
-perdices son ms crecidas, como por ejemplo en el litoral, en cambio en
-la alta montaa van muy atrasadas, hallndose muchas cluecas empollando
-an sus huevos: de ah resulta que algunos cazadores inexpertos, cuando
-el perro les queda de muestra y al salir la perdiz, que apenas se
-remonta un palmo del suelo, le encajan el tiro, y pueden irse ufanos
-su casa con el trofeo de una clueca sin plumas en la panza,
-indirectamente dejando desamparadas veinte ms perdices que iban
-salir del huevo, lo cual causa un perjuicio irreparable y reprensible.
-
-Basta ya de digresion, y volvamos al modo cmo deben cazarse las
-perdices en agosto.
-
-Mucha ventaja llevar el cazador y se ahorrar no pocas subidas y
-bajadas, si muy temprano, antes de la salida del sol, se coloca en un
-cerro. El canto del _perdigon_ bravo anuncia los _perdigachos_ que se
-han recodado y pasado _joc_ la noche; mueven la cabeza y guiados por
-la perdiz van subiendo al cerro, haciendo _piu_, _piu_, _piu_. Cuando
-aperciba el cazador ese canto, debe huir del cerro y no volver l
-hasta que pasen lo menos quince dias, pues las perdices que mataria
-apenas tendrian el tamao de las codornices: todo cazador decente debe
-ir en busca de otro lance, y slo le es permitido hacerlas volar para
-saber si el bando est completo; ensayo muy peligroso, por lo que voy
-expresar. Cuando sale el bando quin se detiene? es bastante difcil, y
-esto produce consecuencias fatales.--Los _padres_, permtaseme la
-expresion, en defensa de sus _hijuelos_ van _peonando_ y guiando el
-bando adelante por la inseguridad que tienen en el vuelo de los
-_pollitos_; el _perdigon_ con un movimiento rpido divide el bando, y la
-perdiz con la otra mitad aproximadamente y retaguardia, haciendo
-_chac_, _chac_, _chac_, hasta que el perro se les viene encima; entonces
-vuelan, y la pobre perdiz que en defensa de sus hijos qued
-retaguardia, paga con la vida su amor filial. Cometida tal hazaa por el
-cazador, muy fcil le es acabar con el bando, pues los jvenes con su
-_piu_, _piu_, se descubren muy fcilmente y se dejan matar mansalva, y
-las pocas que quedan echan de menos la madre, de suerte que cuando
-viene la noche (estas siempre son frias) mueren por faltarles el calor
-natural que les da el regazo materno.
-
-Este es uno de los inconvenientes que tiene el cazar la perdiz en la
-poca citada. Discutiendo algunas veces sobre si es mejor no que el
-bando lleve el macho, slo me han sostenido lo contrario los aficionados
-al _reclamo_, pero jams me han dado una razon slida, mientras les he
-podido objetar el auxiliar que es del bando el _perdigon_. ste, en la
-poca del celo y en la de la cria, se defiende admirablemente del
-gavilan, garzas, gaig, mochuelo, y hasta de los perros, saliendo casi
-siempre victorioso cuando menos de las aves citadas, y en las dems
-pocas del ao se deja agarrar sin oponer la menor resistencia. Lo que
-puede el amor paternal!
-
-Volviendo ahora entrar en materia dir, que para cazar en el mes de
-agosto se requiere una tctica generalmente diferente de las dems
-pocas del ao. En primer lugar, debe madrugarse mucho, ir ligero de
-ropa, llevando siempre una camisa de repuesto en el zurron. Las perdices
-se hallan en los cerros la salida del sol, pero al cuarto de hora ya
-descienden las querencias, mtense en los rastrojos y comen los granos
-de trigo que despues de la siega han quedado desparramados por el suelo:
-si por casualidad an estn en el campo las gavillas, de seguro que las
-perdices se hallan cerca. Si se notan por el camino las seales que las
-aves retozando han dejado en el suelo, el cazador puede hacerse cargo
-por ellas si el bando est punto de darle una leccion: se ha de fijar
-en si hay excrementos, y si son tiernos, no debe moverse de aquella
-querencia, porque en el alto (segun la hora), en el centro bajos
-estarn las perdices. El perro principia dar seales y sale el bando,
-generalmente todas la vez: entonces el cazador debe observar, primero
-si estn buenas para _apeonar_, luego contarlas aproximadamente, y
-adems, y esto es lo ms esencial, comprender dnde se dirigen. Una
-vez echado el clculo obsrvese bien el terreno (si es desconocido) para
-poderlas salir de modo que vayan all donde las destina aproximadamente
-el cazador. El vuelo que han dado, de seguro es corto, pero hay que
-tener presente que el poder que les falta en las alas, en cambio
-splenlo _peonando_, dndose el caso que muchas y muchas veces se pierda
-el _bando_ entero, que no se hallan en ninguna parte an vindolas la
-parada, y se pierden miserablemente las horas ms frescas de la maana
-sin dar con ellas, resultando que en algunas ocasiones de _peon_ han
-vuelto poco ms menos de all donde habian salido la primera vez.
-Generalmente eso sucede cuando uno se empea en querer saber ms que el
-perro: ste, por ejemplo, coge vientos, quiere inclinarse los bajos, y
-uno le llama arriba vice-versa; y, cuntas y cuntas veces por no
-haber querido creer al perro, se ha ido una pieza que se la habria
-tirado _tout plaisir_, y uno se queda contemplando con un palmo de
-narices y diciendo para s: qu mal has hecho en no seguir la
-tendencia del perro!
-
-Si el cazador halla el bando en esta poca, debe estar convencido de que
-tirar, por lo cual es preciso ir con mucha calma y sin precipitacion,
-observando el ms leve movimiento del perro. Cuando se dispara y cae la
-pieza, estarse quieto, que se va disparar el otro caon, y
-efectivamente as sucede: las perdices ya no se levantan todas; al
-segundo vuelo obsrvese bien que si la vez primera fueron quince, ahora
-slo han salido ocho nueve. Dnde estn las otras? Cargue el cazador
-y tenga paciencia, llame al perro; quieto y cartuchos otra vez, faltan
-seis siete perdices; calma, que son de usted, seor cazador. Siga
-apuntando bien que matar; ha llegado su _cuarto de hora_, y ver V.
-como veinte treinta metros una de otra y dos la vez y en un
-pequeo crculo, dispara algunos tiros bien provechosos.--Cuando est
-persuadido el cazador de que en dicho terreno, ya por las que ha muerto
- bien por las que ha errado, no queda ninguna, dirjase sin prdida de
-momento hcia donde se ha ido el resto del _bando_. Cmo late el
-corazon en el trayecto que media del punto donde han salido las perdices
-al que se las ha visto parar! Usted echa sus clculos: he muerto
-cuatro; vamos, esta maana llegar seis, porque... ahora sabiendo
-dnde estn bien matar un par. Y as entretenido el cazador, sale de
-la hondonada otra _bandada_ de perdices: fijndose en ellas, como es
-natural, para ver dnde se dirigen, una vez en autos debe hacer caso
-omiso de ellas ir siempre las mismas del primer _bando_. Nunca ha de
-ilusionarse el cazador por la abundancia: stas ya las encontrar otro
-dia. Valen ms las menos, que se han de dejar _pisar_ la tercera vez que
-se tienen en juego. Que haya tiento y se coloquen bien los pis;
-domnese bien el terreno, no precipitarse, que cuando arranque la pieza
-se cansar V. de apuntar, y al disparo mdase el terreno, que an no hay
-diez metros de distancia al sitio en que cay.
-
-El matar perdices en esta poca, sobre todo al arranque del tercer
-vuelo, es ms fcil que tirar las codornices, por ser mayor la pieza y
-salir generalmente de cola y con poca velocidad: siga, pues, el cazador
-el terreno con cuidado, y tire todas; pero si observa que el perro
-saca un palmo la lengua afuera gracias al calor, entonces conviene tocar
-retirada, buscar plcida sombra, descansar media horita, fumar un
-cigarrillo de papel y volver en seguida al mismo sitio, describir un
-semicrculo, cruzarlo por derecha izquierda, y se ver como el perro
-vuelve coger vientos. Con el tiempo trascurrrido las perdices se han
-llamado unas otras con sus cantos, han salido de su escondrijo, y el
-perro las seala las mil maravillas, recrendose el cazador tirando un
-par de tiros. Se mira el reloj: son, por ejemplo, las diez; el sol
-achicharra, apenas se mueve una hoja, y si se est cerca de la posada
-hacienda, lo mejor es irse casa descansar: el perro se rehace y al
-dia siguiente el cazador se encuentra ms entero y dispuesto volver
-la lid mejor que el dia anterior. El cazar requiere calma, pero en el
-mes de agosto calma y astucia, saber serpentear los terrenos, buscar los
-frescales, que es donde las perdices tienen querencia. Jams se busque
-la parte que da el sol y s en las umbras, y en los viedos frondosos,
-y en los torrentes.
-
-Todo lo que no sea seguir este consejo es perder el tiempo, atropellar
-el perro y fatigarse intilmente, y lo que se ha tomado como recreo,
-sirve de molestia y puede acarrear una enfermedad.
-
-La caza de la perdiz en esta poca del ao diferencase completamente de
-la de los dems meses. El _bando_ de perdices est siempre la rden de
-las _viejas_, y stas comprenden hasta dnde llega el poder de sus
-_hijuelos_ para el vuelo, y pocas veces intentan cruzar el sendero y van
-quedndose la misma ladera mano que se ha escogido para cazar; el
-vuelo es tan corto que apenas alargan 300 metros, pero en cambio
-_peonando_ al tocar el suelo cambian de direccion tan fcilmente, que al
-llegar al sitio donde se han visto echar, no se halla ninguna, y de
-_peon_ han pasado la sierra y de otro vuelo se han quedado en una
-querencia en direccion contraria, sucediendo que uno pierde el tiempo
-tan _miserablemente_ en conjeturas, que la _rabieta_ va haciendo su
-efecto y el aburrimiento se apodera del cazador y hasta del perro. Esta
-es la parte _infeliz_ del cazador que ha trocado el bienestar de su casa
-para ir sudar el _kilo_ sin poder disparar la escopeta, abandonando
-algunas veces quehaceres de importancia; pero tal es la _ley del
-cazador_, y para llegar matar algo en buena regla se necesita:
-aficion, aficion, aficion.
-
-
-
-
-SETIEMBRE.
-
-
-Buena fecha, pero no la mejor. Si bien entran las perdices en la edad de
-la _pubertad_ y dan _ms juego_, an no estn del todo emancipadas de
-quien les di el sr, an no han pasado la muda, no obstante de ser
-todas _pintadas_, conservando tan slo dos tres plumas en el arranque
-de las alas, plumas que en Catalua llamamos _mussolas_.
-
-En esa poca del ao la perdiz satisface ms los goces del cazador y el
-perro las seala mejor, tal vez porque el terreno generalmente es ms
-fresco, por cuyo motivo nota ms los rastros, quedando muy menudo de
-muestra. Ya las perdices han abandonado aquel canto tan empalagoso
-_piu_, _piu_, _piu_, y principian _hombrear_ imitando las viejas,
-pero sin poder dar an sus _timbres_. Su carne ya no siente hormigas y
- langostas; al contrario, en la poca del ao que nos ocupa es cuando
-constituyen el mejor bocado, pudiendo recomendarse toda persona falta
-de apetito.
-
-Para cazar las perdices en setiembre, si hay viedos en el terreno que
-se escoge, bsquelas siempre el cazador en dichos sitios, pues tienen
-grande aficion la uva. Jams dejan aquel pasto, y como el sol an
-molesta con sus rayos, sucede que se mantienen quietas en los pmpanos.
-Si se encuentran por primera vez en las vias de diez doce del dia,
-esperan mucho, pero ya salidas de all no vuelven aquel mismo dia,
-hasta que las reclaman las viejas, yndose otras querencias.
-
-En esa poca ya intenta la perdiz pasar al vuelo una hondonada,
-quedndose la parte opuesta del cazador, y cuando se ve que trasponen
-el cerro, hay que fijarse bien en la inclinacin que escogen, pues la
-buena vista ahorra muchos pasos intiles, dando el resultado de abreviar
-el tiempo, que en estas circunstancias es oro. Que ande ligero el
-cazador, pero sin precipitarse, pues el pulso y los latidos del corazon
-jams han de ser ms fuertes de lo natural, fin de que al llegar el
-ansiado momento se aprovechen los tiros y pueda hacerse doblete y hasta
-carambola. El lance de la carambola es el que halaga ms al cazador, y
-motivo hay para ello. Muchos confunden con la carambola el matar una
-pieza con cada caon; la carambola es lo que saben y hacen con
-frecuencia algunos buenos tiradores, es decir, arrancar al vuelo dos
-perdices la vez, yendo una por ejemplo hcia la derecha y la otra
-hcia la izquierda. En este caso el cazador consumado ya comprende la
-velocidad y alcance de entrambas, apunta la que le parece ms cercana
-y sin precipitarse dispara; se vuelve, apunta la otra, pero listo, y
-dispara haciendo dar las dos la voltereta, lo menos as lo cree.
-Entonces debe dirigir el perro la aliquebrada que le parece que lo
-est, para que la _cobre_, y si lo acierta, seguro que se cuelga las dos
-perdices al zurron. Esta _suerte_ es la que requiere ms serenidad y
-calma, pues algunos con el goce que produce la carambola alborotan el
-perro llamndole derecha izquierda, en cuyo caso hay bastantes
-probabilidades de perder alguna de las piezas; y aun he visto
-cazadores perder las dos por ser aliquebradas y el perro de pocos
-sentidos.
-
-La carambola que acabo de explanar es la de ms mrito, y se hacen
-pocas, sobre todo en diciembre y enero. En setiembre es ms fcil, pues
-no es tan rpido el vuelo. Efectanse otras carambolas, si bien no de
-mrito superior. Cuando el _bando_ marcha describiendo un semicrculo, y
-se les disparan de cola, los dos caones, matndose dos piezas, esto
-tambien se llama carambola; el cazador queda satisfecho y basta, porque
-de todos modos son episodios que complacen.
-
-Hay que perdonarme mis contnuas digresiones, pues son hijas del
-entusiasmo que en m produce el recuerdo de lances inolvidables.
-
-Volvamos, pues, esas perdices que con su vuelo han traspuesto el cerro
-y que el cazador hbil ha adivinado el sitio escogido para su descanso.
-Le gustaria V. que el puesto elegido fuese un pequeo torrente con
-hermosa campia en ambos lados y abundancia de piedras mano? Seguro de
-una contestacion afirmativa, all coloco mi cazador, quien antes de
-llegar ya ve marcharse una perdiz. Mejor fuera que se hubiese esperado,
-pero no debe hacerse caso, pues dicha perdiz iba de _peon_; hay otras.
-Fjese el cazador en la que ha tenido la poca vergenza de marcharse sin
-decir _adios_ y por lo tanto sin podrsela hacer los honores de
-ordenanza. Se ve parar alguna distancia en el mismo torrente, donde
-hay un rbol como seal. All debe V. encaminarse, pero... el perro se
-queda de muestra la ladera de torrente; magnfico. Vuela una perdiz de
-la parte opuesta; si es larga no la tire V.; observe y ver que poco ms
- menos va donde ha ido la primera, y con el ruido que mueve al marchar
-salen tres cuatro del mismo lado donde est V.; estas son las que
-olfateaba el perro. Ahora es ocasion de disparar la escopeta y de matar
- dejar de matar; pero est V. en regla y debe seguir, pues faltan
-otras. Eche V. alguna piedrecita, porque con el tiro las compaeras han
-quedado aturdidas, esperando ocasion propicia para largarse; y como el
-perro trabaja entusiasmado por los bajos del torrente, las perdices
-salen de las matas, tan bajas que casi el perro las alcanza con el
-hocico, y en ese estado arrancan con un miedo cerval. _Piac_, _piac_,
-_piac_, yese momentneamente. Estas perdices dan tiempo al cazador
-para todo; para prepararse, apuntar bien y dar _gusto al dedo_. Cuando
-se est convencido de que todas han salido, hay que dirigirse sin
-prdida de momento hcia las que se han visto marchar al asomarse al
-torrente, y de seguro se tirar bien estas. Obrando as y con tino es
-como se consigue buena provision de piezas. Cuando un _bando_ ha tenido
-la _desgracia_ de elegir como guarida un torrente, no desperdicie la
-ocasion el cazador afortunado que por all transite, pues se divierte
-envidiablemente un par de horas.
-
-Todo cazador verdadero que se encuentra con un _bando_ de perdices y con
-su buen cazar las conduzca sitios que tienen _mataderos_, no debe
-abandonarlas para ir en busca de otras, pues las que nuevamente halle le
-harn luchar y perder un tiempo siempre precioso, adems que no todos
-los bandos obedecen al plan preconcebido por el cazador. Nunca hay que
-olvidarse de las que todava no han volado, pues siempre la _perezosa_
-es el mejor tiro.
-
-
-
-
-OCTUBRE Y NOVIEMBRE.
-
-
-La mejor poca del ao para gozar cazando y matando perdices, es octubre
-y noviembre. El calor ya no molesta, y el perro caza todo el dia
-perfectamente. Si en ese tiempo el perro no rastrea bien y no encuentra
-las aliquebradas, hay que deshacerse de l, pues es dar pan quien no
-lo merece.
-
-En dichos meses el cazador se siente ms gil y las cuestas no son tan
-_amargas_, pudiendo hacer bien ocho horas de jornada. La salida de casa
-debe ser las 8 y retirarse las 5 de la tarde. Es muy importante
-encontrar la perdiz que ya haya comido, y esto se logra entrando de
-lleno en el cazadero las ocho de la maana. Se caza esa hora para
-evitar las humedades que generalmente deja el roco, y porque mientras
-no estn secas las matas el perro siente muy poco.
-
-Para cazar las perdices en esa poca del ao se requieren ms
-conocimientos, y el cazador consumado saca mucho partido de las que
-encuentra, dndose juego todo el dia, pues ya las perdices que han
-perdido el carcter de pollas, se fraccionan y van por su cuenta y
-riesgo. De suerte que el cazador debe, despues de elegido el terreno,
-formarse un plan y calcular bien las horas del dia que con su
-conocimiento y destreza puede colocar las perdices en terrenos bien
-escogidos de antemano para tirarles su gusto y para que las salidas
-sean mortales.
-
-Ante todo ha de recorrer las mesetas de los cerros, buscar
-minuciosamente los comederos y esquivar un poco en las laderas; lo cual
-ahorra muchos pasos, bajadas y subidas, ahorro que no es de despreciar.
-
-Supongamos que vayan saliendo perdices medida que se ejecute ese
-paseo; hay que despreciarlas y no impacientarse. Si tuviese el cazador
-el mal gusto de correr tras ellas, echaria perder la jornada. Siga,
-pues, su tarea, que ya irn volando otras, como efectivamente sucede, y
-una vez recorridos los cerros que el cazador se habia propuesto, siendo
-poco ms menos las diez de la maana sin que se haya disparado un
-tiro, entonces llama al perro, toma un bocadito, fuma un cigarrillo, y
-mientras, se hace cargo del terreno, tranquilamente y sin olvidar el ms
-pequeo detalle. Luego se vuelve emprender la marcha, desandando el
-camino andado, tomando los senderos del promedio del cerro; de esta
-suerte va indemnizndose el cazador del rato que ha estado sin tirar,
-pues las perdices, escamadas de sus querencias, principian resistir la
-muestra del perro, saliendo una tras otra, y con tino y buena puntera,
-el perro va trayendo las que se matan. A ste le da el cazador la tripa
-de la perdiz, empero si caen muchas bajo el plomo de la escopeta no es
-prudente regalar al perro con todas las tripas, pues les producen
-indigestiones: de consiguiente se le distrae dndole un poquito de pan y
-pasndole la mano cariosamente por el lomo. El perro necesita ser bien
-acariciado, porque todo lo comprende y cumple de este modo mejor, y est
- la obediencia de la ms leve indicacin del cazador.
-
-Seguiremos, pues, tranquilamente el camino indicado, llamando al perro
-si se adelanta: no conviene que vaya arrancando perdices si el cazador
-no puede tirar. Si se conoce el terreno, casi todas han de oir silbar
-los perdigones. Al encontrarse el cazador ese punto de la cacera, no
-le aconsejo el descanso, pero s que no le abandone la calma: el
-descanso no conviene, pues las perdices van saliendo de su asombro, y
-algunas de peon, otras de un vuelo, huyen de la ladera en que se ha
-propuesto cazarlas, perdindose intilmente el tiempo empleado si se
-dejan cuando estn cansadas; del segundo tercer vuelo apenas queda
-ninguna: de modo que la persecucion requiere actividad. Recrranse todas
-las matas, y donde no se pueda bajar, se arroja alguna piedra. Cuando se
-cree limpia materialmente la ladera, vyase en busca de las que se han
-visto retroceder, con la seguridad de encontrarlas y tirar todos los
-tiros muestra del perro.
-
-Si se observa que las perdices van de pecho tomar los cerros, y son
-por ejemplo las cuatro de la tarde, no hay que molestarse en
-perseguirlas, pues poco dao se las har. Por tanto, dejarse de nuevas
-fatigas, y pausadamente abandnanse los bajos, se traspone la parte
-opuesta de la senda que se ha seguido por la maana, recogindose para
-descansar y comer, que en ese caso bien necesitado est de reposo el
-cazador.
-
-De esta manera cazan las perdices los que se precian de cazar con arte,
-esto es, tomando siempre los altos. Cuando uno le da por ser
-caprichoso y contra todas las reglas de la caza se empea en principiar
-la cacera por los bajos y hondonadas, aunque halle las perdices, stas
-se van de un vuelo las cimas, y entonces poco dao se las hace. Slo
-se puede tomar el cazadero por la mano baja cuando sopla con fuerza el
-viento, pues las perdices estn redoso; mas en este caso lo mejor es
-no salir caza, pues el perro tampoco apercibe nada y se pierde
-miserablemente el tiempo.
-
-En el mes de octubre prepara el cazador la diversion para el resto de la
-temporada. En agosto descubre las crias, pero en octubre conoce ya
-fijamente dnde escogen sus querencias y tambien dnde las ha de dar la
-muerte. De manera que cuando hace el halagador descubrimiento de que en
-tal cual comarca hay perdices, debe ir all estudiar sus vuelos, y
-si los acierta, de fijo tiene asegurada una buena campaa de invierno.
-
-
-
-
-DICIEMBRE Y ENERO.
-
-
-poca poco agradable para dejar la cama; dias cortos, frios, lluviosos y
-fuertes heladas. Apenas la perdiz nota el menor ruido, ya vuela; en
-ninguna parte est bien. En este periodo del ao come bellotas y las
-carnes se le vuelven acorazadas. La plvora debe ser de primera y el
-perdigon granadito, nmero cinco. Se caza como se ha descrito
-anteriormente, con la sola diferencia de que los vuelos de las perdices
-son ms largos y las horas de provecho de doce dos de la tarde. Fuera
-de estas apenas podr el cazador disparar un tiro. Si ha helado y se
-mantiene la escarcha, las perdices se encuentran en los raseros y
-metidas en las hondonadas barrancos, al abrigo del cierzo. No obstante
-estos inconvenientes, es la poca del ao en que queda ms satisfecho el
-cazador cuando mata una perdiz, puesto que estn en toda su pujanza y
-fuerza de vuelo: al momento de dar su tan acelerado brinco apenas dan
-tiempo de seguirlas ni un segundo; al instante se hallan fuera del
-alcance del tiro. Generalmente en estos meses la carambola est vedada
-para el cazador. El que cuelga al morral media docena de perdices,
-matadas en buena ley, se le puede con justicia darle el dictado de buen
-cazador y tirador.
-
-
-
-
-FEBRERO.
-
-
-En este mes el cazador no debe desperdiciar un solo dia. Cuntas
-reflexiones acuden la mente, y por cierto algunas muy tristes! Con los
-aos entra el clculo; y quin sabe? Aunque todava no peinemos canas,
-tal vez el ao prximo habremos dejado de pertenecer al mundo de los
-vivos. Si ser mi destino que por ltima vez recorra el monte en que me
-encuentro? Mas, al diablo las ideas ttricas; todo en este mundo tiene
-su lado malo. Ocupmonos, pues, de las agradables impresiones que se
-experimentan cazando los _pares_.
-
-La naturaleza, que anuncia la proximidad de la primavera y que en todo
-es fecunda, hace que las perdices entren en amoros y cada par se vaya
-ya fijando en sitios propsito para el logro tranquilo de su objeto.
-El cazador hbil y que conoce lo que es el mundo, al internarse en un
-valle observando minuciosamente el pas que se propone recorrer, debe
-echarse la cuenta del sitio que l escogeria si tuviese que requerir de
-amores alguna aldeanita, esto es, reservado y al abrigo de todo
-airecillo, libre de visitas importunas. Aunque parezca extrao, en esos
-sitios que tu imaginacion poetiza debes ir sorprender las enamoradas
-perdices y darles cruel muerte, bien un susto maysculo. Esta es la
-ley del mundo, no respetar ni aun las cosas ms sagradas.
-
-En esa poca es muy fcil matar las perdices, porque resisten firmemente
-la muestra del perro. La hembra vuela primero, y caso de que el cazador
-la tire, no se mueva, pues an falta el macho, el cual queda en el
-terreno muy _preocupado_ buscando su dulcinea: en este caso arranca
-poco menos que de los pis; le apunta el cazador y casi casi puede decir
-que el negocio es seguro. Por esta circunstancia es preciso, cuando sale
-la perdiz, recorrer bien el terreno en un corto ruedo, y de fijo se mata
-el macho. Si las dos salen un tiempo, se observa que la hembra va con
-la cabeza erguida y el macho la lleva baja, erizando las plumas y
-dejando colgar un poco las alas. Si se fija bien el cazador, jams se
-equivocar tocante este punto tan importante. Es preferible matar los
-machos, que abundan.
-
-Y cuntas veces se matan los dos! En tal caso, qu alegra impresion
-ms agradable! El cazador se cree un sr privilegiado; mira derecha
-izquierda, todo ufano, pensando para sus adentros que nadie le aventaja
-en eso de tirar bien. Vana ilusion! lo que hace uno lo hacen cien mil,
-pero no todos lo aprecian del mismo modo.
-
-Los pares no hacen los vuelos tan largos, y fijndose bien el cazador en
-la direccion que toman poca distancia del cerro que trasponen, all se
-hallarn. En la poca que nos ocupa dejan mucho rastro, as es que el
-perro guia perfectamente hcia el sitio de su querencia. Algunas veces,
-de m s decir, sobre todo, que en el ltimo tercio del mes de febrero
-he perdonado la hembra. Y por qu? se me preguntar. Porque me acude
-la idea de que en el terreno en que estoy dando la ltima mano, tal vez
-faltaria el bando en agosto, y hay sitios tan privilegiados que es muy
-sensible no queden en ellos perdices.
-
-Todo cazador debe dar por religiosamente terminada la campaa de la
-temporada, el ltimo dia de febrero. Y supuesto que hemos llegado l
-en nuestra descripcion cinegtica, pasemos ahora exponer las reglas
-generales y consejos que la experiencia nos ha sugerido.
-
-
-
-
-VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE CAZAR SOLO ACOMPAADO.
-
-
-Hasta el presente el lector-cazador habr observado (y digo
-lector-cazador porque al que no sea aficionado la caza poco le
-agradezco que fije la vista en mis apuntes), que nicamente me he
-ocupado del modo de cazar cuando se va solo al monte en busca de
-perdices.
-
-Cazar solo, tiene el inconveniente de que uno se vuelve _salvaje_
-insociable, pues esto de enmudecer todo el santo dia es muy poco
-halageo. Sin embargo, el cazador se aburre, y no ms, cuando
-trascurren horas enteras sin ver una pieza; si salen stas al paso, la
-cosa vara de aspecto.
-
-Fcil es suplir la soledad llevando un criado, quien adems de cargar
-con el peso, prepara el _gaudeamus_: con todo, no basta semejante
-compaa, ya que la conversacion jams puede elevarse grande altura.
-
-El mejor modo de cazar es con un compaero simptico, no formando los
-dos ms que una sola voluntad; y aunque al llegar las posadas no se
-hace la misma bromita que cuando van juntos varios, en cambio, cazando
-bien pueden sacarse grandes ventajas de la expedicion si son dos los
-tiradores. Ya en el terreno, el uno aguarda al otro, y se tiene ocasion
-de admirar y aplaudir un buen tiro; adems, se puede seguir con tiento
-al perro que le rastrea un peon; se consulta el rden de caza, y dos
-votos condescendientes no tardan en estar conformes, cediendo un poco
-cada uno en sus pretensiones. Sucede lo mismo siendo cinco seis
-cazadores en el monte, aunque sea gran maestro y conocedor del terreno
-el que guie la cacera? No, pues es muy difcil la _ciega_ obediencia
-la voz del _jefe_; lo mejor uno se queda rezagado, al otro se le ha
-dejado al tiempo de pasar un arroyo, otro no quiere cambiar de lado sin
-consideracion al que todo el dia le ha tocado un mal sendero. Esto y
-mucho ms sucede cuando se caza con varios compaeros. Y los perros? He
-aqu otro inconveniente. Al primer tiro, caiga no caiga la pieza, dan
-tal embestida que baten el terreno doscientos metros de distancia, y
-los cazadores, ya sea con el silbato bien grandes voces,
-llamndolos por su nombre les reprenden; de suerte que, tan bien
-preparado queda el terreno, que ya puede estarse tranquilo el cazador,
-liar un cigarrillo y fumrselo, despues de lo cual puede tambien pasarse
-la escopeta al hombro y seguir andando; de seguro que no tendr que
-hacer uso de ella. Ms extenso seria sobre este particular, pero
-suponiendo que lo que acabo de manifestar est al alcance de cualquier
-cazador experimentado, mis reflexiones slo van dirigidas los
-importunos que quieren siempre salir cazar formando guerrillas y rden
-de parada.
-
-El seor baron de Crtes trata del mismo asunto en sus _Recuerdos de
-caza_, y si yo fuese describir los inconvenientes que ofrece el cazar
-cinco seis _mano gallega_, convertirame en plagiario de dicho
-seor, adems de que no sabria expresarlo con tanta lucidez.
-
-Aadir, para concluir, que todo el que tenga un buen perro no lo lleve
- ninguna cacera en que los compaeros pasen de tres, pues de seguro
-que el can adquirir resabios difciles de remediar.
-
-
-
-
-TERRENOS Y RECUERDOS AGRADABLES.
-
-
-Todos los cazadores muestran preferencia y predileccion por aquellos
-cazaderos donde ms _vctimas_ han hecho. La caza de la perdiz en
-Catalua, generalmente, hcese por terrenos penosos y montes bastante
-elevados. En este caso se encuentran las montaas de los alrededores de
-Barcelona, y como tanto se ha ido poblando y la aficion la caza va en
-aumento, sucede que los _domingueros_ les queda muy poco recurso para
-cazar, resultando que muchos regresan su casa sin haber podido
-disparar la escopeta. Esta falta de caza motiva que gran nmero de
-aficionados se metan en el ferro-carril, largndose en busca de mejor
-fortuna, y slo se detienen, ya sea entre Martorell y Gelida, bien
-bajan en Molins de Rey y llegan hasta Vallirana, en cuyos puntos hay
-excelentes cazaderos, pero muy quebrados; y como la caza se va
-extinguiendo, ya por la grande aficion que se ha despertado, ya por la
-poca vigilancia en dejar cazar en tiempo de veda y con ardides, esto
-hace que las caceras den muy pobres resultados, y que el que regresa
-su casa con un par de perdices se da por muy dichoso, pues ahora en los
-terrenos indicados no siempre se mata.
-
-Otros escogen la salida por la parte de Moncada, alargndose algunos
-hasta Montmel, cazando por Sant Fost, Martoreyas y Rexachs, terrenos
-malos, si bien en ellos siempre hay perdices, y en el bosque y malezas
-puede tirarse alguna becada, las cuales huyen de las _vernedas_ cuando
-hay fuertes heladas. El que tiene la voluntad de cazar en los
-mencionados terrenos va mojado todo el dia, pues all la neblina es muy
-pertinaz. Si afortunadamente se logra hacer bajar las perdices hcia el
-Bess, pesar de que hay mucha maleza, puede dispararse con provecho
-alguna vez la escopeta muestra de perro. Esos terrenos son muy
-penosos, ya por la topografa del pas, as como por las humedades, por
-cuyo motivo la experiencia aconseja no ir con frecuencia dicho sitio.
-
-Otro cazadero hay, tal vez el ms predilecto por parte de las perdices
-para hacer sus crias; refirome al monte de Moncada, en cuyo cerro
-descuellan las ruinas del ex-telgrafo y cuerpo de guardias. El cazador
-barcelons que no haya cazado en ese cerro, cuente que le falta algo por
-ver, pues adems de la perspectiva que desde l se descubre, hay ricos
-manantiales de agua, inclusa la clebre _Font del ferro_, que da frente
-al Bess, y por la parte opuesta la no menos renombrada _Font de mitja
-Costa_ (hoy dia bastante abandonada), en cuyo sitio los cazadores han
-echado muchas _chuletadas_. Tales son las ventajas que ofrece el cazar
-en ese monte, porque si la caza no va bien, en cambio se indemniza con
-el almuerzo y el bello panorama que disfruta la vista, olvidndose del
-cansancio que produce la llegada hasta el _telgrafo_, por cuyo punto es
-indispensable tomar la mano del cazadero, y de seguro que la maanita
-siempre se encontrarn perdices, las cuales dan juego al cazador todo el
-dia: hay sorpresas buenas y por la mano baja se caza bien.
-
-Hoy dia tales salidas figuran en la categora de las llamadas de
-recurso, ya que los ferro-carriles han acortado prodigiosamente las
-distancias, de suerte que los que pueden disponer de algun tiempo lo
-emplean en ir en busca de cazaderos lejanos, ya sea al confin de la
-provincia otra lindante con la nuestra.
-
-En las estaciones de Calaf, San Guim, Trrega, no pasa tren sin que
-bajen de l algunos cazadores procedentes de Barcelona. Los que se apean
-en Calaf se dirigen los cazaderos distantes tres cuatro leguas,
-dndoles tales batidas en los primeros meses, que luego quedan pocas y
-_escamadas_, por cuyo motivo se caza bien en Calonje, Prats de Rey,
-Coletas, Tor, Biosca, etc.
-
-Los que bajan en San Guim... oh! esa ya es harina de otro costal. De
-este punto y de su campia hablar apasionadamente, bien lo s; pues se
-me figura que voy hacer el elogio de un hijo de mis entraas. Con la
-benevolencia del lector-cazador, que espero me conceda, me tomar la
-libertad de ser algo extenso en este prrafo. Es terreno aquel que
-conozco palmo palmo. Desde San Guim Calaf, de la Rabasa Cervera, y
-por otro lado de Pujal y Santa F y de Rubian Talavera, cuadriltero
-de diez leguas, hay un sinnmero de cazaderos tan bellos y agradables,
-que nada mejor puede exigir el cazador. La primera vez que caz en dicho
-sitio era bisoo en el arte, yendo agregado la _cuadrilla_ de los
-_cazadores de Gracia_, todos honrados menestrales. Agustin Cus siempre
-era el que llevaba la batuta en la cacera y merecia el puesto de
-director, pues sabia cazar, y matar mejor, hallndose adems dotado de
-un conocimiento especial para decir: _all estn las perdices_. Este
-buen amigo, sea por simpata por lo que fuere (lo cual le agradezco
-en el alma), dime muy buenas lecciones, lstima que no las aprovechara.
-Como por falta de salud tiempo hace que Cus no puede salir la caza,
-han trascurrido algunos aos desde que campo por mis respetos, pero de
-mi pecho no se ha borrado el agradecimiento y el grato recuerdo de mi
-excelente maestro.
-
-El cazador que en San Guim pueda disponer de una semana _redonda_ cuenta
-con grandes recursos, ya que cada dia le es dado cazar en terrenos
-nuevos y de buenas querencias; y advertiremos los de Madrid, por si
-alguna vez quieren visitarnos, que aunque no podemos ofrecerles el
-_Pardo_ ni _Viuelas_, tenemos en cambio _La Panadella_, _El Bosch d'en
-Carbasa_ y otros sitios. Aunque sea riesgo de disgustar algun amigo,
-no puedo con aquello de _tente lengua_... dejar de mencionar como le es
-fcil uno gozar una semana enterita en San Guim, cazando cada dia en
-terrenos diferentes.
-
-El tren llega al medio dia, y por consiguiente, aunque se est afanoso
-de escopetear las perdices, por necesidad (bien que por poco tiempo) hay
-que limitarse cazar en los alrededores de la estacion, donde nunca
-faltan un par de bandos que, tomndolas bien en mano, condcelas el
-cazador las cercanas de Freixanet bien San Dom, y aprovechando
-los tiros an se lleva uno seales de caza la posada. He aqu poco ms
- menos lo que puede hacerse en la tarde del primer dia. Recomiendo
-los cazadores para alojarse, el _hostal_ situado tiro de pistola de la
-estacion, bien, no estando demasiado fatigados y con humor de andar un
-cuarto de hora, se acomodarn bien y como en familia en casa Riera, de
-Amors, grupo de tres casas. All vamos parar con mi amigo Suol
-(Paco), y es tanto el cario que profesamos los de la casa y stos nos
-corresponden tan bien, que solemos sacrificar el siguiente dia de
-nuestro arribo, no acudiendo hasta el venidero los cazaderos que _in
-mente_ hemos destinado como teatro de nuestras _proezas_.
-
-Al otro dia ya uno puede tomar por el monte dejando su espalda el
-pueblo de Freixanet y dando la cara Cervera. A simple vista el cazador
-quedar sorprendido del hermoso terreno que pisa, querencioso para la
-caza. A ambos lados, montaas de tres horas de extension, en medio de
-frtil valle cubierto de campos de trigo, viedos y alguna que otra
-hortaliza. Si bien en este terreno las perdices se van largas, se las
-conduce las ltimas estribaciones del monte, sea en los bajos, y
-como siempre ah es donde se las hace dao, aconsejamos al cazador que
-al trmino de esta jornada, agradabilsima por los lances que
-sucesivamente se presentan, descanse y pida asilo en Montpalau,
-pueblecito situado en una eminencia. All moran los Vilaplana, sencillos
-labradores que se desviven por dar buena pitanza y mejor cama todos
-los cazadores que se presentan. Si durante esta jornada, como es muy
-probable, slo se ha logrado recorrer una parte del cazadero, conviene
-emplear el dia siguiente para batir el resto. Al salir del pueblo se
-irn siguiendo los montes que quedan la izquierda, y corrindose
-siempre hcia Cervera, se van llevando las perdices adelante; al tercer
-vuelo intentan stas retroceder para volver sus querencias, y entonces
-es cuando se las castiga. Semejante cacera concluye siempre medio
-dia, enfrente del pueblo de Santa F; y la sazon ha de calcular el
-cazador si le conviene retroceder por los bajos hasta el punto de
-partida, atravesar la hondonada y cazar de regreso en la solana que
-hay entre Santa F, Vergs y Altadill. Para esta parte de la cacera
-casi ms vale emplear otra jornada, pero si los cazadores son dos tres
-y saben cazar, aunque hay pocas perdices se las conduce bien y se las
-escopetea mucho. El monte presenta infinitas sesgaduras y hay bastantes
-matas, por cuyo motivo la caza resiste bien la muestra del perro. El
-trmino de esta jornada es Altadill, pueblecito de cuatro casas paralelo
-al norte de Montpalau y que slo dista un cuarto de hora de l.
-
-El siguiente dia se toman providencias para cambiar de cazadero; y ste
-debe ser el de _La Aygua escampada_, distante una legua escasa del
-pueblo de Montpalau, y como por lo regular el trmino de la cacera es
-_Tim_, la experiencia aconseja que el cazador se encamine al _Mas d' en
-Jaumet_, situado la derecha de la carretera y dos horas lejos de
-Cervera y quince minutos de _Tim_. La cacera ha de principiar por la
-maana, en las estribaciones del pueblo de la Rabasa, y desde este punto
-ya el cazador sabe lo que debe hacer todo el dia. Descbrese la
-izquierda otro pueblo, el de Montbri, y en los cerros de la derecha
-pasa el tren de Zaragoza, donde est emplazada la via. A lo lejos se
-divisa _Tim_, rodeado de montecillos cubiertos de matas de tomillo, y
-si las perdices vnse por aquel lado, se las zurra de lo lindo, pues
-esperan mucho. Los terrenos que acabo de describir llevan el nombre de
-_Aygua escampada_. Los montes tienen bastante base, pero escasos
-desaguaderos, por cuyo motivo las lluvias se han abierto cauces, y sin
-ser quebrado el terreno se hace penoso para el cazador causa de las
-muchas subidas y bajadas; mas, si se logra meter las perdices en estos
-sitios, arrancan todas arrepulladas y se las tira bien. En los terrenos
-que acabo de citar, aunque no he hablado de la liebre, por no ser este
-mi objeto, las hay abundantes y se tiran bien, no pasndose dia que no
-se vean cuatro cinco, lo cual presta nuevo aliciente al cazador que se
-mete por tales andurriales.
-
-Penetremos ya en el clebre _Mas d'en Jaumet_ y vamos ver cmo nos
-trata la Antonia, quien han dejado sola, pues su hija (Antonieta)
-enlazse con un rico propietario dels Hostalets, pueblo que dista media
-hora del _Mas_. La casa est que ni pintada para los cazadores:
-espaciosa sala, buenas alcobas y camas blandas, mesa muy regular, pues
-hasta saben presentar un buen puchero, alimento muy conveniente al
-cazador para reponerse de las fatigas del dia. De esta casa, cuya _fama
-vol algun dia por el mundo de los cazadores_ (estilo cajetillesco), van
-desapareciendo sus antiguos dueos, medida que va ausentndose la caza
-de sus contornos. Muchos cazadores han dejado de frecuentarla por lo
-tristes que all se hallan, y slo impenitentes, tales como mis amigos y
-excelentes cazadores Suol (Paco), el _rebelde_ Vilaseca y un _servidor
-de ustedes_, acudimos all con frecuencia, pues conocemos bien las
-querencias de la caza y el sitio en que podremos matar las piezas, con
-la certeza de asegurar hasta el nmero de disparos que debemos efectuar
-segun el punto adonde conduzcamos las perdices.
-
-Mas, al pensar el cazador que quince aos atrs siempre se llevaba en
-movimiento una cincuentena de perdices, mientras que ahora en llegando
-noviembre cuando se encuentra un bando de seis siete es un
-acontecimiento, apenas tiene calma para escuchar los idiotas pastores
-y rabadanes que dicen: Este ao lo menos hemos cogido en el trmino de
-Montbri unos _cuatrocientos huevos_ y ms de veinte _hembras en sus
-nidos, con el lazo_ (histrico). Y no se crea que se necesita mucho
-tiempo para recorrer el trmino citado, pues basta media hora escasa.
-Slo cito Montbri como ejemplo; los pastores se alaban en todas
-partes de hacer lo mismo, aunque est presente el alcalde del pueblo, y
-hasta se lo contarn la primera pareja de la guardia civil que
-encuentren.
-
-Abandonemos, pues, el _hostal d'en Jaumet_ con el corazon dolorido por
-no poderlo visitar ms menudo, ya que en sus alrededores falta el
-principal aliciente del cazador, la caza, y emprendamos la jornada
-llamada de la _Carretera_ hasta la Panadella.
-
-Esta cacera, constityela el terreno _mejor del mundo_. Figuraos (me
-dirijo al cazador que no haya estado) una red de montecillos (tal vez
-ascienden cien), que un par de cazadores inteligentes recorren en una
-jornada: cada uno de estos montes forma una pequea meseta donde
-juguetean las perdices comiendo alguna bellota, al par que con el paso
-de las carretas que transitan doscientos metros de all se entretienen
-y acechan los excrementos que van dejando las caballeras en el camino,
-pues esas aves son aficionadas al grano que encuentran entre el
-estircol. Serpentea la carretera por entre dichos montecillos, y desde
-la Panadella, ya provincia de Lrida, hasta Cervera, forma un plano
-inclinado encajonado entre dos angostos rierales, que llevaron la
-desolacion Trrega, en setiembre del 74, hinchados por las grandes
-lluvias de aquellos dias. El cazador que sabe lo que hacen las perdices
-en estos terrenos, ha de seguir por la maana los lindes de la
-carretera, si bien son tan querenciosas de dichos sitios las aves, que
-hay dia que de arriba abajo se pierde el tiempo sin poderse salir de
-all, y esto trabajndolas bien, en cuyo caso lo que ms disgusta son
-los testigos, pues para cazar cmodamente se necesita estar solo.
-
-Cuando las perdices atraviesan al vuelo la carretera, no hay que
-molestarse en perseguirlas. El cazador que conoce este juego debe cazar
-de modo que las obligue quedarse en la misma ladera, y que de sta
-pasen los bajos de Palams, preciosa ribera de zanjas: all quedan
-pegadas como con obleas y por la tarde reciben una zurra de padre y
-seor mio.
-
-En todas estas caceras conviene ir acompaado de un mozo que cargue con
-las liebres, pues stas se matan menudo: hay bastantes, salen bien y
-en limpio.
-
-Podria contar muchos lances de las liebres que se encuentran en este
-terreno, pero ya he manifestado que me apartaria del objeto de este
-libro. Dir s, para inteligencia de los aficionados, que se matan en
-abundancia.
-
-Hora es ya de regresar al punto de donde salimos al emprender nuestra
-cacera, es decir, San Guim, y entremos otra vez en casa Riera de
-Amors, donde seremos recibidos con agrado.
-
-El cazador, cazando cuatro dias seguidos ya tiene suficiente, mxime
-cuando uno observa que el perro sigue aspeado y casi de mala gana,
-pero... queda otro terreno que todo conocedor de l no puede dejar de
-recorrer; me refiero al clebre _Bosch d'en Carbasa_, llano de mas de
-una legua en cuadro, donde se encuentran buenos bandos de perdices,
-liebres y en invierno becadas. En ese terreno se fusilan muchos rboles,
-aunque las perdices arranquen de cerca, pues es tal la espesura de la
-arboleda que slo se las tira bien aprovechando un claro. Conviene,
-pues, dar una fuerte batida y cruzar por todos lados para sacarlas de la
-dehesa y llevarlas los mrgenes de los montes vecinos, ya que all se
-dejan parar por el perro. Demos fin este captulo, porque nos llaman
-otros asuntos _importantes_ relativos al noble arte cinegtico.
-
-
-
-
-CAZAR DE MALA LEY.
-
-
-Los verdaderos cazadores dicen que caza de mala ley todo aquel que va
-con el _reclamo_ y forma con el ramaje un _tollo_, y en el cerro en
-sitio propsito para su objeto emplaza su _jaula_, y con el
-_cuchich_, _cuchich_ atrae al perdigon, dejndole muerto en el
-terreno.
-
-Este modo de cazar tan en boga en Madrid, segun nos describe el seor
-Escrich en su obra _Los Cazadores_, donde aparecen las maravillas de sus
-reclamos _Chaparro_ y _D. Juan_, me ha hecho en verdad muy poca gracia.
-El mal ejemplo es contagioso, y si ste dimana de un cazador aficionado
- la escopeta y al perro, an es menos excusable. No basta citar en
-apoyo del _reclamo_ la obra _Arte de cazar la perdiz_, impresa en
-Sevilla en 1855, en la cual, fundndose su autor en que todos los
-cazadores son unos _traidores_, declara que cualquier medio empleado
-para matar la caza es justificable. Si este argumento se pusiera en
-prctica, no habria caza posible; el _reclamo_ tampoco serviria. Era lo
-que bastaba para concluir con toda clase de volatera, en cuyo caso la
-escopeta podria emplearse en cazar ranas y murcilagos, que bien valdria
-la pena de tirar estos dos bichos falta de cosa mejor.
-
-En Catalua hay poca aficion al _reclamo_, pero los que as cazan no
-llevan el ttulo de cazadores, y hasta en su propia casa ocultan el
-_arma-farol_ homicida si ven entrar un cazador de escopeta; les
-avergenza su mtodo de caza. En Catalua slo van al monte fijar el
-reclamo los _cazadores_ panzudos.
-
-Otros medios muy repugnantes se emplean para exterminar la caza, tales
-como los _lazos_, el _caldero_ y _cerquilla_, la _rameta_ y las
-_corridas_ que la dan en varias comarcas, cuyo nombre es _ la
-cansada_..... pero todos los que emplean estos ardides, son conocidos
-entre los cazadores, con el nombre de _rateros_.
-
-Si los gobernadores de provincia pudiesen ocuparse ms de la
-administracion, pasando severas circulares los alcaldes de los pueblos
-para que denunciaran estos abusos cuantos faltan la ley de caza, no
-tendramos que deplorar su completo exterminio. El mal es grave, y urge
-poner coto tantos desmanes.
-
-Hace tiempo slo se pide la licencia de caza la vista de Barcelona. En
-los dems puntos nadie repara quien lleva escopeta y lo que va. De
-seguir as, la caza en Espaa slo ser un recuerdo legendario.
-
-
-
-
-NUESTROS CAZADORES.
-
-
-Es justo que dedique un captulo de mi _obrita_ como recuerdo nuestros
-mulos de san Eustaquio. Los viejos cazadores de esta provincia van
-desapareciendo para no volver. La sencillez de sus costumbres, la poca
-importancia que daban al mrito y fama que en su tiempo conquistaran de
-excelentes cazadores, sus escopetas de chispa, los caones Ripollenses,
-de los _tres sietes_, sus caceras en los alrededores de Barcelona, la
-mortandad de perdices que continuamente hacian en lo que hoy llamamos el
-_Putxet_[1], sus salidas los fosos de las murallas con traillas de
-perros, matando la sazon ms conejos all donde ahora se levantan los
-mejores edificios de la capital, que actualmente en cualquiera salida
-la distancia de veinte y cinco kilmetros, todo esto es digno de
-recordacion. Y con cunto placer se escuchan an tan agradables
-conversaciones! Quin no se deleita al oirles? An quedan restos de tan
-honrosa plyade, disminuida por los achaques y la vejez, abrindose paso
-los contemporneos, para quienes se ha simplificado mucho la diversion,
-merced los ltimos adelantos, y sobre todo las vas frreas, que
-permiten recorrer en poco tiempo la provincia de uno otro confin.
-
- [1] Pueblo situado cuatro kilmetros de Barcelona.
-
-Entre nosotros viven los Mateus, los Angladas, los Anfruns, los Torras,
-los Sandiumenges, los Martorells, los Suols y muchos otros tan diestros
-como los mencionados, cuya aficion la caza raya en delirio,
-lamentndose de verla desaparecer por las causas indicadas.
-
-Lstima es que habiendo tanta predileccion en Barcelona por el ejercicio
-de la caza, carezcan los cazadores de un punto de reunion. Aos atrs se
-abri un casino con el objeto de hablar de caceras y hasta para
-reclamar colectivamente sobre cualquiera infraccion de la ley de caza;
-pero... tuvo que cerrarse por algunas pequeeces y miserias. Resultado
-de esto es, que el que quiere saber algo de las salidas debe acudir
-los establecimientos de los amigos Anfruns y Maci, y all siempre se
-coge algo al vuelo.
-
-Algun tiempo servian para el caso algunos establecimientos; pero como la
-poltica lo invade todo, sta tiene siempre la palabra, y los cazadores
-que no estn por _msica_, poco poco han dejado de frecuentar aquellos
-centros.
-
-Esto ha contribuido que el noble arte de la caza se haya elevado
-poca altura en Barcelona y que muchas de las buenas caceras que
-todava se llevan cabo pasen completamente desapercibidas para el
-_mercado_ de los cazadores.
-
-
-
-
-MXIMAS Y CONSEJOS.
-
-
-Los caones de la escopeta deben mirar siempre al cielo.
-
- * * * * *
-
-Aunque se tenga la seguridad de que est descargada la escopeta, cuando
-se est en actitud de descanso jams deben apoyarse los codos en la boca
-de los caones, ni dirigirlos nunca en direccion ningun compaero.
-
- * * * * *
-
-Si una pieza marcha en direccion algun punto que haya la ms remota
-probabilidad de hacer dao, no se le tira.
-
- * * * * *
-
-En los sitios de pasos peligrosos para las caidas, se pondr el
-disparador de la escopeta al _seguro_.
-
- * * * * *
-
-Antes de pasar los umbrales de tu casa la de cualquiera, se descargar
-la escopeta.
-
- * * * * *
-
-Buscars la caza en verano en los umbriles, y en invierno en las
-solanas.
-
- * * * * *
-
-Se cazar siempre contra el viento, para evitar que la caza se aperciba
-de las pisadas del cazador y ser ms favorable al perro que recibe los
-vientos de ella.
-
- * * * * *
-
-Si te has propuesto cazar varios dias seguidos, el primer dia debes
-retirarte temprano, para acostumbrarte la fatiga.
-
- * * * * *
-
-No bebas mucha agua, pues hasta cierto punto sta no apaga la sed, y s
-quita las ganas de andar. Lo mejor es _tragos_ de _vino aguado_.
-
- * * * * *
-
-Cuando yerres muchas piezas, entonces descansa un poco, y de este modo
-la excitacion se calma y se tira mejor.
-
- * * * * *
-
-La caza cansada es la que se debe perseguir. No tengas capricho de ir en
-busca de nueva.
-
- * * * * *
-
-Cuando obsequies algun amigo cacera, en terreno desconocido para
-l, cdele siempre los sitios de preferencia.
-
- * * * * *
-
-En las caceras se conoce la buena educacion de las personas.
-
- * * * * *
-
-Cuando se vaya alguna cacera en compaa de varios amigos y se
-pregunte al regreso por quin ha muerto ms menos piezas, la
-contestacion debe ser: _tantas piezas en total_.
-
-Jams lleves al entrar en los pueblos la caza colgada fuera del morral,
-pues hace muy _nio_.
-
- * * * * *
-
-Si no quieres _deshonrar_ el buen nombre de cazador, no debes, en
-cualquier caso que te encuentres, comprar ninguna pieza de caza.
-
- * * * * *
-
-No creas que sean buenos cazadores los que todos los dias cambian de
-escopeta y perro.
-
- * * * * *
-
-Cazador que use anteojos, pocas perdices matar.
-
- * * * * *
-
-No lleves el perro perdiguero en las caceras de conejos.
-
- * * * * *
-
-Si en algo estimas el perro, no lo prestes nadie.
-
- * * * * *
-
-Si alguna vez tienes alguna querella en el monte por asunto de caza,
-transige siempre favor del dueo colono.
-
- * * * * *
-
-Siguiendo las mximas y consejos indicados, puedes lanzarte por esos
-mundos de Dios, amigo cazador, con toda la tranquilidad y satisfaccion
-que requiere el cazar, con escopeta, al vuelo y perro de muestra.
-
-
-
-
-EPLOGO
-
-Dedicado al Teniente general D. Lorenzo Milans del Bosch.
-
-
-Escrita la presente obrita lo que quiera llamarse, llega mis manos
-el libro que V. acaba de publicar, titulado: _La Caza. Utilidad de su
-conservacion._ Doy V. la ms cordial enhorabuena por su nueva
-elucubracion y por el fin laudable que en ella se propone, es saber:
-la conservacion de la caza por medio de una ley previsora que evite su
-exterminio.
-
-Cuando le el libro _Los Cazadores_, su autor D. Enrique Prez Escrich,
-admir el gracejo con que est escrito; mas con cunta amargura vle
-hacer la apologa de los reclamos y dar los que los usan el ttulo de
-cazadores! En mi concepto los tales no son ms que unos _fusileros_.
-
-Despues el seor baron de Crtes, en su libro _Recuerdos de caza_, sale
-indirectamente la defensa del cazador de buena ley, es decir, con
-escopeta, al vuelo y perro de muestra, y por deferencia (no puede ser
-otra cosa) transige con el reclamo; empero condicion y como recurso de
-la edad madura, pues parece que al seor baron ya le fatigan los
-_repechos_. Con todo, estoy convencido, atendida la vala de ese
-cazador, que no _deshonrar_ las glorias conquistadas en su larga
-carrera cinegtica.
-
-Su libro, seor Milans, vale mucho, y los cazadores lo han de reconocer
-as. La caza va desapareciendo de nuestras frtiles comarcas, siendo
-tanto lo que se abusa en el asunto que, como dice V. muy bien, sta
-pronto ser un mito.
-
-Mientras se permita los pastores llevar perros de sentido para que
-lo mejor se dirijan la yacija de la liebre y la devoren los gazapos,
-destrocen las polladas de las perdices, y que los _rabadanes_ cojan los
-huevos comindoselos en tortilla; mientras por las fiestas mayores de
-los pueblos de corto vecindario se tolere que la juventud se reuna y
-tome posiciones en las eminencias, y, _all va, all viene_, cansen
-las perdices cogiendo de una vez dos trescientas, para con su producto
-pagar el gasto de la fiesta, presidida siempre por el seor alcalde;
-mientras en Catalua, y sobre todo en la Segarra, haya tantos
-_ramalistas_ que mansalva y engao, de un tiro maten diez doce
-perdices; mientras en los pueblos de Levante se vean tantos _ioleros_
-que montones las estrangulan; mientras haya el _caldero_, y la
-_linterna_ y la jaula con el _reclamo_, y pueda salir ste en pleno dia
- vista y paciencia de las autoridades de la capital de Espaa; mientras
-existan gobernadores de provincia que telegrafien porque en tal cual
-sitio se ha extraviado un reclamo; mientras un propietario con su
-jaulita y el _cuchich_ pueda atraer su propiedad caza que no le
-pertenece y matarla en cualquier poca del ao; mientras los
-indivduos del somaten se les permita sin licencia de caza piratear por
-todos los montes; mientras... esta es la gorda!... anuncien los
-papeles pblicos que en marzo, abril, mayo, junio y julio, _el seor
-presidente del Consejo de ministros, etc., con el conde tal cual y el
-ex-ministro de esa de aquella procedencia han salido cazar los
-montes de_...; mientras vea V. todo eso, intil que se canse en escribir
-libros para la conservacion de la caza. Si se aplicara la ley
-principiando por los de arriba y por los que han de dar buen ejemplo, no
-dude V. que los de abajo cumplirian mejor.
-
-Mi humilde opinion es que basta la ley que hoy rige en la materia, con
-tal de que se cumpliera.
-
-La que V. propone limita la poca de caza cinco meses, y de aprobarse
-sabe V. lo que sucederia? Que los cazadores que observamos
-estrictamente la ley, haramos intilmente el sacrificio de dos meses,
-mientras que los _rateros de monte_, el uno por ser propietario, el otro
-porque la caza _se le come la sembradura_ (ste la extermina en caso
-necesario hasta con estrignina), el de ms all para venderla, la
-perseguirian lo mismo que ahora.
-
-V. no ignora, mi general, que en nuestro querido pas sacan en las
-fondas perdices cluecas en el mes de mayo, y en julio perdices pollas,
-lo cual consideramos los espaoles bocado delicado, sin rechazarlo
-enrgicamente. As pues, mientras miremos la cosa con tanta calma y no
-se respete la ley, sino que, al contrario, hasta por lujo se infrinja;
-mientras, repito, no se ponga un correctivo todo esto, sostendr que
-la ley de caza que rige es buena y retebuena, siempre que se cumplan sus
-artculos, y en este caso, yo cualquiera, sin ser cazador de fama ni
-mucho menos, como los Pepe Real, Ahumada y otros, admitiria por mi
-cuenta, en compaa de mi _Pito_, el noble desafo con que les brinda V.
-de matar, en noviembre del 77 y en campo libre, las seis perdices que V.
-les propone.
-
-Dispense V. mi osada, seor Milans, en dedicarle este eplogo. Si es de
-su agrado, quedar muy satisfecho,
-
- Su paisano Q. B. S. M.
- Manuel Saur.
-
- Barcelona 15 de diciembre de 1876.
-
-
-FIN.
-
-
-
-
-NDICE.
-
-
- Pgs.
-
- PRLOGO.--El porqu de la obra. 5
-
- Traje del cazador. 7
-
- La escopeta. 9
-
- Municiones. 10
-
- Perro perdiguero. 11
-
- Modo de tirar las perdices. 13
-
- 1. de Agosto. 17
-
- Setiembre. 25
-
- Octubre y noviembre. 29
-
- Diciembre y enero. 33
-
- Febrero. 34
-
- Ventajas y desventajas de cazar solo acompaado. 37
-
- Terrenos y recuerdos agradables. 39
-
- Cazar de mala ley. 49
-
- Nuestros cazadores. 51
-
- Mximas y consejos. 53
-
- EPLOGO.--Dedicado al Teniente general D. Lorenzo
- Milans del Bosch. 56
-
-
-FIN DEL NDICE.
-
-
-
-
-MANUEL SAUR, EDITOR. BARCELONA.
-
-EXTRACTO DEL CATLOGO.
-
-
-=El pastelero moderno=.--NOVSIMO MANUAL DE PASTELERA. El ms completo
-de los publicados hasta el dia. COMPRENDE las frmulas ms usuales para
-la confeccion de toda clase de pastelera, tanto francesa como italiana,
-espaola, inglesa y alemana, y el MODO DE COCER LOS PASTELES SIN HORNO.
-Libro de suma utilidad PARA PASTELEROS Y FAMILIAS. Escrito por una
-notabilidad en el arte.--=Mil frmulas para pasteles y 100 grabados.= Un
-t. 8. mayor, 12 reales.
-
-=Arte de hacer vinos.= Manual Terico y Prctico del arte de cultivar
-las vias, el cultivo y abono de las tierras, eleccion y plantacion de
-las cepas, sus enfermedades y modo de curarlas; de la poda y cava; modo
-de hacer el vino natural y artificial, etc., por D. Nicols de
-Bustamante.--Un tomo en 4. con una lmina, 12 reales.
-
-=Las plantas industriales.= Tratado curioso del cultivo y
-aprovechamiento de las plantas testiles, oleaginosas, tintreas y otras
-que son objeto de la industria; por varios agrnomos. Obra de sumo
-inters para los tejedores, estampadores, tintoreros y pintores; para
-los fabricantes de aceites, vinos, aguardientes, licores, sidras, y en
-fin, para los cosecheros cultivadores de dichas plantas.--Un tomo en
-8. mayor, 12 reales.
-
-=Manual del diamantsta y del platero.= Tratado de las piedras
-preciosas, finas imitadas, de los metales, su aleacion, esmalte,
-soldadura y dems procedimientos relativos estas artes; segunda
-edicion. Un tomo en 8. mayor, 10 reales.
-
-=Manual completo del tintorero.= Obra terica y prctica puesta al
-alcance de los tintoreros, quitamanchas y toda clase de personas, por A.
-D. Vergnaud; segunda edicion, refundida y considerablemente aumentada
-segun los adelantos del dia. Un tomo en 8. mayor, con lminas, 20 rs.
-
-=Manual para construir toda clase de relojes de sol=, por J. de Arfe,
-adicionado con un tratado de los relojes de sol horizontales,
-verticales, laterales. Ilustrado con 28 grabados intercalados en el
-texto para su mejor inteligencia; segunda edicion. Un tomo en 8. mayor,
-4 rs.
-
-=Manual completo del encuadernador y rayador.= Nueva edicion corregida y
-aumentada, con lminas. Un tomo en 8., 14 rs.
-
-=Fbulas de Esopo=, corregidas y aumentadas con las de otros famosos
-autores. Nueva edicion con grabados _sui generis_. Un tomo en 8., 5 rs.
-
-=Historia de la vida y hechos= y astucias sutilsimas del rstico
-Bertoldo, la de Bertoldino su hijo, y la de Cacaseno su nieto. Nueva
-edicion con grabados _sui generis_. Un tomo en 8., 6 rs.
-
-=El Buffon de los nios.= Compendio de Historia Natural. Arreglado para
-la enseanza pblica y adoptado en clase de premio, por D. M. Pons y
-Fuster; tercera edicion con ms de cien grabados, 10 rs.
-
-=El orculo de Napoleon=, sea _El libro de los destinos_. Un tomo en
-4., quinta edicion con una gran lmina, 10 rs.
-
-=Libro del destino=, del amor y de la fortuna. Un tomo en 16., 4 rs.
-
-=El orculo de las seoras y seoritas=, consejero del bello sexo. Rica
-impresion en 8. mayor, 8 rs.
-
-=El talisman de los sueos y de visiones nocturnas=, por Miguel
-Nostradamus, famoso astrlogo: tercera edicion. Un tomo en 8., 6 rs.
-
-=Juegos de manos= sea arte de hacer diabluras, por Minguet, con
-grabados. Un tomo en 8., 4 rs.
-
-=Flores de invierno=; coleccion de juegos de manos. Un tomo en 8. con
-grabados, 8 rs.
-
-=El libro negro= la mgia, ciencias ocultas, explicaciones de clebres
-talismanes, el arte de adivinar por los naipes y el de ECHAR LAS CARTAS,
-llave de sueos infinidad de grabados: sptima edicion. Un tomo en
-8., 10 rs.
-
-=Nuevo arte de cocina=, terico prctico, adicionado con un tratado de
-hacer conservas y en forma de apndice. El Manual del licorista, por D.
-Juan Altimira: sexta edicion. Un tomo en 16., 6 rs.
-
-=El lenguaje de las flores y el de las frutas.= Un tomo en 8. mayor,
-con grabados y cromos, 10 rs.
-
-=Secretos de la naturaleza=, por Jernimo Corts. Nueva edicion
-refundida y aumentada. Un tomo en 8. can grabados, 4 rs.
-
-=Ramillete de felicitaciones=, para todas las ocurrencias de la vida:
-novena edicion. Un tomo en 16., 4 rs.
-
-=Cria del conejo domstico.= Sistema celular, con ahorro de tiempo y
-dinero segun experiencia de muchos aos, por Manuel Martorell y Pea.
-Segunda edicion aumentada. Un cuaderno con lminas, 4 rs.
-
-=El estado interesante.= Manual de la mujer embarazada, remedios fciles
-y seguros para corregir las afecciones del embarazo, por el Doctor D.
-Antonio Pons y Codinach, segunda edicion, 4 rs.
-
-=Manual de la madre de familia.= Contiene: afecciones propias de la
-mujer embarazada y medios de remediarlos, con arreglo al sistema
-homeoptico. Consejos las madres. Enfermedades de los nios de pecho,
-y su tratamiento por el mismo sistema, por D. Pedro M. Brun, licenciado
-en medicina y cirugia. 1 tomo en 16. 4 rs.
-
-=Tesoro de juegos de sociedad.= Contiene las reglas y leyes de ms de
-treinta juegos permitidos en toda clase de sociedades, casinos,
-reuniones particulares y cafs. El tresillo, billar, ajedrez, whist,
-dmino, lotera, chaquete, damas, solo, cuidadela, malilla, ecart,
-batalla, bciga, etc., etc. Segunda edicion corregida y aumentada, 6 rs.
-
-=Libro de chistes=, chascarrillos y bromazos. Un tomo en 16., con
-grabados, 4 rs.
-
-ENCICLOPEDIA HIGINICA DE LA BELLEZA. =Fisiologa descriptiva de las
-treinta bellezas de la mujer.= Anlisis histrico de sus cualidades
-fsicas y morales, sus perfecciones imperfecciones, temperamentos,
-fisonomas, carcteres, consejos higinicos para conservar la salud y la
-hermosura, cuidados del tocador, y ramillete de frmulas de perfumera
-higinica. Obra escrita en francs por el clebre mdico higienista A.
-Debay; traduccion de Mariano Blanch. Un tomo en 4., magnfica
-impresion, 14 rs.
-
-=Vctor Hugo=.--LTIMO DIA DE UN SENTENCIADO MUERTE.--_El reo de
-muerte_ y _El verdugo_, por Espronceda. Un tomo 8. mayor, 4 rs.
-
-=Vctor Hugo=.--HOMBRES CLEBRES. _Mirabau_. _Voltaire_. _Lamennais_.
-_Imbert._ _Galloix_. _Lord Byron_. _Valter Scott_. Un tomo en 8. mayor,
-4 rs.
-
-=Vctor Hugo=.--EL AO TERRIBLE. 1 tomo en 8. mayor, 8 rs.
-
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- * * * * * *
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-Nota del Transcriptor:
-
-Errores obvios de imprenta han sido corregidos.
-
-Pginas en blanco han sido eliminadas.
-
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-
-***END OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK LA CAZA DE LA PERDIZ CON ESCOPETA,
-AL VUELO Y CON PERRO DE MUESTRA***
-
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-Project Gutenberg-tm is synonymous with the free distribution of
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-Gutenberg Literary Archive Foundation was created to provide a secure
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-Foundation
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@@ -2,8 +2,8 @@
"http://www.w3.org/TR/xhtml1/DTD/xhtml1-strict.dtd">
<html xmlns="http://www.w3.org/1999/xhtml">
<head>
-<meta http-equiv="Content-Type" content="text/html; charset=ISO-8859-1" />
-<title>The Project Gutenberg eBook of La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y con Perro de Muestra, by Manuel Saur</title>
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+<title>The Project Gutenberg eBook of La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y con Perro de Muestra, by Manuel Saurí</title>
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<style type="text/css">
@@ -169,26 +169,10 @@ table {
</style>
</head>
<body>
+<div>*** START OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK 44120 ***</div>
<h1 class="pg">The Project Gutenberg eBook, La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y
-con Perro de Muestra, by Manuel Saur</h1>
-<p>This eBook is for the use of anyone anywhere at no cost and with
-almost no restrictions whatsoever. You may copy it, give it away or
-re-use it under the terms of the Project Gutenberg License included
-with this eBook or online at <a
-href="http://www.gutenberg.org">www.gutenberg.org</a></p>
-<p>Title: La Caza de La Perdiz Con Escopeta, Al Vuelo y con Perro de Muestra</p>
-<p>Author: Manuel Saur</p>
-<p>Release Date: November 6, 2013 [eBook #44120]</p>
-<p>Language: Spanish</p>
-<p>Character set encoding: ISO-8859-1</p>
-<p>***START OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK LA CAZA DE LA PERDIZ CON ESCOPETA, AL VUELO Y CON PERRO DE MUESTRA***</p>
+con Perro de Muestra, by Manuel Saurí</h1>
<p>&nbsp;</p>
-<h4 class="center">E-text prepared by Carlos Coln<br />
- and the Online Distributed Proofreading Team<br />
- (<a href="http://www.pgdp.net">http://www.pgdp.net</a>)<br />
- from page images generously made available by the<br />
- Google Books Library Project<br />
- (<a href="http://books.google.com">http://books.google.com</a>)</h4>
<p>&nbsp;</p>
<table border="0" style="background-color: #ccccff;margin: 0 auto;" cellpadding="10">
<tr>
@@ -222,47 +206,47 @@ LA PERDIZ</h1>
<p class="p6 center small">por</p>
-<p class="center">MANUEL SAUR</p>
+<p class="center">MANUEL SAURÍ</p>
<p class="p2b">El que sabe cazar la perdiz al vuelo,
-con perro de muestra, debe cazar bien
-todo, lo mismo nade, codorniz becacina,
-que conejo, liebre jabal, etc., etc.</p>
-<p class="p2c"><span class="smcap">Baron de Crtes</span>, <b>Recuerdos de caza</b>.
+con perro de muestra, debe cazar bien á
+todo, lo mismo ánade, codorniz ó becacina,
+que conejo, liebre ó jabalí, etc., etc.</p>
+<p class="p2c"><span class="smcap">Baron de Córtes</span>, <b>Recuerdos de caza</b>.
</p>
<p class="p6 center ht">BARCELONA<br />
-MANUEL SAUR, EDITOR<br />
+MANUEL SAURÍ, EDITOR<br />
1877</p>
<p class="p6 ml50">Es propiedad del autor y editor.</p>
-<p class="p2 ml50">Queda hecho el depsito en manos de los cazadores.</p>
+<p class="p2 ml50">Queda hecho el depósito en manos de los cazadores.</p>
-<p class="p6 center ht">BARCELONA.&mdash;Imprenta de la Viuda Mir y C., Sobradiel, 10.&mdash;1877.</p>
+<p class="p6 center ht">BARCELONA.&mdash;Imprenta de la Viuda Miró y C.ª, Sobradiel, 10.&mdash;1877.</p>
-<h2 id="PROLOGO">PRLOGO.<br />
+<h2 id="PROLOGO">PRÓLOGO.<br />
-EL PORQU DE LA OBRA.</h2>
+EL PORQUÉ DE LA OBRA.</h2>
-<p>He puesto este epgrafe al prlogo de mi <i>obra</i>, y
+<p>He puesto este epígrafe al prólogo de mi <i>obra</i>, y
creo no ando acertado, pues antes debia preguntarme:
-A qu escribir de caza despues de publicado el libro:
+¿A qué escribir de caza despues de publicado el libro:
<i>Los cazadores</i>, parto del ingenio del fecundo novelista
-Enrique Prez Escrich, y el titulado: <i>Recuerdos de
-caza</i>, escrito por el infatigable mulo de san Eustaquio,
-seor baron de Crtes?</p>
+Enrique Pérez Escrich, y el titulado: <i>Recuerdos de
+caza</i>, escrito por el infatigable émulo de san Eustaquio,
+señor baron de Córtes?</p>
-<p>En esto est el <i>quid</i> de mi osada; y todo el que haya
+<p>En esto está el <i>quid</i> de mi osadía; y todo el que haya
tenido la fortuna de leer las producciones que acabo
-de citar, comprender el mvil que me ha guiado al
-dar la estampa estos apuntes, si es que se toma el
+de citar, comprenderá el móvil que me ha guiado al
+dar á la estampa estos apuntes, si es que se toma el
trabajo de leer mis dislates.</p>
<p>He dicho y adelante.</p>
@@ -278,38 +262,38 @@ trabajo de leer mis dislates.</p>
<p>Aunque parezca secundario ocuparse del traje que
-debe usar el cazador, nicamente me limitar encargar
-que ste sea sencillo y sin jactancia. Interiormente
-llevar camiseta de franela, lo cual le evitar
+debe usar el cazador, únicamente me limitaré á encargar
+que éste sea sencillo y sin jactancia. Interiormente
+llevará camiseta de franela, lo cual le evitará
muchos resfriados si tiene la prudencia de cambiarla
-al llegar de la cacera la casa parada. Esto prenda
-de ropa es ms conveniente en verano, aunque parezca
+al llegar de la cacería á la casa ó parada. Esto prenda
+de ropa es más conveniente en verano, aunque parezca
improcedente por el excesivo calor que hace. Conviene
asimismo acostumbrarse al uso de la alpargata,
-llevando escarpines de lana: el pi va resguardado y
-se pisa en blando; as se trepa mejor el monte. En ciertos
+llevando escarpines de lana: el pié va resguardado y
+se pisa en blando; así se trepa mejor el monte. En ciertos
terrenos debe usarse el zapato claveteado, lo cual
-evita resbalones; borcegues y pantalon ancho, para
+evita resbalones; borceguíes y pantalon ancho, para
que la rodilla juegue con comodidad: el cuerpo abrigado
-con blusa chaqueta desprovistas de aberturas,
+con blusa ó chaqueta desprovistas de aberturas,
ojales y colgajos, ni tampoco conviene llevar leontina
en el reloj, pues todas estas cosas ofrecen el inconveniente
de que al hacer uso de la escopeta, se enredan
-con el pi de gato bien con el disparador, y esto,
-adems de interrumpir y hacer perder un tiempo precioso
+con el pié de gato ó bien con el disparador, y esto,
+además de interrumpir y hacer perder un tiempo precioso
para apuntar la pieza de caza, que se va sin poderla
saludar, tambien puede acarrear (punto importante
que se debe evitar) algun lance desagradable,
-tal como que se dispare la escopeta sin el beneplcito
-del cazador. Lo cual, ms del susto que ocasiona, es
+tal como que se dispare la escopeta sin el beneplácito
+del cazador. Lo cual, á más del susto que ocasiona, es
fuente de lamentables desgracias.</p>
-<p>Las camisas se usarn anchas de cuello, sin preten<span class="pagenum"><a name="Page_8" id="Page_8">[8]</a></span>siones
-ni ridiculeces, cubrindose la cabeza con un
-sombrero ligero, de alas regulares, item ms, un pauelo
+<p>Las camisas se usarán anchas de cuello, sin preten<span class="pagenum"><a name="Page_8" id="Page_8">[8]</a></span>siones
+ni ridiculeces, cubriéndose la cabeza con un
+sombrero ligero, de alas regulares, item más, un pañuelo
de seda sujeto en la sien; con lo que se evitan
-los dolores reumticos de cabeza, y es un gran preservativo
-contra el frio. En poca de calor debe evitarse
+los dolores reumáticos de cabeza, y es un gran preservativo
+contra el frio. En época de calor debe evitarse
que el sudor corra por el rostro, cosa tan molesta.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_9" id="Page_9">[9]</a></span></p>
@@ -320,28 +304,28 @@ que el sudor corra por el rostro, cosa tan molesta.</p><hr class="chap" />
<h2 id="LA_ESCOPETA">LA ESCOPETA.</h2>
-<p>El arma es conveniente que sea de dos caones, sistema
-Lafaucheux; su peso poco ms menos de seis libras
-y media siete; inferior este peso tiene el inconveniente
-que al salir el tiro hace un pequeo movimiento
+<p>El arma es conveniente que sea de dos cañones, sistema
+Lafaucheux; su peso poco más ó menos de seis libras
+y media á siete; inferior á este peso tiene el inconveniente
+que al salir el tiro hace un pequeño movimiento
de vibracion y perjudica la seguridad del mismo, y
-de ms tambien fatiga demasiado al cazador, lo cual
-no hay que echar en saco roto. El arma de dos caones
+de más tambien fatiga demasiado al cazador, lo cual
+no hay que echar en saco roto. El arma de dos cañones
tiene la ventaja de poder efectuar lances por duplicado.
Muchas veces al primer tiro se yerra la pieza, y se alcanza
con el segundo; otras, despues de haber tirado
-arranca otra pieza cercana y an se mata, y adems
+arranca otra pieza cercana y aún se mata, y además
(esto es lo principal) el cazador anda por esos mundos
-de Dios con ms garanta contra cualquier eventualidad:
-en toda querella que se suscite es ms respetado.</p>
+de Dios con más garantía contra cualquier eventualidad:
+en toda querella que se suscite es más respetado.</p>
<p>Basta que el calibre de la escopeta coja el cartucho
-marca 16. Los gallitos deben caer siempre voluntad
-del cazador; as es que los puntos han de estar si no al
+marca 16. Los gallitos deben caer siempre á voluntad
+del cazador; así es que los puntos han de estar si no al
pelo, <i>entre col y col lechuga</i>.</p>
-<p>Gastando 40 50 duros en una escopeta, se obtiene
-una buena arma de caza; lo dems es cuestin de puro
+<p>Gastando 40 á 50 duros en una escopeta, se obtiene
+una buena arma de caza; lo demás es cuestión de puro
lujo, sin ninguna influencia en la precision del tiro.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_10" id="Page_10">[10]</a></span></p>
@@ -352,16 +336,16 @@ lujo, sin ninguna influencia en la precision del tiro.</p><hr class="chap" />
<h2 id="MUNICIONES">MUNICIONES.</h2>
-<p>La plvora debe ser escogida, bastando con que el
-buen probador seale 5 grados. El cartucho se emplear
+<p>La pólvora debe ser escogida, bastando con que el
+buen probador señale 5 grados. El cartucho se empleará
de cartulina fina, para que entre y salga sin
necesidad de saca-cartuchos. Una vez haya servido,
debe tirarse, pues tiene sus inconvenientes el volver
- usarlos. El plomo sea los perdigones, en los meses
+á usarlos. El plomo ó sea los perdigones, en los meses
de agosto, setiembre y octubre basta emplearlos del
-nmero 6; en noviembre, diciembre, enero y febrero,
-entre el 4 y el 5. En esta poca del ao la perdiz se
-tira mayor distancia, y como est en su apogeo,
+número 6; en noviembre, diciembre, enero y febrero,
+entre el 4 y el 5. En esta época del año la perdiz se
+tira á mayor distancia, y como está en su apogeo,
necesita el plomo mayor para hacerla dar la voltereta.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_11" id="Page_11">[11]</a></span></p>
@@ -372,50 +356,50 @@ necesita el plomo mayor para hacerla dar la voltereta.</p><hr class="chap" />
<h2 id="PERRO_PERDIGUERO">PERRO PERDIGUERO.</h2>
-<p>El verdadero compaero del cazador es sin disputa
-el perro; por lo tanto, debe buscarse dcil, obediente
- inteligente. Sabido es que, como aqul comparte las
+<p>El verdadero compañero del cazador es sin disputa
+el perro; por lo tanto, debe buscarse dócil, obediente
+é inteligente. Sabido es que, como aquél comparte las
glorias y fatigas con tan leal <i>amigo</i>, los dos se reparten
-cariosamente el almuerzo, aunque sea trueque
+cariñosamente el almuerzo, aunque sea á trueque
de quedarse el amo con apetito.</p>
<p>Las castas del perro <i>seter-pointers</i> no han dado en
-nuestro pas los resultados que eran de esperar, de
-suerte que los cazadores hnse fijado en los perros perdigueros,
+nuestro país los resultados que eran de esperar, de
+suerte que los cazadores hánse fijado en los perros perdigueros,
ampurdaneses, mallorquines y navarros,
los cuales han producido mejores resultados por su
obediencia y por no adelantarse tanto como los <i>seters</i>
-y <i>pointers</i>. Como stos recorren el terreno que debe
-seguir el cazador, qutanle la ilusion al indicarle la
+y <i>pointers</i>. Como éstos recorren el terreno que debe
+seguir el cazador, quítanle la ilusion al indicarle la
pista.</p>
<p>Hay perro (de castas cruzadas como el podenco-sabueso)
que apenas tiene facha de perdiguero, y sin
-embargo da buenos resultados, pero necestase mucho
+embargo da buenos resultados, pero necesítase mucho
rigor para domarlos; una vez logrado esto, son incansables
-y dciles, y nunca se aspean.</p>
+y dóciles, y nunca se aspean.</p>
<p>Exigid del perro que tenga buenos vientos, firme
muestra y blanda boca, y con estas circunstancias, si
-el cazador sabe cazar y matar, de seguro tendr un
-excelente compaero que seguir bien un peon, y
-cobrar las aliquebradas. En tal caso dejad para otros
+el cazador sabe cazar y matar, de seguro tendrá un
+excelente compañero que seguirá bien á un peon, y
+cobrará las aliquebradas. En tal caso dejad para otros
la casta y la hermosura, pues esto es secundario.</p>
-<p>Las perras son generalmente ms dciles y finas,<span class="pagenum"><a name="Page_12" id="Page_12">[12]</a></span>
+<p>Las perras son generalmente más dóciles y finas,<span class="pagenum"><a name="Page_12" id="Page_12">[12]</a></span>
pero tienen cierto inconveniente que la naturaleza no
ha querido evitar, por cuyo motivo los cazadores prefieren
el macho.</p>
<p>Es conveniente cortar el rabo al perro, pues al moverse
agita las matas, se estropea hasta el punto de
-ensangrentarse con los zarzales, echa perder las
+ensangrentarse con los zarzales, echa á perder las
uvas y bate las mieses; si bien esta operacion de cortarles
-el rabo les afea, porque no hay duda que es ms
-bello y sublime cuando est de muestra con la cola
+el rabo les afea, porque no hay duda que es más
+bello y sublime cuando está de muestra con la cola
paralela al horizonte.</p>
-<p>Se observar que cuando arquean el rabo los perros
+<p>Se observará que cuando arquean el rabo los perros
de raza pura, indica liebre; un poco inclinado pero
recto, conejo; con la punta al horizonte, perdiz; recto
y un poco levantado, codorniz. Al perro bien castizo
@@ -423,13 +407,13 @@ le repugna traer la becada, guiones, las pollas de
agua, y sobre todo los <i>sabocs</i>, y algunos hasta los palomos.</p>
<p>Hay cazador que para lograr un perro de <i>primo cartello</i>,
-pgalo cualquier precio, creyendo que depende
-del can si mata ms menos perdices; y ste conoce
- tal punto el cambio de dueo, que se han dado casos
-de demostrar su agrado al nuevo amo abandonndole
+págalo á cualquier precio, creyendo que depende
+del can si mata más ó menos perdices; y éste conoce
+á tal punto el cambio de dueño, que se han dado casos
+de demostrar su agrado al nuevo amo abandonándole
en el mismo momento que se hace la prueba. Sobre
-esto pudiera llenar unas cuantas cuartillas, mas slo
-me limitar aconsejar que el que quiera un buen perro
+esto pudiera llenar unas cuantas cuartillas, mas sólo
+me limitaré á aconsejar que el que quiera un buen perro
<i>que se lo haga</i>.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_13" id="Page_13">[13]</a></span></p>
@@ -440,132 +424,132 @@ me limitar aconsejar que el que quiera un buen perro
<h2><a name="MODO_DE_TIRAR_A_LAS_PERDICES" id="MODO_DE_TIRAR_A_LAS_PERDICES">MODO DE TIRAR A LAS PERDICES.</a></h2>
-<p>Esta es la parte ms comprometida para dar una
-sucinta esplicacion del modo cmo deben matarse al
-vuelo las perdices, por la sencilla razon de que es difcil
-iniciar en el asunto aquellos que no han tenido la
+<p>Esta es la parte más comprometida para dar una
+sucinta esplicacion del modo cómo deben matarse al
+vuelo las perdices, por la sencilla razon de que es difícil
+iniciar en el asunto á aquellos que no han tenido la
satisfaccion en su vida de matar media docena de perdices
al vuelo.</p>
-<p>El cazador que en sus correras anuales puede contar
+<p>El cazador que en sus correrías anuales puede contar
con un promedio de por cada tres tiros una perdiz,
hay que proclamarle buen tirador. Aunque en salidas
determinadas cuente triunfos tales como hacer dar la
-voltereta todas las que tire, acontece asimismo (y
-bien menudo) que se dispara diez doce veces la escopeta
-y slo se matan un par de piezas, de manera
-que, por clculo aproximado, un buen tirador le sale
+voltereta á todas las que tire, acontece asimismo (y
+bien á menudo) que se dispara diez ó doce veces la escopeta
+y sólo se matan un par de piezas, de manera
+que, por cálculo aproximado, á un buen tirador le sale
la proporcion mencionada.</p>
<p>Al arrancar del suelo y al echarse al vuelo la perdiz,
-el cazador debe estar sereno, hacer una pequea suspension
-y con ligereza echarse la escopeta la cara;
-seguir la perdiz en su rpida carrera, encaonarla, y
+el cazador debe estar sereno, hacer una pequeña suspension
+y con ligereza echarse la escopeta á la cara;
+seguir á la perdiz en su rápida carrera, encañonarla, y
cuando se interpone con el punto de la escopeta, entonces
sin calcular distancias debe efectuarse la presion
-del dedo sobre el disparador; y seguro que obrando as
+del dedo sobre el disparador; y seguro que obrando así
cae la pieza.</p>
-<p>La perdiz que marcha de frente sea de cola es la fcil
+<p>La perdiz que marcha de frente ó sea de cola es la fácil
de matar: las que van atravesadas debe comprenderse
-la velocidad que llevan, para apuntarlas la cabeza,
+la velocidad que llevan, para apuntarlas á la cabeza,
y haciendo un insignificante movimiento con el brazo<span class="pagenum"><a name="Page_14" id="Page_14">[14]</a></span>
izquierdo (que es el timon), se las toma la delantera.
-As hay probabilidades de matarlas. Lo mismo requiere
-la perdiz que viene de arriba sea de frente, indispensablemente
+Así hay probabilidades de matarlas. Lo mismo requiere
+la perdiz que viene de arriba ó sea de frente, é indispensablemente
pasa por encima de la cabeza del cazador:
segun se presenta este lance, la regla mejor es
-volverse rpidamente y tirar cuando haya pasado; no
-obrando as y disparando cuando viene de frente, este
-tiro si se acierta es de <i>chamba</i>, pues veces se requiere
+volverse rápidamente y tirar cuando haya pasado; no
+obrando así y disparando cuando viene de frente, este
+tiro si se acierta es de <i>chamba</i>, pues á veces se requiere
tomarla un metro por delante y la misma pieza acude
- la muerte, dando un tumbo, y con la velocidad
+á la muerte, dando un tumbo, y con la velocidad
y el choque de la caida, se abre.</p>
<p>La perdiz que, sorprendida entre el cazador y el perro,
-no le queda fcil salida y empieza con aquel canto
-alarmante que aturde, llegando echar excrementos,
-y se remonta repullada, sta el cazador debe con serenidad
+no le queda fácil salida y empieza con aquel canto
+alarmante que aturde, llegando á echar excrementos,
+y se remonta repullada, á ésta el cazador debe con serenidad
seguirla apuntando, y al hacer la suspension
para extender el vuelo en la direccion que se le antoja,
entonces hay que disparar, pues es la mejor oportunidad
-de matarla. El tiro es fcil.</p>
+de matarla. El tiro es fácil.</p>
<p>Cuando el perro pone muestra, la satisfaccion es tan
-importante, que afecta la parte fsica de un modo notable.
+importante, que afecta la parte física de un modo notable.
El corazon late tan agradablemente, que no
se puede describir, y no recuerdo que tan singular
impresion me la haya evitado un segundo, dejando de
-imitar muchos que dan gritos al perro, y tocndole
-con el pi le excitan para que rompa la muestra.</p>
+imitar á muchos que dan gritos al perro, y tocándole
+con el pié le excitan para que rompa la muestra.</p>
-<p>Este lance debe resolverse siempre por s solo; y
+<p>Este lance debe resolverse siempre por sí solo; y
mientras se admira la <i>sublimidad</i> del perro, se va el
-cazador colocando de manera que pueda tirar la perdiz
-sin que le estorben los rboles. sta arranca de un
+cazador colocando de manera que pueda tirar á la perdiz
+sin que le estorben los árboles. Ésta arranca de un
modo desesperado; el cazador, por poco que lo sea,
-goza y disfruta dando <i>gusto al dedo</i> las mil maravi<span class="pagenum"><a name="Page_15" id="Page_15">[15]</a></span>llas,
+goza y disfruta dando <i>gusto al dedo</i> á las mil maravi<span class="pagenum"><a name="Page_15" id="Page_15">[15]</a></span>llas,
y debe matar la pieza. Es un caso indispensable;
el perro lo exige por la leccion que recibe, y el cazador
tiene un disgusto si la yerra: en todo el dia caza de
-mal humor, no ser que muy luego alcance victorioso
+mal humor, á no ser que muy luego alcance victorioso
desquite: de lo contrario pasa un dia <i>de perros</i>.</p>
-<p>Para tirar al vuelo las perdices se necesita calma
+<p>Para tirar al vuelo á las perdices se necesita calma
y serenidad. Los grabados franceses nos quieren demostrar
-eso pintando cazadores que cuando les sale
+eso pintando á cazadores que cuando les sale
al vuelo una pieza, abren tranquilamente la caja del
-rap, toman un polvo, y luego apuntan y matan.
-Cualquier cazador prctico comprender que sta es la
-manera grfica de demostrarle que no debe precipitarse,
+rapé, toman un polvo, y luego apuntan y matan.
+Cualquier cazador práctico comprenderá que ésta es la
+manera gráfica de demostrarle que no debe precipitarse,
pues la precipitacion es causa de que se vaya la
-caza; sin embargo, es preciso un trmino medio. En
-nuestro pas las perdices no permiten tomar rap, ni
+caza; sin embargo, es preciso un término medio. En
+nuestro país las perdices no permiten tomar rapé, ni
siquiera fumar en pipa.</p>
-<p>Sucede al ms <i>pintado</i> que yerra la mejor pieza, y
+<p>Sucede al más <i>pintado</i> que yerra la mejor pieza, y
eso depende muchas veces de estarse mirando la perdiz
sin cuidar del guia de la escopeta, que generalmente
se dispara sin apuntar. Acontece lo expuesto
cuando la perdiz sale de sorpresa y se va desprevenido
y absorto en <i>importantes</i> meditaciones.</p>
-<p>Tampoco debe olvidar el aficionado caza que el
+<p>Tampoco debe olvidar el aficionado á caza que el
apuntar bien depende mucho del brazo izquierdo, el
cual juega un principal papel en el <i>arte de tirar con
-precision al vuelo</i>. Al colocar la escopeta la espalda,
+precision al vuelo</i>. Al colocar la escopeta á la espalda,
si bien este movimiento debe ser suave, en cambio
-requirese soltura, apoyando en seguida la cara la
-culata para entreguardar bien al encaonar la caza y
-seguir la rapidez y el ms leve movimiento de la pieza,
-haciendo importante papel el brazo izquierdo que acompaa
-el encaoneo; y cuando el cazador comprende la<span class="pagenum"><a name="Page_16" id="Page_16">[16]</a></span>
+requiérese soltura, apoyando en seguida la cara á la
+culata para entreguardar bien al encañonar la caza y
+seguir la rapidez y el más leve movimiento de la pieza,
+haciendo importante papel el brazo izquierdo que acompaña
+el encañoneo; y cuando el cazador comprende la<span class="pagenum"><a name="Page_16" id="Page_16">[16]</a></span>
oportunidad, entonces el dedo cumple con su obligacion
y se palpan los buenos resultados, pues infaliblemente
-la pieza cae herida muerta. El disparador de
-la escopeta debe siempre caer voluntad del tirador;
-el inconveniente ms leve hace errar la caza, y no por
+la pieza cae herida ó muerta. El disparador de
+la escopeta debe siempre caer á voluntad del tirador;
+el inconveniente más leve hace errar la caza, y no por
ser un mal tirador sino por efectos materiales del arma,
que deben corregirse.</p>
<p>He cazado con amigos que no saben matar de otro
-modo que por medio del tiro <i> tenazon</i>, y no obstante,
+modo que por medio del tiro <i>á tenazon</i>, y no obstante,
algunas veces me han dejado asombrado por su destreza
-en despachar las piezas; pero confieso que jams me
-han satisfecho, y he tenido ocasion de manifestrselo.
-El aficionado acostumbrado esta clase de tiro, el dia
-que tiene la <i>buena</i> hace prodigios. An la perdiz no
-ha arrancado un metro del suelo, cuando ya est tendida
-en l, y si la caza les sale de cerca la destrozan:
-como no tienen espera, tiran aunque sea cuatro pasos
+en despachar las piezas; pero confieso que jamás me
+han satisfecho, y he tenido ocasion de manifestárselo.
+El aficionado acostumbrado á esta clase de tiro, el dia
+que tiene la <i>buena</i> hace prodigios. Aún la perdiz no
+ha arrancado un metro del suelo, cuando ya está tendida
+en él, y si la caza les sale de cerca la destrozan:
+como no tienen espera, tiran aunque sea á cuatro pasos
de distancia; si la pieza recoge la <i>flor del tiro</i>,
-queda en disposicion de echarla al muladar. Por lo dems,
-si tienen la <i>mala</i>, en una cacera de cinco seis
-dias no matan ni una pieza, pesar de ser los que tiran
-ms. Atendido lo cual aconsejo todo cazador que se
+queda en disposicion de echarla al muladar. Por lo demás,
+si tienen la <i>mala</i>, en una cacería de cinco ó seis
+dias no matan ni una pieza, á pesar de ser los que tiran
+más. Atendido lo cual aconsejo á todo cazador que se
corrija de este <i>vicio</i> y haga un estudio para tirar despues
-de encaonear y seguir bien la pieza: si as lo
-hace, encontrar un verdadero placer al matar en buena
+de encañonear y seguir bien la pieza: si así lo
+hace, encontrará un verdadero placer al matar en buena
regla una pieza de caza.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_17" id="Page_17">[17]</a></span></p>
@@ -573,247 +557,247 @@ regla una pieza de caza.</p><hr class="chap" />
-<h2 id="AGOSTO">1. DE AGOSTO.</h2>
+<h2 id="AGOSTO">1.º DE AGOSTO.</h2>
<p>Memorable fecha, y sin embargo para muchos
-pasa desapercibida, mientras que los cazadores agurdanla
+pasa desapercibida, mientras que los cazadores aguárdanla
con tanta impaciencia, que casi raya en locura.
Se cuentan las semanas y hasta las horas que faltan
-para llegar al dia ansiado, <i>el 1. de agosto</i>, en que la
-ley de caza autoriza los espaoles poder hacer uso
+para llegar al dia ansiado, <i>el 1.º de agosto</i>, en que la
+ley de caza autoriza á los españoles poder hacer uso
del derecho que les ha estado vedado durante cinco
-meses, prohibicion justa indispensable para que las
-perdices estn en amores y la naturaleza nos d en
-cambio la fecundidad, es saber: que de un par de
-perdices salga un bando de 18 21.</p>
+meses, prohibicion justa é indispensable para que las
+perdices estén en amores y la naturaleza nos dé en
+cambio la fecundidad, es á saber: que de un par de
+perdices salga un bando de 18 á 21.</p>
<p>El cazador deberia tener en su gabinete, entre los
objetos de caza, un cuadro adornado de precioso marco,
-destacndose en el fondo una inscripcion en letras de
-oro que le recordara perennemente el dia 1. de agosto.</p>
+destacándose en el fondo una inscripcion en letras de
+oro que le recordara perennemente el dia 1.º de agosto.</p>
<hr class="tb" />
<p>No cabe duda que ese dia le tienen fijo en la memoria
-ms de cien mil espaoles, si no todos cazadores,
- lo menos muchos que creen serlo, por el mero hecho
+más de cien mil españoles, si no todos cazadores,
+á lo menos muchos que creen serlo, por el mero hecho
de tener escopeta, perro y licencia de caza. Por mi
-parte puedo afirmar que hace veinte aos que en tal
+parte puedo afirmar que hace veinte años que en tal
fecha no he faltado al monte: pues se experimentan
muchas impresiones, queriendo uno multiplicarse para
-hacer <i>descubrimientos</i>; la imaginacion acude todas
-partes; se est cazando, pongo por caso en Moncada,
+hacer <i>descubrimientos</i>; la imaginacion acude á todas
+partes; se está cazando, pongo por caso en Moncada,
<span class="pagenum"><a name="Page_18" id="Page_18">[18]</a></span>
se ha descubierto el terreno, y uno dice para su
-coleto: mejor me habria ido la <i>Torre dels frares</i>,
-all dej bastantes pares; pero... y si me hubiese dirigido
- <i>Roca de droc</i>?... no, el tren sale demasiado
+coleto: «mejor me habria ido á la <i>Torre dels frares</i>,
+allí dejé bastantes pares; pero... ¿y si me hubiese dirigido
+á <i>Roca de droc</i>?... no, el tren sale demasiado
tarde, y cuando se llega al cazadero, ya molesta mucho
-el rubicundo Febo; adems, habrn ido los de Molins
-de Rey. Por ltimo, reflexiona que los puntos
+el rubicundo Febo; además, habrán ido los de Molins
+de Rey.» Por último, reflexiona que los puntos
mencionados debe reservarlos para otro dia, y caminando
con calma en busca de agua cristalina y alguna
-sombra, dispnese ir pasando el dia para no estropearse
-y <i>hacer pis</i>, preparndolos para las futuras salidas,
-que deben ser, seguramente, de ms provecho
+sombra, dispónese á ir pasando el dia para no estropearse
+y <i>hacer piés</i>, preparándolos para las futuras salidas,
+que deben ser, seguramente, de más provecho
que las primeras.</p>
<p>Las perdices en el mes de agosto.&mdash;La caza de la
perdiz en el mes de agosto se diferencia completamente
-de las dems pocas del ao. La ley deberia, con
-rigor, lo menos no permitir cazar hasta el 15 de dicho
+de las demás épocas del año. La ley deberia, con
+rigor, á lo menos no permitir cazar hasta el 15 de dicho
mes. Si bien es verdad que por razon del clima
-hay comarcas en que las perdices son ms crecidas,
+hay comarcas en que las perdices son más crecidas,
como por ejemplo en el litoral, en cambio en la alta
-montaa van muy atrasadas, hallndose muchas cluecas
-empollando an sus huevos: de ah resulta que algunos
+montaña van muy atrasadas, hallándose muchas cluecas
+empollando aún sus huevos: de ahí resulta que algunos
cazadores inexpertos, cuando el perro les queda
de muestra y al salir la perdiz, que apenas se remonta
un palmo del suelo, le encajan el tiro, y pueden
-irse ufanos su casa con el trofeo de una clueca sin
-plumas en la panza, indirectamente dejando desamparadas
- veinte ms perdices que iban salir del
+irse ufanos á su casa con el trofeo de una clueca sin
+plumas en la panza, é indirectamente dejando desamparadas
+á veinte ó más perdices que iban á salir del
huevo, lo cual causa un perjuicio irreparable y reprensible.</p>
-<p>Basta ya de digresion, y volvamos al modo cmo
+<p>Basta ya de digresion, y volvamos al modo cómo
deben cazarse las perdices en agosto.</p>
<p><span class="pagenum"><a name="Page_19" id="Page_19">[19]</a></span>
-Mucha ventaja llevar el cazador y se ahorrar no
+Mucha ventaja llevará el cazador y se ahorrará no
pocas subidas y bajadas, si muy temprano, antes de
la salida del sol, se coloca en un cerro. El canto del
-<i>perdigon</i> bravo anuncia los <i>perdigachos</i> que se han
-recodado y pasado <i>joc</i> la noche; mueven la cabeza y
+<i>perdigon</i> bravo anuncia á los <i>perdigachos</i> que se han
+recodado y pasado á <i>joc</i> la noche; mueven la cabeza y
guiados por la perdiz van subiendo al cerro, haciendo
<i>piu</i>, <i>piu</i>, <i>piu</i>. Cuando aperciba el cazador ese
-canto, debe huir del cerro y no volver l hasta
-que pasen lo menos quince dias, pues las perdices
-que mataria apenas tendrian el tamao de las codornices:
+canto, debe huir del cerro y no volver á él hasta
+que pasen á lo menos quince dias, pues las perdices
+que mataria apenas tendrian el tamaño de las codornices:
todo cazador decente debe ir en busca de
-otro lance, y slo le es permitido hacerlas volar para
-saber si el bando est completo; ensayo muy peligroso,
-por lo que voy expresar. Cuando sale el
-bando quin se detiene? es bastante difcil, y esto
-produce consecuencias fatales.&mdash;Los <i>padres</i>, permtaseme
+otro lance, y sólo le es permitido hacerlas volar para
+saber si el bando está completo; ensayo muy peligroso,
+por lo que voy á expresar. Cuando sale el
+bando ¿quién se detiene? es bastante difícil, y esto
+produce consecuencias fatales.&mdash;Los <i>padres</i>, permítaseme
la expresion, en defensa de sus <i>hijuelos</i> van <i>peonando</i>
y guiando el bando adelante por la inseguridad
que tienen en el vuelo de los <i>pollitos</i>; el <i>perdigon</i> con
-un movimiento rpido divide el bando, y la perdiz
-con la otra mitad aproximadamente y retaguardia,
+un movimiento rápido divide el bando, y la perdiz
+con la otra mitad aproximadamente y á retaguardia,
haciendo <i>chac</i>, <i>chac</i>, <i>chac</i>, hasta que el perro se les
viene encima; entonces vuelan, y la pobre perdiz que
-en defensa de sus hijos qued retaguardia, paga con
-la vida su amor filial. Cometida tal hazaa por el cazador,
-muy fcil le es acabar con el bando, pues los
-jvenes con su <i>piu</i>, <i>piu</i>, se descubren muy fcilmente
-y se dejan matar mansalva, y las pocas que quedan
-echan de menos la madre, de suerte que cuando
+en defensa de sus hijos quedó á retaguardia, paga con
+la vida su amor filial. Cometida tal hazaña por el cazador,
+muy fácil le es acabar con el bando, pues los
+jóvenes con su <i>piu</i>, <i>piu</i>, se descubren muy fácilmente
+y se dejan matar á mansalva, y las pocas que quedan
+echan de menos á la madre, de suerte que cuando
viene la noche (estas siempre son frias) mueren por
faltarles el calor natural que les da el regazo materno.</p>
<p>Este es uno de los inconvenientes que tiene el cazar
<span class="pagenum"><a name="Page_20" id="Page_20">[20]</a></span>
-la perdiz en la poca citada. Discutiendo algunas
-veces sobre si es mejor no que el bando lleve el macho,
-slo me han sostenido lo contrario los aficionados
-al <i>reclamo</i>, pero jams me han dado una razon slida,
+la perdiz en la época citada. Discutiendo algunas
+veces sobre si es mejor ó no que el bando lleve el macho,
+sólo me han sostenido lo contrario los aficionados
+al <i>reclamo</i>, pero jamás me han dado una razon sólida,
mientras les he podido objetar el auxiliar que es del
-bando el <i>perdigon</i>. ste, en la poca del celo y en la
+bando el <i>perdigon</i>. Éste, en la época del celo y en la
de la cria, se defiende admirablemente del gavilan,
garzas, gaig, mochuelo, y hasta de los perros, saliendo
casi siempre victorioso cuando menos de las
-aves citadas, y en las dems pocas del ao se deja
-agarrar sin oponer la menor resistencia. Lo que puede
+aves citadas, y en las demás épocas del año se deja
+agarrar sin oponer la menor resistencia. ¡Lo que puede
el amor paternal!</p>
-<p>Volviendo ahora entrar en materia dir, que para
-cazar en el mes de agosto se requiere una tctica generalmente
-diferente de las dems pocas del ao. En
+<p>Volviendo ahora á entrar en materia diré, que para
+cazar en el mes de agosto se requiere una táctica generalmente
+diferente de las demás épocas del año. En
primer lugar, debe madrugarse mucho, ir ligero de
ropa, llevando siempre una camisa de repuesto en el
-zurron. Las perdices se hallan en los cerros la salida
-del sol, pero al cuarto de hora ya descienden las querencias,
-mtense en los rastrojos y comen los granos
+zurron. Las perdices se hallan en los cerros á la salida
+del sol, pero al cuarto de hora ya descienden á las querencias,
+métense en los rastrojos y comen los granos
de trigo que despues de la siega han quedado desparramados
-por el suelo: si por casualidad an estn en
+por el suelo: si por casualidad aún están en
el campo las gavillas, de seguro que las perdices se
-hallan cerca. Si se notan por el camino las seales que
+hallan cerca. Si se notan por el camino las señales que
las aves retozando han dejado en el suelo, el cazador
-puede hacerse cargo por ellas si el bando est punto
+puede hacerse cargo por ellas si el bando está á punto
de darle una leccion: se ha de fijar en si hay excrementos,
y si son tiernos, no debe moverse de aquella
querencia, porque en el alto (segun la hora), en el
-centro bajos estarn las perdices. El perro principia
- dar seales y sale el bando, generalmente todas
+centro ó bajos estarán las perdices. El perro principia
+á dar señales y sale el bando, generalmente todas á
la vez: entonces el cazador debe observar, primero si
<span class="pagenum"><a name="Page_21" id="Page_21">[21]</a></span>
-estn buenas para <i>apeonar</i>, luego contarlas aproximadamente,
-y adems, y esto es lo ms esencial, comprender
- dnde se dirigen. Una vez echado el clculo
-obsrvese bien el terreno (si es desconocido) para poderlas
-salir de modo que vayan all donde las destina
+están buenas para <i>apeonar</i>, luego contarlas aproximadamente,
+y además, y esto es lo más esencial, comprender
+á dónde se dirigen. Una vez echado el cálculo
+obsérvese bien el terreno (si es desconocido) para poderlas
+salir de modo que vayan allá donde las destina
aproximadamente el cazador. El vuelo que han dado,
de seguro es corto, pero hay que tener presente que
-el poder que les falta en las alas, en cambio splenlo
-<i>peonando</i>, dndose el caso que muchas y muchas veces
+el poder que les falta en las alas, en cambio súplenlo
+<i>peonando</i>, dándose el caso que muchas y muchas veces
se pierda el <i>bando</i> entero, que no se hallan en
-ninguna parte an vindolas la parada, y se pierden
-miserablemente las horas ms frescas de la maana
+ninguna parte aún viéndolas la parada, y se pierden
+miserablemente las horas más frescas de la mañana
sin dar con ellas, resultando que en algunas ocasiones
-de <i>peon</i> han vuelto poco ms menos de all donde
+de <i>peon</i> han vuelto poco más ó menos de allí donde
habian salido la primera vez. Generalmente eso sucede
-cuando uno se empea en querer saber ms que el
-perro: ste, por ejemplo, coge vientos, quiere inclinarse
- los bajos, y uno le llama arriba vice-versa;
-y, cuntas y cuntas veces por no haber querido creer
-al perro, se ha ido una pieza que se la habria tirado
+cuando uno se empeña en querer saber más que el
+perro: éste, por ejemplo, coge vientos, quiere inclinarse
+á los bajos, y uno le llama arriba ó vice-versa;
+y, cuántas y cuántas veces por no haber querido creer
+al perro, se ha ido una pieza que se la habria tirado á
<i>tout plaisir</i>, y uno se queda contemplando con un palmo
-de narices y diciendo para s: qu mal has hecho
-en no seguir la tendencia del perro!</p>
+de narices y diciendo para sí: «¡qué mal has hecho
+en no seguir la tendencia del perro!»</p>
-<p>Si el cazador halla el bando en esta poca, debe estar
-convencido de que tirar, por lo cual es preciso ir con
-mucha calma y sin precipitacion, observando el ms
+<p>Si el cazador halla el bando en esta época, debe estar
+convencido de que tirará, por lo cual es preciso ir con
+mucha calma y sin precipitacion, observando el más
leve movimiento del perro. Cuando se dispara y cae
-la pieza, estarse quieto, que se va disparar el otro
-caon, y efectivamente as sucede: las perdices ya no
-se levantan todas; al segundo vuelo obsrvese bien
-que si la vez primera fueron quince, ahora slo han
-salido ocho nueve. Dnde estn las otras? Cargue
+la pieza, estarse quieto, que se va á disparar el otro
+cañon, y efectivamente así sucede: las perdices ya no
+se levantan todas; al segundo vuelo obsérvese bien
+que si la vez primera fueron quince, ahora sólo han
+salido ocho ó nueve. ¿Dónde están las otras? Cargue
<span class="pagenum"><a name="Page_22" id="Page_22">[22]</a></span>
el cazador y tenga paciencia, llame al perro; quieto y
-cartuchos otra vez, faltan seis siete perdices; calma,
-que son de usted, seor cazador. Siga apuntando bien
-que matar; ha llegado su <i>cuarto de hora</i>, y ver V.
-como veinte treinta metros una de otra y dos la
-vez y en un pequeo crculo, dispara algunos tiros bien
-provechosos.&mdash;Cuando est persuadido el cazador de
-que en dicho terreno, ya por las que ha muerto bien
-por las que ha errado, no queda ninguna, dirjase sin
-prdida de momento hcia donde se ha ido el resto del
-<i>bando</i>. Cmo late el corazon en el trayecto que media
+cartuchos otra vez, faltan seis ó siete perdices; calma,
+que son de usted, señor cazador. Siga apuntando bien
+que matará; ha llegado su <i>cuarto de hora</i>, y verá V.
+como á veinte ó treinta metros una de otra y dos á la
+vez y en un pequeño círculo, dispara algunos tiros bien
+provechosos.&mdash;Cuando esté persuadido el cazador de
+que en dicho terreno, ya por las que ha muerto ó bien
+por las que ha errado, no queda ninguna, diríjase sin
+pérdida de momento hácia donde se ha ido el resto del
+<i>bando</i>. ¡Cómo late el corazon en el trayecto que media
del punto donde han salido las perdices al que se
-las ha visto parar! Usted echa sus clculos: he muerto
-cuatro; vamos, esta maana llegar seis, porque...
-ahora sabiendo dnde estn bien matar un par. Y
-as entretenido el cazador, sale de la hondonada otra
-<i>bandada</i> de perdices: fijndose en ellas, como es natural,
-para ver dnde se dirigen, una vez en autos
-debe hacer caso omiso de ellas ir siempre las mismas
+las ha visto parar! Usted echa sus cálculos: «he muerto
+cuatro; vamos, esta mañana llegaré á seis, porque...
+ahora sabiendo dónde están bien mataré un par.» Y
+así entretenido el cazador, sale de la hondonada otra
+<i>bandada</i> de perdices: fijándose en ellas, como es natural,
+para ver á dónde se dirigen, una vez en autos
+debe hacer caso omiso de ellas é ir siempre á las mismas
del primer <i>bando</i>. Nunca ha de ilusionarse el cazador
-por la abundancia: stas ya las encontrar otro
-dia. Valen ms las menos, que se han de dejar <i>pisar</i>
+por la abundancia: éstas ya las encontrará otro
+dia. Valen más las menos, que se han de dejar <i>pisar</i>
la tercera vez que se tienen en juego. Que haya tiento
-y se coloquen bien los pis; domnese bien el terreno,
-no precipitarse, que cuando arranque la pieza se cansar
-V. de apuntar, y al disparo mdase el terreno,
-que an no hay diez metros de distancia al sitio en
-que cay.</p>
-
-<p>El matar perdices en esta poca, sobre todo al arranque
-del tercer vuelo, es ms fcil que tirar las codornices,
+y se coloquen bien los piés; domínese bien el terreno,
+no precipitarse, que cuando arranque la pieza se cansará
+V. de apuntar, y al disparo mídase el terreno,
+que aún no hay diez metros de distancia al sitio en
+que cayó.</p>
+
+<p>El matar perdices en esta época, sobre todo al arranque
+del tercer vuelo, es más fácil que tirar á las codornices,
por ser mayor la pieza y salir generalmente de
cola y con poca velocidad: siga, pues, el cazador el
<span class="pagenum"><a name="Page_23" id="Page_23">[23]</a></span>
-terreno con cuidado, y tire todas; pero si observa
+terreno con cuidado, y tire á todas; pero si observa
que el perro saca un palmo la lengua afuera gracias al
-calor, entonces conviene tocar retirada, buscar plcida
+calor, entonces conviene tocar retirada, buscar plácida
sombra, descansar media horita, fumar un cigarrillo
de papel y volver en seguida al mismo sitio, describir
-un semicrculo, cruzarlo por derecha izquierda,
-y se ver como el perro vuelve coger vientos. Con el
+un semicírculo, cruzarlo por derecha é izquierda,
+y se verá como el perro vuelve á coger vientos. Con el
tiempo trascurrrido las perdices se han llamado unas
- otras con sus cantos, han salido de su escondrijo, y
-el perro las seala las mil maravillas, recrendose el
+á otras con sus cantos, han salido de su escondrijo, y
+el perro las señala á las mil maravillas, recreándose el
cazador tirando un par de tiros. Se mira el reloj: son,
por ejemplo, las diez; el sol achicharra, apenas se
-mueve una hoja, y si se est cerca de la posada hacienda,
-lo mejor es irse casa descansar: el perro se
-rehace y al dia siguiente el cazador se encuentra ms
-entero y dispuesto volver la lid mejor que el dia
+mueve una hoja, y si se está cerca de la posada ó hacienda,
+lo mejor es irse á casa á descansar: el perro se
+rehace y al dia siguiente el cazador se encuentra más
+entero y dispuesto á volver á la lid mejor que el dia
anterior. El cazar requiere calma, pero en el mes de
agosto calma y astucia, saber serpentear los terrenos,
buscar los frescales, que es donde las perdices tienen
-querencia. Jams se busque la parte que da el sol y
-s en las umbras, y en los viedos frondosos, y en los
+querencia. Jamás se busque á la parte que da el sol y
+sí en las umbrías, y en los viñedos frondosos, y en los
torrentes.</p>
<p>Todo lo que no sea seguir este consejo es perder el
-tiempo, atropellar el perro y fatigarse intilmente, y
+tiempo, atropellar el perro y fatigarse inútilmente, y
lo que se ha tomado como recreo, sirve de molestia y
puede acarrear una enfermedad.</p>
-<p>La caza de la perdiz en esta poca del ao diferencase
-completamente de la de los dems meses. El <i>bando</i>
-de perdices est siempre la rden de las <i>viejas</i>, y
-stas comprenden hasta dnde llega el poder de sus
+<p>La caza de la perdiz en esta época del año diferencíase
+completamente de la de los demás meses. El <i>bando</i>
+de perdices está siempre á la órden de las <i>viejas</i>, y
+éstas comprenden hasta dónde llega el poder de sus
<i>hijuelos</i> para el vuelo, y pocas veces intentan cruzar
-el sendero y van quedndose la misma ladera mano
+el sendero y van quedándose á la misma ladera ó mano
<span class="pagenum"><a name="Page_24" id="Page_24">[24]</a></span>
que se ha escogido para cazar; el vuelo es tan corto
-que apenas alargan 300 metros, pero en cambio
+que apenas alargan á 300 metros, pero en cambio
<i>peonando</i> al tocar el suelo cambian de direccion tan
-fcilmente, que al llegar al sitio donde se han visto
+fácilmente, que al llegar al sitio donde se han visto
echar, no se halla ninguna, y de <i>peon</i> han pasado la
sierra y de otro vuelo se han quedado en una querencia
en direccion contraria, sucediendo que uno pierde
@@ -821,9 +805,9 @@ el tiempo tan <i>miserablemente</i> en conjeturas, que la
<i>rabieta</i> va haciendo su efecto y el aburrimiento se apodera
del cazador y hasta del perro. Esta es la parte <i>infeliz</i>
del cazador que ha trocado el bienestar de su casa
-para ir sudar el <i>kilo</i> sin poder disparar la escopeta,
+para ir á sudar el <i>kilo</i> sin poder disparar la escopeta,
abandonando algunas veces quehaceres de importancia;
-pero tal es la <i>ley del cazador</i>, y para llegar
+pero tal es la <i>ley del cazador</i>, y para llegar á
matar algo en buena regla se necesita: aficion, aficion,
aficion.</p><hr class="chap" />
@@ -835,131 +819,131 @@ aficion.</p><hr class="chap" />
<p>Buena fecha, pero no la mejor. Si bien entran las
-perdices en la edad de la <i>pubertad</i> y dan <i>ms juego</i>,
-an no estn del todo emancipadas de quien les di el
-sr, an no han pasado la muda, no obstante de ser
-todas <i>pintadas</i>, conservando tan slo dos tres plumas
-en el arranque de las alas, plumas que en Catalua
+perdices en la edad de la <i>pubertad</i> y dan <i>más juego</i>,
+aún no están del todo emancipadas de quien les dió el
+sér, aún no han pasado la muda, no obstante de ser
+todas <i>pintadas</i>, conservando tan sólo dos ó tres plumas
+en el arranque de las alas, plumas que en Cataluña
llamamos <i>mussolas</i>.</p>
-<p>En esa poca del ao la perdiz satisface ms los goces
-del cazador y el perro las seala mejor, tal vez
-porque el terreno generalmente es ms fresco, por cuyo
-motivo nota ms los rastros, quedando muy menudo
+<p>En esa época del año la perdiz satisface más los goces
+del cazador y el perro las señala mejor, tal vez
+porque el terreno generalmente es más fresco, por cuyo
+motivo nota más los rastros, quedando muy á menudo
de muestra. Ya las perdices han abandonado
aquel canto tan empalagoso <i>piu</i>, <i>piu</i>, <i>piu</i>, y principian
- <i>hombrear</i> imitando las viejas, pero sin poder
-dar an sus <i>timbres</i>. Su carne ya no siente hormigas
-y langostas; al contrario, en la poca del ao que
+á <i>hombrear</i> imitando á las viejas, pero sin poder
+dar aún sus <i>timbres</i>. Su carne ya no siente á hormigas
+y á langostas; al contrario, en la época del año que
nos ocupa es cuando constituyen el mejor bocado, pudiendo
-recomendarse toda persona falta de apetito.</p>
+recomendarse á toda persona falta de apetito.</p>
-<p>Para cazar las perdices en setiembre, si hay viedos
-en el terreno que se escoge, bsquelas siempre el cazador
-en dichos sitios, pues tienen grande aficion la
-uva. Jams dejan aquel pasto, y como el sol an molesta
+<p>Para cazar las perdices en setiembre, si hay viñedos
+en el terreno que se escoge, búsquelas siempre el cazador
+en dichos sitios, pues tienen grande aficion á la
+uva. Jamás dejan aquel pasto, y como el sol aún molesta
con sus rayos, sucede que se mantienen quietas
-en los pmpanos. Si se encuentran por primera vez en
-las vias de diez doce del dia, esperan mucho, pero<span class="pagenum"><a name="Page_26" id="Page_26">[26]</a></span>
-ya salidas de all no vuelven aquel mismo dia, hasta que
-las reclaman las viejas, yndose otras querencias.</p>
+en los pámpanos. Si se encuentran por primera vez en
+las viñas de diez á doce del dia, esperan mucho, pero<span class="pagenum"><a name="Page_26" id="Page_26">[26]</a></span>
+ya salidas de allí no vuelven aquel mismo dia, hasta que
+las reclaman las viejas, yéndose á otras querencias.</p>
-<p>En esa poca ya intenta la perdiz pasar al vuelo una
-hondonada, quedndose la parte opuesta del cazador,
+<p>En esa época ya intenta la perdiz pasar al vuelo una
+hondonada, quedándose á la parte opuesta del cazador,
y cuando se ve que trasponen el cerro, hay que fijarse
-bien en la inclinacin que escogen, pues la buena
-vista ahorra muchos pasos intiles, dando el resultado
+bien en la inclinación que escogen, pues la buena
+vista ahorra muchos pasos inútiles, dando el resultado
de abreviar el tiempo, que en estas circunstancias es
oro. Que ande ligero el cazador, pero sin precipitarse,
-pues el pulso y los latidos del corazon jams han de
-ser ms fuertes de lo natural, fin de que al llegar el
+pues el pulso y los latidos del corazon jamás han de
+ser más fuertes de lo natural, á fin de que al llegar el
ansiado momento se aprovechen los tiros y pueda hacerse
doblete y hasta carambola. El lance de la carambola
-es el que halaga ms al cazador, y motivo hay
+es el que halaga más al cazador, y motivo hay
para ello. Muchos confunden con la carambola el matar
-una pieza con cada caon; la carambola es lo que
+una pieza con cada cañon; la carambola es lo que
saben y hacen con frecuencia algunos buenos tiradores,
-es decir, arrancar al vuelo dos perdices la vez,
-yendo una por ejemplo hcia la derecha y la otra hcia
+es decir, arrancar al vuelo dos perdices á la vez,
+yendo una por ejemplo hácia la derecha y la otra hácia
la izquierda. En este caso el cazador consumado ya
comprende la velocidad y alcance de entrambas, apunta
- la que le parece ms cercana y sin precipitarse dispara;
-se vuelve, apunta la otra, pero listo, y dispara
-haciendo dar las dos la voltereta, lo menos as
-lo cree. Entonces debe dirigir el perro la aliquebrada
- que le parece que lo est, para que la <i>cobre</i>, y si
+á la que le parece más cercana y sin precipitarse dispara;
+se vuelve, apunta á la otra, pero listo, y dispara
+haciendo dar á las dos la voltereta, ó á lo menos así
+lo cree. Entonces debe dirigir el perro á la aliquebrada
+ó que le parece que lo está, para que la <i>cobre</i>, y si
lo acierta, seguro que se cuelga las dos perdices al
-zurron. Esta <i>suerte</i> es la que requiere ms serenidad y
+zurron. Esta <i>suerte</i> es la que requiere más serenidad y
calma, pues algunos con el goce que produce la carambola
-alborotan el perro llamndole derecha izquierda,
+alborotan el perro llamándole á derecha é izquierda,
en cuyo caso hay bastantes probabilidades de
-perder alguna de las piezas; y aun he visto cazado<span class="pagenum"><a name="Page_27" id="Page_27">[27]</a></span>res
+perder alguna de las piezas; y aun he visto á cazado<span class="pagenum"><a name="Page_27" id="Page_27">[27]</a></span>res
perder las dos por ser aliquebradas y el perro de
pocos sentidos.</p>
-<p>La carambola que acabo de explanar es la de ms
-mrito, y se hacen pocas, sobre todo en diciembre y
-enero. En setiembre es ms fcil, pues no es tan rpido
-el vuelo. Efectanse otras carambolas, si bien no
-de mrito superior. Cuando el <i>bando</i> marcha describiendo
-un semicrculo, y se les disparan de cola, los dos
-caones, matndose dos piezas, esto tambien se llama
+<p>La carambola que acabo de explanar es la de más
+mérito, y se hacen pocas, sobre todo en diciembre y
+enero. En setiembre es más fácil, pues no es tan rápido
+el vuelo. Efectúanse otras carambolas, si bien no
+de mérito superior. Cuando el <i>bando</i> marcha describiendo
+un semicírculo, y se les disparan de cola, los dos
+cañones, matándose dos piezas, esto tambien se llama
carambola; el cazador queda satisfecho y basta, porque
de todos modos son episodios que complacen.</p>
-<p>Hay que perdonarme mis contnuas digresiones, pues
-son hijas del entusiasmo que en m produce el recuerdo
+<p>Hay que perdonarme mis contínuas digresiones, pues
+son hijas del entusiasmo que en mí produce el recuerdo
de lances inolvidables.</p>
-<p>Volvamos, pues, esas perdices que con su vuelo
-han traspuesto el cerro y que el cazador hbil ha adivinado
-el sitio escogido para su descanso. Le gustaria
- V. que el puesto elegido fuese un pequeo torrente
-con hermosa campia en ambos lados y abundancia de
-piedras mano? Seguro de una contestacion afirmativa,
-all coloco mi cazador, quien antes de llegar ya
+<p>Volvamos, pues, á esas perdices que con su vuelo
+han traspuesto el cerro y que el cazador hábil ha adivinado
+el sitio escogido para su descanso. ¿Le gustaria
+á V. que el puesto elegido fuese un pequeño torrente
+con hermosa campiña en ambos lados y abundancia de
+piedras á mano? Seguro de una contestacion afirmativa,
+allí coloco á mi cazador, quien antes de llegar ya
ve marcharse una perdiz. Mejor fuera que se hubiese
esperado, pero no debe hacerse caso, pues dicha perdiz
-iba de <i>peon</i>; hay otras. Fjese el cazador en la que ha
-tenido la poca vergenza de marcharse sin decir <i>adios</i>
-y por lo tanto sin podrsela hacer los honores de ordenanza.
-Se ve parar alguna distancia en el mismo
-torrente, donde hay un rbol como seal. All debe V.
-encaminarse, pero... el perro se queda de muestra la
-ladera de torrente; magnfico. Vuela una perdiz de la
-parte opuesta; si es larga no la tire V.; observe y ver
-que poco ms menos va donde ha ido la primera, y<span class="pagenum"><a name="Page_28" id="Page_28">[28]</a></span>
-con el ruido que mueve al marchar salen tres cuatro
-del mismo lado donde est V.; estas son las que olfateaba
+iba de <i>peon</i>; hay otras. Fíjese el cazador en la que ha
+tenido la poca vergüenza de marcharse sin decir <i>adios</i>
+y por lo tanto sin podérsela hacer los honores de ordenanza.
+Se ve parar á alguna distancia en el mismo
+torrente, donde hay un árbol como señal. Allí debe V.
+encaminarse, pero... el perro se queda de muestra á la
+ladera de torrente; magnífico. Vuela una perdiz de la
+parte opuesta; si es larga no la tire V.; observe y verá
+que poco más ó menos va donde ha ido la primera, y<span class="pagenum"><a name="Page_28" id="Page_28">[28]</a></span>
+con el ruido que mueve al marchar salen tres ó cuatro
+del mismo lado donde está V.; estas son las que olfateaba
el perro. Ahora es ocasion de disparar la escopeta y
-de matar dejar de matar; pero est V. en regla y debe
+de matar ó dejar de matar; pero está V. en regla y debe
seguir, pues faltan otras. Eche V. alguna piedrecita,
-porque con el tiro las compaeras han quedado aturdidas,
+porque con el tiro las compañeras han quedado aturdidas,
esperando ocasion propicia para largarse; y como
el perro trabaja entusiasmado por los bajos del torrente,
las perdices salen de las matas, tan bajas que casi
el perro las alcanza con el hocico, y en ese estado arrancan
-con un miedo cerval. <i>Piac</i>, <i>piac</i>, <i>piac</i>, yese
-momentneamente. Estas perdices dan tiempo al cazador
+con un miedo cerval. <i>Piñac</i>, <i>piñac</i>, <i>piñac</i>, óyese
+momentáneamente. Estas perdices dan tiempo al cazador
para todo; para prepararse, apuntar bien y dar
-<i>gusto al dedo</i>. Cuando se est convencido de que todas
-han salido, hay que dirigirse sin prdida de momento
-hcia las que se han visto marchar al asomarse al torrente,
-y de seguro se tirar bien estas. Obrando as y
+<i>gusto al dedo</i>. Cuando se esté convencido de que todas
+han salido, hay que dirigirse sin pérdida de momento
+hácia las que se han visto marchar al asomarse al torrente,
+y de seguro se tirará bien á estas. Obrando así y
con tino es como se consigue buena provision de piezas.
Cuando un <i>bando</i> ha tenido la <i>desgracia</i> de elegir
como guarida un torrente, no desperdicie la ocasion
-el cazador afortunado que por all transite, pues se divierte
+el cazador afortunado que por allí transite, pues se divierte
envidiablemente un par de horas.</p>
<p>Todo cazador verdadero que se encuentra con un
-<i>bando</i> de perdices y con su buen cazar las conduzca
+<i>bando</i> de perdices y con su buen cazar las conduzca á
sitios que tienen <i>mataderos</i>, no debe abandonarlas para
ir en busca de otras, pues las que nuevamente halle le
-harn luchar y perder un tiempo siempre precioso,
-adems que no todos los bandos obedecen al plan preconcebido
+harán luchar y perder un tiempo siempre precioso,
+además que no todos los bandos obedecen al plan preconcebido
por el cazador. Nunca hay que olvidarse de
-las que todava no han volado, pues siempre la <i>perezosa</i>
+las que todavía no han volado, pues siempre la <i>perezosa</i>
es el mejor tiro.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_29" id="Page_29">[29]</a></span></p>
@@ -970,33 +954,33 @@ es el mejor tiro.</p><hr class="chap" />
<h2><a name="OCTUBRE_Y_NOVIEMBRE" id="OCTUBRE_Y_NOVIEMBRE">OCTUBRE Y NOVIEMBRE.</a></h2>
-<p>La mejor poca del ao para gozar cazando y matando
+<p>La mejor época del año para gozar cazando y matando
perdices, es octubre y noviembre. El calor ya
no molesta, y el perro caza todo el dia perfectamente.
Si en ese tiempo el perro no rastrea bien y no encuentra
-las aliquebradas, hay que deshacerse de l, pues
-es dar pan quien no lo merece.</p>
+las aliquebradas, hay que deshacerse de él, pues
+es dar pan á quien no lo merece.</p>
-<p>En dichos meses el cazador se siente ms gil y las
+<p>En dichos meses el cazador se siente más ágil y las
cuestas no son tan <i>amargas</i>, pudiendo hacer bien
-ocho horas de jornada. La salida de casa debe ser las
-8 y retirarse las 5 de la tarde. Es muy importante
-encontrar la perdiz que ya haya comido, y esto se
-logra entrando de lleno en el cazadero las ocho de
-la maana. Se caza esa hora para evitar las humedades
-que generalmente deja el roco, y porque mientras
-no estn secas las matas el perro siente muy poco.</p>
-
-<p>Para cazar las perdices en esa poca del ao se requieren
-ms conocimientos, y el cazador consumado
-saca mucho partido de las que encuentra, dndose
+ocho horas de jornada. La salida de casa debe ser á las
+8 y retirarse á las 5 de la tarde. Es muy importante
+encontrar á la perdiz que ya haya comido, y esto se
+logra entrando de lleno en el cazadero á las ocho de
+la mañana. Se caza á esa hora para evitar las humedades
+que generalmente deja el rocío, y porque mientras
+no estén secas las matas el perro siente muy poco.</p>
+
+<p>Para cazar las perdices en esa época del año se requieren
+más conocimientos, y el cazador consumado
+saca mucho partido de las que encuentra, dándose
juego todo el dia, pues ya las perdices que han perdido
-el carcter de pollas, se fraccionan y van por su
+el carácter de pollas, se fraccionan y van por su
cuenta y riesgo. De suerte que el cazador debe, despues
de elegido el terreno, formarse un plan y calcular
bien las horas del dia que con su conocimiento y
destreza puede colocar las perdices en terrenos bien
-escogidos de antemano para tirarles su gusto y para
+escogidos de antemano para tirarles á su gusto y para
que las salidas sean mortales.</p><p><span class="pagenum"><a name="Page_30" id="Page_30">[30]</a></span></p>
<p>Ante todo ha de recorrer las mesetas de los cerros,
@@ -1004,82 +988,82 @@ buscar minuciosamente los comederos y esquivar un
poco en las laderas; lo cual ahorra muchos pasos, bajadas
y subidas, ahorro que no es de despreciar.</p>
-<p>Supongamos que vayan saliendo perdices medida
+<p>Supongamos que vayan saliendo perdices á medida
que se ejecute ese paseo; hay que despreciarlas y no
impacientarse. Si tuviese el cazador el mal gusto de
-correr tras ellas, echaria perder la jornada. Siga,
-pues, su tarea, que ya irn volando otras, como efectivamente
+correr tras ellas, echaria á perder la jornada. Siga,
+pues, su tarea, que ya irán volando otras, como efectivamente
sucede, y una vez recorridos los cerros que
-el cazador se habia propuesto, siendo poco ms menos
-las diez de la maana sin que se haya disparado
+el cazador se habia propuesto, siendo poco más ó menos
+las diez de la mañana sin que se haya disparado
un tiro, entonces llama al perro, toma un bocadito,
fuma un cigarrillo, y mientras, se hace cargo del terreno,
-tranquilamente y sin olvidar el ms pequeo
-detalle. Luego se vuelve emprender la marcha, desandando
+tranquilamente y sin olvidar el más pequeño
+detalle. Luego se vuelve á emprender la marcha, desandando
el camino andado, tomando los senderos del
-promedio del cerro; de esta suerte va indemnizndose
+promedio del cerro; de esta suerte va indemnizándose
el cazador del rato que ha estado sin tirar, pues las
-perdices, escamadas de sus querencias, principian
+perdices, escamadas de sus querencias, principian á
resistir la muestra del perro, saliendo una tras otra,
-y con tino y buena puntera, el perro va trayendo las
-que se matan. A ste le da el cazador la tripa de la
+y con tino y buena puntería, el perro va trayendo las
+que se matan. A éste le da el cazador la tripa de la
perdiz, empero si caen muchas bajo el plomo de la
escopeta no es prudente regalar al perro con todas las
tripas, pues les producen indigestiones: de consiguiente
-se le distrae dndole un poquito de pan y pasndole
-la mano cariosamente por el lomo. El perro
+se le distrae dándole un poquito de pan y pasándole
+la mano cariñosamente por el lomo. El perro
necesita ser bien acariciado, porque todo lo comprende
-y cumple de este modo mejor, y est la obediencia
-de la ms leve indicacin del cazador.</p>
+y cumple de este modo mejor, y está á la obediencia
+de la más leve indicación del cazador.</p>
<p>Seguiremos, pues, tranquilamente el camino indi<span class="pagenum"><a name="Page_31" id="Page_31">[31]</a></span>cado,
llamando al perro si se adelanta: no conviene
que vaya arrancando perdices si el cazador no puede
tirar. Si se conoce el terreno, casi todas han de oir
-silbar los perdigones. Al encontrarse el cazador ese
-punto de la cacera, no le aconsejo el descanso, pero
-s que no le abandone la calma: el descanso no conviene,
+silbar los perdigones. Al encontrarse el cazador á ese
+punto de la cacería, no le aconsejo el descanso, pero
+sí que no le abandone la calma: el descanso no conviene,
pues las perdices van saliendo de su asombro, y
algunas de peon, otras de un vuelo, huyen de la ladera
-en que se ha propuesto cazarlas, perdindose intilmente
-el tiempo empleado si se dejan cuando estn
-cansadas; del segundo tercer vuelo apenas queda ninguna:
+en que se ha propuesto cazarlas, perdiéndose inútilmente
+el tiempo empleado si se dejan cuando están
+cansadas; del segundo ó tercer vuelo apenas queda ninguna:
de modo que la persecucion requiere actividad.
-Recrranse todas las matas, y donde no se pueda bajar,
+Recórranse todas las matas, y donde no se pueda bajar,
se arroja alguna piedra. Cuando se cree limpia materialmente
-la ladera, vyase en busca de las que se han
+la ladera, váyase en busca de las que se han
visto retroceder, con la seguridad de encontrarlas y
-tirar todos los tiros muestra del perro.</p>
+tirar todos los tiros á muestra del perro.</p>
-<p>Si se observa que las perdices van de pecho tomar
+<p>Si se observa que las perdices van de pecho á tomar
los cerros, y son por ejemplo las cuatro de la tarde, no
-hay que molestarse en perseguirlas, pues poco dao se
-las har. Por tanto, dejarse de nuevas fatigas, y pausadamente
-abandnanse los bajos, se traspone la parte
-opuesta de la senda que se ha seguido por la maana,
-recogindose para descansar y comer, que en ese caso
-bien necesitado est de reposo el cazador.</p>
+hay que molestarse en perseguirlas, pues poco daño se
+las hará. Por tanto, dejarse de nuevas fatigas, y pausadamente
+abandónanse los bajos, se traspone la parte
+opuesta de la senda que se ha seguido por la mañana,
+recogiéndose para descansar y comer, que en ese caso
+bien necesitado está de reposo el cazador.</p>
<p>De esta manera cazan las perdices los que se precian
de cazar con arte, esto es, tomando siempre los altos.
-Cuando uno le da por ser caprichoso y contra todas
-las reglas de la caza se empea en principiar la cacera
+Cuando á uno le da por ser caprichoso y contra todas
+las reglas de la caza se empeña en principiar la cacería
por los bajos y hondonadas, aunque halle las perdices,
-stas se van de un vuelo las cimas, y entonces poco
-dao se las hace. Slo se puede tomar el cazadero por<span class="pagenum"><a name="Page_32" id="Page_32">[32]</a></span>
+éstas se van de un vuelo á las cimas, y entonces poco
+daño se las hace. Sólo se puede tomar el cazadero por<span class="pagenum"><a name="Page_32" id="Page_32">[32]</a></span>
la mano baja cuando sopla con fuerza el viento, pues
-las perdices estn redoso; mas en este caso lo mejor
-es no salir caza, pues el perro tampoco apercibe nada
+las perdices están á redoso; mas en este caso lo mejor
+es no salir á caza, pues el perro tampoco apercibe nada
y se pierde miserablemente el tiempo.</p>
<p>En el mes de octubre prepara el cazador la diversion
para el resto de la temporada. En agosto descubre las
-crias, pero en octubre conoce ya fijamente dnde escogen
-sus querencias y tambien dnde las ha de dar la
+crias, pero en octubre conoce ya fijamente dónde escogen
+sus querencias y tambien dónde las ha de dar la
muerte. De manera que cuando hace el halagador descubrimiento
-de que en tal cual comarca hay perdices,
-debe ir all estudiar sus vuelos, y si los acierta, de
-fijo tiene asegurada una buena campaa de invierno.</p><hr class="chap" />
+de que en tal ó cual comarca hay perdices,
+debe ir allí á estudiar sus vuelos, y si los acierta, de
+fijo tiene asegurada una buena campaña de invierno.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_33" id="Page_33">[33]</a></span></p>
@@ -1089,26 +1073,26 @@ fijo tiene asegurada una buena campaa de invierno.</p><hr class="chap" />
<h2 id="DICIEMBRE_Y_ENERO">DICIEMBRE Y ENERO.</h2>
-<p>poca poco agradable para dejar la cama; dias cortos,
+<p>Época poco agradable para dejar la cama; dias cortos,
frios, lluviosos y fuertes heladas. Apenas la perdiz
nota el menor ruido, ya vuela; en ninguna parte
-est bien. En este periodo del ao come bellotas y las
-carnes se le vuelven acorazadas. La plvora debe ser
-de primera y el perdigon granadito, nmero cinco.
+está bien. En este periodo del año come bellotas y las
+carnes se le vuelven acorazadas. La pólvora debe ser
+de primera y el perdigon granadito, número cinco.
Se caza como se ha descrito anteriormente, con la sola
-diferencia de que los vuelos de las perdices son ms largos
-y las horas de provecho de doce dos de la tarde.
-Fuera de estas apenas podr el cazador disparar un
+diferencia de que los vuelos de las perdices son más largos
+y las horas de provecho de doce á dos de la tarde.
+Fuera de estas apenas podrá el cazador disparar un
tiro. Si ha helado y se mantiene la escarcha, las
perdices se encuentran en los raseros y metidas en las
-hondonadas barrancos, al abrigo del cierzo. No obstante
-estos inconvenientes, es la poca del ao en que
-queda ms satisfecho el cazador cuando mata una
-perdiz, puesto que estn en toda su pujanza y fuerza
+hondonadas ó barrancos, al abrigo del cierzo. No obstante
+estos inconvenientes, es la época del año en que
+queda más satisfecho el cazador cuando mata una
+perdiz, puesto que están en toda su pujanza y fuerza
de vuelo: al momento de dar su tan acelerado brinco
apenas dan tiempo de seguirlas ni un segundo; al
instante se hallan fuera del alcance del tiro. Generalmente
-en estos meses la carambola est vedada para
+en estos meses la carambola está vedada para
el cazador. El que cuelga al morral media docena de
perdices, matadas en buena ley, se le puede con justicia
darle el dictado de buen cazador y tirador.</p><hr class="chap" />
@@ -1122,74 +1106,74 @@ darle el dictado de buen cazador y tirador.</p><hr class="chap" />
<p>En este mes el cazador no debe desperdiciar un solo
-dia. Cuntas reflexiones acuden la mente, y por
-cierto algunas muy tristes! Con los aos entra el clculo;
-y quin sabe? Aunque todava no peinemos canas,
-tal vez el ao prximo habremos dejado de pertenecer
-al mundo de los vivos. Si ser mi destino que
-por ltima vez recorra el monte en que me encuentro?
-Mas, al diablo las ideas ttricas; todo en este mundo
-tiene su lado malo. Ocupmonos, pues, de las agradables
+dia. ¡Cuántas reflexiones acuden á la mente, y por
+cierto algunas muy tristes! Con los años entra el cálculo;
+y ¿quién sabe? Aunque todavía no peinemos canas,
+tal vez el año próximo habremos dejado de pertenecer
+al mundo de los vivos. ¿Si será mi destino que
+por última vez recorra el monte en que me encuentro?
+Mas, al diablo las ideas tétricas; todo en este mundo
+tiene su lado malo. Ocupémonos, pues, de las agradables
impresiones que se experimentan cazando los
<i>pares</i>.</p>
<p>La naturaleza, que anuncia la proximidad de la primavera
y que en todo es fecunda, hace que las perdices
-entren en amoros y cada par se vaya ya fijando
-en sitios propsito para el logro tranquilo de su objeto.
-El cazador hbil y que conoce lo que es el mundo,
+entren en amoríos y cada par se vaya ya fijando
+en sitios á propósito para el logro tranquilo de su objeto.
+El cazador hábil y que conoce lo que es el mundo,
al internarse en un valle observando minuciosamente
-el pas que se propone recorrer, debe echarse la cuenta
-del sitio que l escogeria si tuviese que requerir de
-amores alguna aldeanita, esto es, reservado y al abrigo
+el país que se propone recorrer, debe echarse la cuenta
+del sitio que él escogeria si tuviese que requerir de
+amores á alguna aldeanita, esto es, reservado y al abrigo
de todo airecillo, libre de visitas importunas. Aunque
-parezca extrao, en esos sitios que tu imaginacion
-poetiza debes ir sorprender las enamoradas perdices
-y darles cruel muerte, bien un susto maysculo. Esta
-es la ley del mundo, no respetar ni aun las cosas ms
+parezca extraño, en esos sitios que tu imaginacion
+poetiza debes ir á sorprender á las enamoradas perdices
+y darles cruel muerte, ó bien un susto mayúsculo. Esta
+es la ley del mundo, no respetar ni aun las cosas más
sagradas.</p><p><span class="pagenum"><a name="Page_35" id="Page_35">[35]</a></span></p>
-<p>En esa poca es muy fcil matar las perdices, porque
+<p>En esa época es muy fácil matar las perdices, porque
resisten firmemente la muestra del perro. La hembra
vuela primero, y caso de que el cazador la tire, no se
-mueva, pues an falta el macho, el cual queda en el
-terreno muy <i>preocupado</i> buscando su dulcinea: en
-este caso arranca poco menos que de los pis; le apunta
+mueva, pues aún falta el macho, el cual queda en el
+terreno muy <i>preocupado</i> buscando á su dulcinea: en
+este caso arranca poco menos que de los piés; le apunta
el cazador y casi casi puede decir que el negocio es seguro.
Por esta circunstancia es preciso, cuando sale la
perdiz, recorrer bien el terreno en un corto ruedo, y de
-fijo se mata el macho. Si las dos salen un tiempo, se
+fijo se mata el macho. Si las dos salen á un tiempo, se
observa que la hembra va con la cabeza erguida y el
macho la lleva baja, erizando las plumas y dejando
-colgar un poco las alas. Si se fija bien el cazador, jams
-se equivocar tocante este punto tan importante.
+colgar un poco las alas. Si se fija bien el cazador, jamás
+se equivocará tocante á este punto tan importante.
Es preferible matar los machos, que abundan.</p>
-<p>Y cuntas veces se matan los dos! En tal caso, qu
-alegra impresion ms agradable! El cazador se cree
-un sr privilegiado; mira derecha izquierda, todo
+<p>¡Y cuántas veces se matan los dos! En tal caso, ¡qué
+alegría é impresion más agradable! El cazador se cree
+un sér privilegiado; mira á derecha é izquierda, todo
ufano, pensando para sus adentros que nadie le aventaja
-en eso de tirar bien. Vana ilusion! lo que hace
+en eso de tirar bien. ¡Vana ilusion! lo que hace
uno lo hacen cien mil, pero no todos lo aprecian del
mismo modo.</p>
-<p>Los pares no hacen los vuelos tan largos, y fijndose
-bien el cazador en la direccion que toman poca
-distancia del cerro que trasponen, all se hallarn. En
-la poca que nos ocupa dejan mucho rastro, as es que
-el perro guia perfectamente hcia el sitio de su querencia.
-Algunas veces, de m s decir, sobre todo, que
-en el ltimo tercio del mes de febrero he perdonado
-la hembra. Y por qu? se me preguntar. Porque me
+<p>Los pares no hacen los vuelos tan largos, y fijándose
+bien el cazador en la direccion que toman á poca
+distancia del cerro que trasponen, allí se hallarán. En
+la época que nos ocupa dejan mucho rastro, así es que
+el perro guia perfectamente hácia el sitio de su querencia.
+Algunas veces, de mí sé decir, sobre todo, que
+en el último tercio del mes de febrero he perdonado á
+la hembra. ¿Y por qué? se me preguntará. Porque me
acude la idea de que en el terreno en que estoy dando
-la ltima mano, tal vez faltaria el bando en agosto, y<span class="pagenum"><a name="Page_36" id="Page_36">[36]</a></span>
+la última mano, tal vez faltaria el bando en agosto, y<span class="pagenum"><a name="Page_36" id="Page_36">[36]</a></span>
hay sitios tan privilegiados que es muy sensible no
queden en ellos perdices.</p>
<p>Todo cazador debe dar por religiosamente terminada
-la campaa de la temporada, el ltimo dia de febrero.
-Y supuesto que hemos llegado l en nuestra descripcion
-cinegtica, pasemos ahora exponer las reglas
+la campaña de la temporada, el último dia de febrero.
+Y supuesto que hemos llegado á él en nuestra descripcion
+cinegética, pasemos ahora á exponer las reglas
generales y consejos que la experiencia nos ha sugerido.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_37" id="Page_37">[37]</a></span></p>
@@ -1198,74 +1182,74 @@ generales y consejos que la experiencia nos ha sugerido.</p><hr class="chap" />
<h2 id="VENTAJAS">VENTAJAS Y DESVENTAJAS DE CAZAR SOLO
- ACOMPAADO.</h2>
+Ó ACOMPAÑADO.</h2>
-<p>Hasta el presente el lector-cazador habr observado
+<p>Hasta el presente el lector-cazador habrá observado
(y digo lector-cazador porque al que no sea aficionado
- la caza poco le agradezco que fije la vista en mis
-apuntes), que nicamente me he ocupado del modo de
+á la caza poco le agradezco que fije la vista en mis
+apuntes), que únicamente me he ocupado del modo de
cazar cuando se va solo al monte en busca de perdices.</p>
<p>Cazar solo, tiene el inconveniente de que uno se
-vuelve <i>salvaje</i> insociable, pues esto de enmudecer
-todo el santo dia es muy poco halageo. Sin embargo,
-el cazador se aburre, y no ms, cuando trascurren
-horas enteras sin ver una pieza; si salen stas
-al paso, la cosa vara de aspecto.</p>
-
-<p>Fcil es suplir la soledad llevando un criado, quien
-adems de cargar con el peso, prepara el <i>gaudeamus</i>:
-con todo, no basta semejante compaa, ya que la conversacion
-jams puede elevarse grande altura.</p>
-
-<p>El mejor modo de cazar es con un compaero simptico,
-no formando los dos ms que una sola voluntad;
-y aunque al llegar las posadas no se hace la misma
+vuelve <i>salvaje</i> é insociable, pues esto de enmudecer
+todo el santo dia es muy poco halagüeño. Sin embargo,
+el cazador se aburre, y no más, cuando trascurren
+horas enteras sin ver una pieza; si salen éstas
+al paso, la cosa varía de aspecto.</p>
+
+<p>Fácil es suplir la soledad llevando un criado, quien
+además de cargar con el peso, prepara el <i>gaudeamus</i>:
+con todo, no basta semejante compañía, ya que la conversacion
+jamás puede elevarse á grande altura.</p>
+
+<p>El mejor modo de cazar es con un compañero simpático,
+no formando los dos más que una sola voluntad;
+y aunque al llegar á las posadas no se hace la misma
bromita que cuando van juntos varios, en cambio,
cazando bien pueden sacarse grandes ventajas de la
expedicion si son dos los tiradores. Ya en el terreno,
el uno aguarda al otro, y se tiene ocasion de admirar
-y aplaudir un buen tiro; adems, se puede seguir con
+y aplaudir un buen tiro; además, se puede seguir con
tiento al perro que le rastrea un peon; se consulta el
-rden de caza, y dos votos condescendientes no tardan
+órden de caza, y dos votos condescendientes no tardan
en estar conformes, cediendo un poco cada uno en sus
-pretensiones. Sucede lo mismo siendo cinco seis
+pretensiones. ¿Sucede lo mismo siendo cinco ó seis
<span class="pagenum"><a name="Page_38" id="Page_38">[38]</a></span>
cazadores en el monte, aunque sea gran maestro y
-conocedor del terreno el que guie la cacera? No, pues
-es muy difcil la <i>ciega</i> obediencia la voz del <i>jefe</i>;
+conocedor del terreno el que guie la cacería? No, pues
+es muy difícil la <i>ciega</i> obediencia á la voz del <i>jefe</i>; á
lo mejor uno se queda rezagado, al otro se le ha dejado
al tiempo de pasar un arroyo, otro no quiere
cambiar de lado sin consideracion al que todo el dia le
-ha tocado un mal sendero. Esto y mucho ms sucede
-cuando se caza con varios compaeros. Y los perros?
-He aqu otro inconveniente. Al primer tiro, caiga no
+ha tocado un mal sendero. Esto y mucho más sucede
+cuando se caza con varios compañeros. ¿Y los perros?
+He aquí otro inconveniente. Al primer tiro, caiga ó no
caiga la pieza, dan tal embestida que baten el terreno
- doscientos metros de distancia, y los cazadores, ya
-sea con el silbato bien grandes voces, llamndolos
+á doscientos metros de distancia, y los cazadores, ya
+sea con el silbato ó bien á grandes voces, ó llamándolos
por su nombre les reprenden; de suerte que, tan bien
preparado queda el terreno, que ya puede estarse tranquilo
-el cazador, liar un cigarrillo y fumrselo, despues
+el cazador, liar un cigarrillo y fumárselo, despues
de lo cual puede tambien pasarse la escopeta al
-hombro y seguir andando; de seguro que no tendr
-que hacer uso de ella. Ms extenso seria sobre este particular,
+hombro y seguir andando; de seguro que no tendrá
+que hacer uso de ella. Más extenso seria sobre este particular,
pero suponiendo que lo que acabo de manifestar
-est al alcance de cualquier cazador experimentado,
-mis reflexiones slo van dirigidas los importunos
-que quieren siempre salir cazar formando guerrillas
-y rden de parada.</p>
-
-<p>El seor baron de Crtes trata del mismo asunto en
-sus <i>Recuerdos de caza</i>, y si yo fuese describir los inconvenientes
-que ofrece el cazar cinco seis <i>mano
-gallega</i>, convertirame en plagiario de dicho seor,
-adems de que no sabria expresarlo con tanta lucidez.</p>
-
-<p>Aadir, para concluir, que todo el que tenga un
-buen perro no lo lleve ninguna cacera en que los
-compaeros pasen de tres, pues de seguro que el can
-adquirir resabios difciles de remediar.</p><hr class="chap" />
+está al alcance de cualquier cazador experimentado,
+mis reflexiones sólo van dirigidas á los importunos
+que quieren siempre salir á cazar formando guerrillas
+y órden de parada.</p>
+
+<p>El señor baron de Córtes trata del mismo asunto en
+sus <i>Recuerdos de caza</i>, y si yo fuese á describir los inconvenientes
+que ofrece el cazar cinco ó seis á <i>mano
+gallega</i>, convertiríame en plagiario de dicho señor,
+además de que no sabria expresarlo con tanta lucidez.</p>
+
+<p>Añadiré, para concluir, que todo el que tenga un
+buen perro no lo lleve á ninguna cacería en que los
+compañeros pasen de tres, pues de seguro que el can
+adquirirá resabios difíciles de remediar.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_39" id="Page_39">[39]</a></span></p>
@@ -1276,318 +1260,318 @@ adquirir resabios difciles de remediar.</p><hr class="chap" />
<p>Todos los cazadores muestran preferencia y predileccion
-por aquellos cazaderos donde ms <i>vctimas</i> han
-hecho. La caza de la perdiz en Catalua, generalmente,
-hcese por terrenos penosos y montes bastante elevados.
-En este caso se encuentran las montaas de los
+por aquellos cazaderos donde más <i>víctimas</i> han
+hecho. La caza de la perdiz en Cataluña, generalmente,
+hácese por terrenos penosos y montes bastante elevados.
+En este caso se encuentran las montañas de los
alrededores de Barcelona, y como tanto se ha ido poblando
-y la aficion la caza va en aumento, sucede
-que los <i>domingueros</i> les queda muy poco recurso
-para cazar, resultando que muchos regresan su casa
+y la aficion á la caza va en aumento, sucede
+que á los <i>domingueros</i> les queda muy poco recurso
+para cazar, resultando que muchos regresan á su casa
sin haber podido disparar la escopeta. Esta falta de caza
-motiva que gran nmero de aficionados se metan en
-el ferro-carril, largndose en busca de mejor fortuna,
-y slo se detienen, ya sea entre Martorell y Gelida,
+motiva que gran número de aficionados se metan en
+el ferro-carril, largándose en busca de mejor fortuna,
+y sólo se detienen, ya sea entre Martorell y Gelida, ó
bien bajan en Molins de Rey y llegan hasta Vallirana,
en cuyos puntos hay excelentes cazaderos, pero muy
quebrados; y como la caza se va extinguiendo, ya por
la grande aficion que se ha despertado, ya por la poca
vigilancia en dejar cazar en tiempo de veda y con ardides,
-esto hace que las caceras den muy pobres resultados,
-y que el que regresa su casa con un par de
+esto hace que las cacerías den muy pobres resultados,
+y que el que regresa á su casa con un par de
perdices se da por muy dichoso, pues ahora en los
terrenos indicados no siempre se mata.</p>
<p>Otros escogen la salida por la parte de Moncada,
-alargndose algunos hasta Montmel, cazando por
+alargándose algunos hasta Montmeló, cazando por
Sant Fost, Martoreyas y Rexachs, terrenos malos, si
bien en ellos siempre hay perdices, y en el bosque y<span class="pagenum"><a name="Page_40" id="Page_40">[40]</a></span>
-malezas puede tirarse alguna becada, las cuales huyen
+malezas puede tirarse á alguna becada, las cuales huyen
de las <i>vernedas</i> cuando hay fuertes heladas. El
que tiene la voluntad de cazar en los mencionados terrenos
-va mojado todo el dia, pues all la neblina es
+va mojado todo el dia, pues allí la neblina es
muy pertinaz. Si afortunadamente se logra hacer bajar
-las perdices hcia el Bess, pesar de que hay mucha
+las perdices hácia el Besós, á pesar de que hay mucha
maleza, puede dispararse con provecho alguna vez la
-escopeta muestra de perro. Esos terrenos son muy
-penosos, ya por la topografa del pas, as como por las
+escopeta á muestra de perro. Esos terrenos son muy
+penosos, ya por la topografía del país, así como por las
humedades, por cuyo motivo la experiencia aconseja
-no ir con frecuencia dicho sitio.</p>
+no ir con frecuencia á dicho sitio.</p>
-<p>Otro cazadero hay, tal vez el ms predilecto por parte
-de las perdices para hacer sus crias; refirome al monte
+<p>Otro cazadero hay, tal vez el más predilecto por parte
+de las perdices para hacer sus crias; refiérome al monte
de Moncada, en cuyo cerro descuellan las ruinas del
-ex-telgrafo y cuerpo de guardias. El cazador barcelons
+ex-telégrafo y cuerpo de guardias. El cazador barcelonés
que no haya cazado en ese cerro, cuente que le
-falta algo por ver, pues adems de la perspectiva que
-desde l se descubre, hay ricos manantiales de agua,
-inclusa la clebre <i>Font del ferro</i>, que da frente al Bess,
+falta algo por ver, pues además de la perspectiva que
+desde él se descubre, hay ricos manantiales de agua,
+inclusa la célebre <i>Font del ferro</i>, que da frente al Besós,
y por la parte opuesta la no menos renombrada
<i>Font de mitja Costa</i> (hoy dia bastante abandonada), en
cuyo sitio los cazadores han echado muchas <i>chuletadas</i>.
Tales son las ventajas que ofrece el cazar en ese
monte, porque si la caza no va bien, en cambio se indemniza
con el almuerzo y el bello panorama que disfruta
-la vista, olvidndose del cansancio que produce la
-llegada hasta el <i>telgrafo</i>, por cuyo punto es indispensable
-tomar la mano del cazadero, y de seguro que
-la maanita siempre se encontrarn perdices, las
+la vista, olvidándose del cansancio que produce la
+llegada hasta el <i>telégrafo</i>, por cuyo punto es indispensable
+tomar la mano del cazadero, y de seguro que á
+la mañanita siempre se encontrarán perdices, las
cuales dan juego al cazador todo el dia: hay sorpresas
buenas y por la mano baja se caza bien.</p>
-<p>Hoy dia tales salidas figuran en la categora de las
+<p>Hoy dia tales salidas figuran en la categoría de las
<span class="pagenum"><a name="Page_41" id="Page_41">[41]</a></span>
llamadas de recurso, ya que los ferro-carriles han
acortado prodigiosamente las distancias, de suerte que
los que pueden disponer de algun tiempo lo emplean
en ir en busca de cazaderos lejanos, ya sea al confin
-de la provincia otra lindante con la nuestra.</p>
+de la provincia ó á otra lindante con la nuestra.</p>
-<p>En las estaciones de Calaf, San Guim, Trrega, no
-pasa tren sin que bajen de l algunos cazadores procedentes
+<p>En las estaciones de Calaf, San Guim, Tárrega, no
+pasa tren sin que bajen de él algunos cazadores procedentes
de Barcelona. Los que se apean en Calaf se dirigen
- los cazaderos distantes tres cuatro leguas, dndoles
+á los cazaderos distantes tres ó cuatro leguas, dándoles
tales batidas en los primeros meses, que luego
quedan pocas y <i>escamadas</i>, por cuyo motivo se caza bien
-en Calonje, Prats de Rey, Coletas, Tor, Biosca, etc.</p>
+en Calonje, Prats de Rey, Coletas, Torá, Biosca, etc.</p>
-<p>Los que bajan en San Guim... oh! esa ya es harina
-de otro costal. De este punto y de su campia hablar
-apasionadamente, bien lo s; pues se me figura que
-voy hacer el elogio de un hijo de mis entraas. Con
+<p>Los que bajan en San Guim... ¡oh! esa ya es harina
+de otro costal. De este punto y de su campiña hablaré
+apasionadamente, bien lo sé; pues se me figura que
+voy á hacer el elogio de un hijo de mis entrañas. Con
la benevolencia del lector-cazador, que espero me
-conceda, me tomar la libertad de ser algo extenso en
-este prrafo. Es terreno aquel que conozco palmo
-palmo. Desde San Guim Calaf, de la Rabasa Cervera,
-y por otro lado de Pujal y Santa F y de Rubian
- Talavera, cuadriltero de diez leguas, hay un sinnmero
+conceda, me tomaré la libertad de ser algo extenso en
+este párrafo. Es terreno aquel que conozco palmo á
+palmo. Desde San Guim á Calaf, de la Rabasa á Cervera,
+y por otro lado de Pujal y Santa Fé y de Rubiñan
+á Talavera, cuadrilátero de diez leguas, hay un sinnúmero
de cazaderos tan bellos y agradables, que
nada mejor puede exigir el cazador. La primera vez
-que caz en dicho sitio era bisoo en el arte, yendo
-agregado la <i>cuadrilla</i> de los <i>cazadores de Gracia</i>,
-todos honrados menestrales. Agustin Cus siempre era
-el que llevaba la batuta en la cacera y merecia el
+que cazé en dicho sitio era bisoño en el arte, yendo
+agregado á la <i>cuadrilla</i> de los <i>cazadores de Gracia</i>,
+todos honrados menestrales. Agustin Cusí siempre era
+el que llevaba la batuta en la cacería y merecia el
puesto de director, pues sabia cazar, y matar mejor,
-hallndose adems dotado de un conocimiento especial
-para decir: <i>all estn las perdices</i>. Este buen amigo,
-sea por simpata por lo que fuere (lo cual le agra<span class="pagenum"><a name="Page_42" id="Page_42">[42]</a></span>dezco
-en el alma), dime muy buenas lecciones, lstima
+hallándose además dotado de un conocimiento especial
+para decir: <i>allí están las perdices</i>. Este buen amigo,
+sea por simpatía ó por lo que fuere (lo cual le agra<span class="pagenum"><a name="Page_42" id="Page_42">[42]</a></span>dezco
+en el alma), dióme muy buenas lecciones, lástima
que no las aprovechara. Como por falta de salud
-tiempo hace que Cus no puede salir la caza, han
-trascurrido algunos aos desde que campo por mis
+tiempo hace que Cusí no puede salir á la caza, han
+trascurrido algunos años desde que campo por mis
respetos, pero de mi pecho no se ha borrado el agradecimiento
y el grato recuerdo de mi excelente maestro.</p>
<p>El cazador que en San Guim pueda disponer de una
semana <i>redonda</i> cuenta con grandes recursos, ya que
cada dia le es dado cazar en terrenos nuevos y de buenas
-querencias; y advertiremos los de Madrid, por
+querencias; y advertiremos á los de Madrid, por
si alguna vez quieren visitarnos, que aunque no podemos
-ofrecerles el <i>Pardo</i> ni <i>Viuelas</i>, tenemos en
+ofrecerles el <i>Pardo</i> ni <i>Viñuelas</i>, tenemos en
cambio <i>La Panadella</i>, <i>El Bosch d'en Carbasa</i> y otros
-sitios. Aunque sea riesgo de disgustar algun amigo,
+sitios. Aunque sea á riesgo de disgustar á algun amigo,
no puedo con aquello de <i>tente lengua</i>... dejar de
-mencionar como le es fcil uno gozar una semana
+mencionar como le es fácil á uno gozar una semana
enterita en San Guim, cazando cada dia en terrenos
diferentes.</p>
<p>El tren llega al medio dia, y por consiguiente, aunque
-se est afanoso de escopetear las perdices, por
+se esté afanoso de escopetear las perdices, por
necesidad (bien que por poco tiempo) hay que limitarse
- cazar en los alrededores de la estacion, donde
-nunca faltan un par de bandos que, tomndolas bien
-en mano, condcelas el cazador las cercanas de
-Freixanet bien San Dom, y aprovechando los tiros
-an se lleva uno seales de caza la posada. He
-aqu poco ms menos lo que puede hacerse en la tarde
-del primer dia. Recomiendo los cazadores para
-alojarse, el <i>hostal</i> situado tiro de pistola de la estacion,
- bien, no estando demasiado fatigados y con
-humor de andar un cuarto de hora, se acomodarn
-bien y como en familia en casa Riera, de Amors,<span class="pagenum"><a name="Page_43" id="Page_43">[43]</a></span>
-grupo de tres casas. All vamos parar con mi amigo
-Suol (Paco), y es tanto el cario que profesamos los
-de la casa y stos nos corresponden tan bien, que
+á cazar en los alrededores de la estacion, donde
+nunca faltan un par de bandos que, tomándolas bien
+en mano, condúcelas el cazador á las cercanías de
+Freixanet ó bien á San Domí, y aprovechando los tiros
+aún se lleva uno señales de caza á la posada. He
+aquí poco más ó menos lo que puede hacerse en la tarde
+del primer dia. Recomiendo á los cazadores para
+alojarse, el <i>hostal</i> situado á tiro de pistola de la estacion,
+ó bien, no estando demasiado fatigados y con
+humor de andar un cuarto de hora, se acomodarán
+bien y como en familia en casa Riera, de Amorós,<span class="pagenum"><a name="Page_43" id="Page_43">[43]</a></span>
+grupo de tres casas. Allí vamos á parar con mi amigo
+Suñol (Paco), y es tanto el cariño que profesamos á los
+de la casa y éstos nos corresponden tan bien, que
solemos sacrificar el siguiente dia de nuestro arribo,
-no acudiendo hasta el venidero los cazaderos que
+no acudiendo hasta el venidero á los cazaderos que
<i>in mente</i> hemos destinado como teatro de nuestras
<i>proezas</i>.</p>
<p>Al otro dia ya uno puede tomar por el monte dejando
- su espalda el pueblo de Freixanet y dando la cara
- Cervera. A simple vista el cazador quedar sorprendido
+á su espalda el pueblo de Freixanet y dando la cara
+á Cervera. A simple vista el cazador quedará sorprendido
del hermoso terreno que pisa, querencioso para la
-caza. A ambos lados, montaas de tres horas de extension,
-en medio de frtil valle cubierto de campos de
-trigo, viedos y alguna que otra hortaliza. Si bien en
+caza. A ambos lados, montañas de tres horas de extension,
+en medio de fértil valle cubierto de campos de
+trigo, viñedos y alguna que otra hortaliza. Si bien en
este terreno las perdices se van largas, se las conduce
- las ltimas estribaciones del monte, sea en los bajos,
-y como siempre ah es donde se las hace dao,
-aconsejamos al cazador que al trmino de esta jornada,
-agradabilsima por los lances que sucesivamente se
+á las últimas estribaciones del monte, ó sea en los bajos,
+y como siempre ahí es donde se las hace daño,
+aconsejamos al cazador que al término de esta jornada,
+agradabilísima por los lances que sucesivamente se
presentan, descanse y pida asilo en Montpalau, pueblecito
-situado en una eminencia. All moran los Vilaplana,
+situado en una eminencia. Allí moran los Vilaplana,
sencillos labradores que se desviven por dar
-buena pitanza y mejor cama todos los cazadores que
+buena pitanza y mejor cama á todos los cazadores que
se presentan. Si durante esta jornada, como es muy
-probable, slo se ha logrado recorrer una parte del
+probable, sólo se ha logrado recorrer una parte del
cazadero, conviene emplear el dia siguiente para batir
-el resto. Al salir del pueblo se irn siguiendo los
-montes que quedan la izquierda, y corrindose siempre
-hcia Cervera, se van llevando las perdices adelante;
-al tercer vuelo intentan stas retroceder para
-volver sus querencias, y entonces es cuando se las
-castiga. Semejante cacera concluye siempre medio<span class="pagenum"><a name="Page_44" id="Page_44">[44]</a></span>
-dia, enfrente del pueblo de Santa F; y la sazon ha
+el resto. Al salir del pueblo se irán siguiendo los
+montes que quedan á la izquierda, y corriéndose siempre
+hácia Cervera, se van llevando las perdices adelante;
+al tercer vuelo intentan éstas retroceder para
+volver á sus querencias, y entonces es cuando se las
+castiga. Semejante cacería concluye siempre á medio<span class="pagenum"><a name="Page_44" id="Page_44">[44]</a></span>
+dia, enfrente del pueblo de Santa Fé; y á la sazon ha
de calcular el cazador si le conviene retroceder por los
-bajos hasta el punto de partida, atravesar la hondonada
+bajos hasta el punto de partida, ó atravesar la hondonada
y cazar de regreso en la solana que hay entre
-Santa F, Vergs y Altadill. Para esta parte de la cacera
-casi ms vale emplear otra jornada, pero si los
-cazadores son dos tres y saben cazar, aunque hay
+Santa Fé, Vergós y Altadill. Para esta parte de la cacería
+casi más vale emplear otra jornada, pero si los
+cazadores son dos ó tres y saben cazar, aunque hay
pocas perdices se las conduce bien y se las escopetea
mucho. El monte presenta infinitas sesgaduras y hay
bastantes matas, por cuyo motivo la caza resiste bien
-la muestra del perro. El trmino de esta jornada es
+la muestra del perro. El término de esta jornada es
Altadill, pueblecito de cuatro casas paralelo al norte
-de Montpalau y que slo dista un cuarto de hora de l.</p>
+de Montpalau y que sólo dista un cuarto de hora de él.</p>
<p>El siguiente dia se toman providencias para cambiar
-de cazadero; y ste debe ser el de <i>La Aygua escampada</i>,
+de cazadero; y éste debe ser el de <i>La Aygua escampada</i>,
distante una legua escasa del pueblo de
-Montpalau, y como por lo regular el trmino de la
-cacera es <i>Tim</i>, la experiencia aconseja que el cazador
-se encamine al <i>Mas d' en Jaumet</i>, situado la
+Montpalau, y como por lo regular el término de la
+cacería es <i>Timó</i>, la experiencia aconseja que el cazador
+se encamine al <i>Mas d' en Jaumet</i>, situado á la
derecha de la carretera y dos horas lejos de Cervera
-y quince minutos de <i>Tim</i>. La cacera ha de principiar
-por la maana, en las estribaciones del pueblo de
+y quince minutos de <i>Timó</i>. La cacería ha de principiar
+por la mañana, en las estribaciones del pueblo de
la Rabasa, y desde este punto ya el cazador sabe lo
-que debe hacer todo el dia. Descbrese la izquierda
-otro pueblo, el de Montbri, y en los cerros de la derecha
-pasa el tren de Zaragoza, donde est emplazada
-la via. A lo lejos se divisa <i>Tim</i>, rodeado de montecillos
+que debe hacer todo el dia. Descúbrese á la izquierda
+otro pueblo, el de Montbrió, y en los cerros de la derecha
+pasa el tren de Zaragoza, donde está emplazada
+la via. A lo lejos se divisa <i>Timó</i>, rodeado de montecillos
cubiertos de matas de tomillo, y si las perdices
-vnse por aquel lado, se las zurra de lo lindo, pues
+vánse por aquel lado, se las zurra de lo lindo, pues
esperan mucho. Los terrenos que acabo de describir
llevan el nombre de <i>Aygua escampada</i>. Los montes
tienen bastante base, pero escasos desaguaderos, por<span class="pagenum"><a name="Page_45" id="Page_45">[45]</a></span>
cuyo motivo las lluvias se han abierto cauces, y sin
ser quebrado el terreno se hace penoso para el cazador
- causa de las muchas subidas y bajadas; mas, si se
+á causa de las muchas subidas y bajadas; mas, si se
logra meter las perdices en estos sitios, arrancan todas
arrepulladas y se las tira bien. En los terrenos que
acabo de citar, aunque no he hablado de la liebre, por
no ser este mi objeto, las hay abundantes y se tiran
-bien, no pasndose dia que no se vean cuatro cinco,
+bien, no pasándose dia que no se vean cuatro ó cinco,
lo cual presta nuevo aliciente al cazador que se mete
por tales andurriales.</p>
-<p>Penetremos ya en el clebre <i>Mas d'en Jaumet</i> y vamos
- ver cmo nos trata la Antonia, quien han dejado
-sola, pues su hija (Antonieta) enlazse con un rico
+<p>Penetremos ya en el célebre <i>Mas d'en Jaumet</i> y vamos
+á ver cómo nos trata la Antonia, á quien han dejado
+sola, pues su hija (Antonieta) enlazóse con un rico
propietario dels Hostalets, pueblo que dista media hora
-del <i>Mas</i>. La casa est que ni pintada para los cazadores:
+del <i>Mas</i>. La casa está que ni pintada para los cazadores:
espaciosa sala, buenas alcobas y camas blandas, mesa
muy regular, pues hasta saben presentar un buen puchero,
alimento muy conveniente al cazador para reponerse
de las fatigas del dia. De esta casa, cuya <i>fama
-vol algun dia por el mundo de los cazadores</i> (estilo
-cajetillesco), van desapareciendo sus antiguos dueos,
- medida que va ausentndose la caza de sus contornos.
+voló algun dia por el mundo de los cazadores</i> (estilo
+cajetillesco), van desapareciendo sus antiguos dueños,
+á medida que va ausentándose la caza de sus contornos.
Muchos cazadores han dejado de frecuentarla por lo
-tristes que all se hallan, y slo impenitentes, tales
-como mis amigos y excelentes cazadores Suol (Paco),
+tristes que allí se hallan, y sólo impenitentes, tales
+como mis amigos y excelentes cazadores Suñol (Paco),
el <i>rebelde</i> Vilaseca y un <i>servidor de ustedes</i>, acudimos
-all con frecuencia, pues conocemos bien las querencias
+allí con frecuencia, pues conocemos bien las querencias
de la caza y el sitio en que podremos matar las piezas,
-con la certeza de asegurar hasta el nmero de
+con la certeza de asegurar hasta el número de
disparos que debemos efectuar segun el punto adonde
conduzcamos las perdices.</p>
-<p>Mas, al pensar el cazador que quince aos atrs siem<span class="pagenum"><a name="Page_46" id="Page_46">[46]</a></span>pre
+<p>Mas, al pensar el cazador que quince años atrás siem<span class="pagenum"><a name="Page_46" id="Page_46">[46]</a></span>pre
se llevaba en movimiento una cincuentena de perdices,
-mientras que ahora en llegando noviembre
-cuando se encuentra un bando de seis siete es un
-acontecimiento, apenas tiene calma para escuchar
-los idiotas pastores y rabadanes que dicen: Este ao
-lo menos hemos cogido en el trmino de Montbri unos
-<i>cuatrocientos huevos</i> y ms de veinte <i>hembras en sus
-nidos, con el lazo</i> (histrico). Y no se crea que se necesita
-mucho tiempo para recorrer el trmino citado,
-pues basta media hora escasa. Slo cito Montbri
+mientras que ahora en llegando á noviembre
+cuando se encuentra un bando de seis ó siete es un
+acontecimiento, apenas tiene calma para escuchar á
+los idiotas pastores y rabadanes que dicen: Este año á
+lo menos hemos cogido en el término de Montbrió unos
+<i>cuatrocientos huevos</i> y más de veinte <i>hembras en sus
+nidos, con el lazo</i> (histórico). Y no se crea que se necesita
+mucho tiempo para recorrer el término citado,
+pues basta media hora escasa. Sólo cito á Montbrió
como ejemplo; los pastores se alaban en todas partes
-de hacer lo mismo, aunque est presente el alcalde del
-pueblo, y hasta se lo contarn la primera pareja de
+de hacer lo mismo, aunque esté presente el alcalde del
+pueblo, y hasta se lo contarán á la primera pareja de
la guardia civil que encuentren.</p>
<p>Abandonemos, pues, el <i>hostal d'en Jaumet</i> con el
-corazon dolorido por no poderlo visitar ms menudo,
+corazon dolorido por no poderlo visitar más á menudo,
ya que en sus alrededores falta el principal aliciente
del cazador, la caza, y emprendamos la jornada llamada
de la <i>Carretera</i> hasta la Panadella.</p>
-<p>Esta cacera, constityela el terreno <i>mejor del mundo</i>.
+<p>Esta cacería, constitúyela el terreno <i>mejor del mundo</i>.
Figuraos (me dirijo al cazador que no haya estado) una
-red de montecillos (tal vez ascienden cien), que un
+red de montecillos (tal vez ascienden á cien), que un
par de cazadores inteligentes recorren en una jornada:
-cada uno de estos montes forma una pequea meseta
+cada uno de estos montes forma una pequeña meseta
donde juguetean las perdices comiendo alguna bellota,
-al par que con el paso de las carretas que transitan
-doscientos metros de all se entretienen y acechan los
-excrementos que van dejando las caballeras en el camino,
+al par que con el paso de las carretas que transitan á
+doscientos metros de allí se entretienen y acechan los
+excrementos que van dejando las caballerías en el camino,
pues esas aves son aficionadas al grano que encuentran
-entre el estircol. Serpentea la carretera por
+entre el estiércol. Serpentea la carretera por
entre dichos montecillos, y desde la Panadella, ya provincia
-de Lrida, hasta Cervera, forma un plano incli<span class="pagenum"><a name="Page_47" id="Page_47">[47]</a></span>nado
+de Lérida, hasta Cervera, forma un plano incli<span class="pagenum"><a name="Page_47" id="Page_47">[47]</a></span>nado
encajonado entre dos angostos rierales, que llevaron
-la desolacion Trrega, en setiembre del 74,
+la desolacion á Tárrega, en setiembre del 74,
hinchados por las grandes lluvias de aquellos dias. El
cazador que sabe lo que hacen las perdices en estos terrenos,
-ha de seguir por la maana los lindes de la carretera,
+ha de seguir por la mañana los lindes de la carretera,
si bien son tan querenciosas de dichos sitios las
-aves, que hay dia que de arriba abajo se pierde el tiempo
-sin poderse salir de all, y esto trabajndolas bien,
-en cuyo caso lo que ms disgusta son los testigos, pues
-para cazar cmodamente se necesita estar solo.</p>
+aves, que hay dia que de arriba á abajo se pierde el tiempo
+sin poderse salir de allí, y esto trabajándolas bien,
+en cuyo caso lo que más disgusta son los testigos, pues
+para cazar cómodamente se necesita estar solo.</p>
<p>Cuando las perdices atraviesan al vuelo la carretera,
no hay que molestarse en perseguirlas. El cazador que
conoce este juego debe cazar de modo que las obligue
- quedarse en la misma ladera, y que de sta pasen
-los bajos de Palams, preciosa ribera de zanjas: all
+á quedarse en la misma ladera, y que de ésta pasen á
+los bajos de Palamós, preciosa ribera de zanjas: allí
quedan pegadas como con obleas y por la tarde reciben
-una zurra de padre y seor mio.</p>
+una zurra de padre y señor mio.</p>
-<p>En todas estas caceras conviene ir acompaado de
-un mozo que cargue con las liebres, pues stas se matan
- menudo: hay bastantes, salen bien y en limpio.</p>
+<p>En todas estas cacerías conviene ir acompañado de
+un mozo que cargue con las liebres, pues éstas se matan
+á menudo: hay bastantes, salen bien y en limpio.</p>
<p>Podria contar muchos lances de las liebres que se
encuentran en este terreno, pero ya he manifestado
-que me apartaria del objeto de este libro. Dir s, para
+que me apartaria del objeto de este libro. Diré sí, para
inteligencia de los aficionados, que se matan en abundancia.</p>
<p>Hora es ya de regresar al punto de donde salimos al
-emprender nuestra cacera, es decir, San Guim, y
-entremos otra vez en casa Riera de Amors, donde
+emprender nuestra cacería, es decir, San Guim, y
+entremos otra vez en casa Riera de Amorós, donde
seremos recibidos con agrado.</p>
<p>El cazador, cazando cuatro dias seguidos ya tiene
-suficiente, mxime cuando uno observa que el perro
+suficiente, máxime cuando uno observa que el perro
sigue aspeado y casi de mala gana, pero... queda otro<span class="pagenum"><a name="Page_48" id="Page_48">[48]</a></span>
-terreno que todo conocedor de l no puede dejar de
-recorrer; me refiero al clebre <i>Bosch d'en Carbasa</i>, llano
+terreno que todo conocedor de él no puede dejar de
+recorrer; me refiero al célebre <i>Bosch d'en Carbasa</i>, llano
de mas de una legua en cuadro, donde se encuentran
buenos bandos de perdices, liebres y en invierno
-becadas. En ese terreno se fusilan muchos rboles, aunque
+becadas. En ese terreno se fusilan muchos árboles, aunque
las perdices arranquen de cerca, pues es tal la espesura
-de la arboleda que slo se las tira bien aprovechando
+de la arboleda que sólo se las tira bien aprovechando
un claro. Conviene, pues, dar una fuerte batida
y cruzar por todos lados para sacarlas de la dehesa y
-llevarlas los mrgenes de los montes vecinos, ya que
-all se dejan parar por el perro. Demos fin este captulo,
+llevarlas á los márgenes de los montes vecinos, ya que
+allí se dejan parar por el perro. Demos fin á este capítulo,
porque nos llaman otros asuntos <i>importantes</i>
-relativos al noble arte cinegtico.</p><hr class="chap" />
+relativos al noble arte cinegético.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_49" id="Page_49">[49]</a></span></p>
@@ -1599,54 +1583,54 @@ relativos al noble arte cinegtico.</p><hr class="chap" />
<p>Los verdaderos cazadores dicen que caza de mala ley
todo aquel que va con el <i>reclamo</i> y forma con el ramaje
-un <i>tollo</i>, y en el cerro en sitio propsito para su
-objeto emplaza su <i>jaula</i>, y con el <i>cuchich</i>, <i>cuchich</i>
-atrae al perdigon, dejndole muerto en el terreno.</p>
+un <i>tollo</i>, y en el cerro ó en sitio á propósito para su
+objeto emplaza su <i>jaula</i>, y con el <i>cuchichí</i>, <i>cuchichí</i>
+atrae al perdigon, dejándole muerto en el terreno.</p>
<p>Este modo de cazar tan en boga en Madrid, segun
-nos describe el seor Escrich en su obra <i>Los Cazadores</i>,
+nos describe el señor Escrich en su obra <i>Los Cazadores</i>,
donde aparecen las maravillas de sus reclamos <i>Chaparro</i>
y <i>D. Juan</i>, me ha hecho en verdad muy poca
-gracia. El mal ejemplo es contagioso, y si ste dimana
-de un cazador aficionado la escopeta y al perro, an
+gracia. El mal ejemplo es contagioso, y si éste dimana
+de un cazador aficionado á la escopeta y al perro, aún
es menos excusable. No basta citar en apoyo del <i>reclamo</i>
la obra <i>Arte de cazar la perdiz</i>, impresa en Sevilla
-en 1855, en la cual, fundndose su autor en que todos
+en 1855, en la cual, fundándose su autor en que todos
los cazadores son unos <i>traidores</i>, declara que cualquier
medio empleado para matar la caza es justificable. Si
-este argumento se pusiera en prctica, no habria caza
+este argumento se pusiera en práctica, no habria caza
posible; el <i>reclamo</i> tampoco serviria. Era lo que bastaba
-para concluir con toda clase de volatera, en cuyo
+para concluir con toda clase de volatería, en cuyo
caso la escopeta podria emplearse en cazar ranas y
-murcilagos, que bien valdria la pena de tirar estos
-dos bichos falta de cosa mejor.</p>
+murciélagos, que bien valdria la pena de tirar á estos
+dos bichos á falta de cosa mejor.</p>
-<p>En Catalua hay poca aficion al <i>reclamo</i>, pero los
-que as cazan no llevan el ttulo de cazadores, y hasta
+<p>En Cataluña hay poca aficion al <i>reclamo</i>, pero los
+que así cazan no llevan el título de cazadores, y hasta
en su propia casa ocultan el <i>arma-farol</i> homicida si
-ven entrar un cazador de escopeta; les avergenza su
+ven entrar un cazador de escopeta; les avergüenza su
<span class="pagenum"><a name="Page_50" id="Page_50">[50]</a></span>
-mtodo de caza. En Catalua slo van al monte fijar
+método de caza. En Cataluña sólo van al monte á fijar
el reclamo los <i>cazadores</i> panzudos.</p>
<p>Otros medios muy repugnantes se emplean para exterminar
la caza, tales como los <i>lazos</i>, el <i>caldero</i> y
<i>cerquilla</i>, la <i>rameta</i> y las <i>corridas</i> que la dan en varias
-comarcas, cuyo nombre es <i> la cansada</i>..... pero todos
+comarcas, cuyo nombre es <i>á la cansada</i>..... pero todos
los que emplean estos ardides, son conocidos entre los
cazadores, con el nombre de <i>rateros</i>.</p>
<p>Si los gobernadores de provincia pudiesen ocuparse
-ms de la administracion, pasando severas circulares
- los alcaldes de los pueblos para que denunciaran
-estos abusos cuantos faltan la ley de caza, no tendramos
+más de la administracion, pasando severas circulares
+á los alcaldes de los pueblos para que denunciaran
+estos abusos á cuantos faltan á la ley de caza, no tendríamos
que deplorar su completo exterminio. El mal es
-grave, y urge poner coto tantos desmanes.</p>
+grave, y urge poner coto á tantos desmanes.</p>
-<p>Hace tiempo slo se pide la licencia de caza la vista
-de Barcelona. En los dems puntos nadie repara quien
-lleva escopeta y lo que va. De seguir as, la caza en
-Espaa slo ser un recuerdo legendario.</p><hr class="chap" />
+<p>Hace tiempo sólo se pide la licencia de caza á la vista
+de Barcelona. En los demás puntos nadie repara quien
+lleva escopeta y á lo que va. De seguir así, la caza en
+España sólo será un recuerdo legendario.</p><hr class="chap" />
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_51" id="Page_51">[51]</a></span></p>
@@ -1656,29 +1640,29 @@ Espaa slo ser un recuerdo legendario.</p><hr class="chap" />
<h2 id="NUESTROS_CAZADORES">NUESTROS CAZADORES.</h2>
-<p>Es justo que dedique un captulo de mi <i>obrita</i> como
-recuerdo nuestros mulos de san Eustaquio. Los
+<p>Es justo que dedique un capítulo de mi <i>obrita</i> como
+recuerdo á nuestros émulos de san Eustaquio. Los
viejos cazadores de esta provincia van desapareciendo
para no volver. La sencillez de sus costumbres, la poca
-importancia que daban al mrito y fama que en su tiempo
+importancia que daban al mérito y fama que en su tiempo
conquistaran de excelentes cazadores, sus escopetas
-de chispa, los caones Ripollenses, de los <i>tres sietes</i>,
-sus caceras en los alrededores de Barcelona, la mortandad
+de chispa, los cañones Ripollenses, de los <i>tres sietes</i>,
+sus cacerías en los alrededores de Barcelona, la mortandad
de perdices que continuamente hacian en lo
-que hoy llamamos el <i>Putxet</i><a name="FNanchor_1" id="FNanchor_1" href="#Footnote_1" class="fnanchor">[1]</a>, sus salidas los fosos
-de las murallas con traillas de perros, matando la sazon
-ms conejos all donde ahora se levantan los mejores
+que hoy llamamos el <i>Putxet</i><a name="FNanchor_1" id="FNanchor_1" href="#Footnote_1" class="fnanchor">[1]</a>, sus salidas á los fosos
+de las murallas con traillas de perros, matando á la sazon
+más conejos allí donde ahora se levantan los mejores
edificios de la capital, que actualmente en cualquiera
-salida la distancia de veinte y cinco kilmetros,
-todo esto es digno de recordacion. Y con cunto
-placer se escuchan an tan agradables conversaciones!
-Quin no se deleita al oirles? An quedan restos de
-tan honrosa plyade, disminuida por los achaques y
-la vejez, abrindose paso los contemporneos, para
+salida á la distancia de veinte y cinco kilómetros,
+todo esto es digno de recordacion. ¡Y con cuánto
+placer se escuchan aún tan agradables conversaciones!
+¿Quién no se deleita al oirles? Aún quedan restos de
+tan honrosa pléyade, disminuida por los achaques y
+la vejez, abriéndose paso los contemporáneos, para
quienes se ha simplificado mucho la diversion, merced
- los ltimos adelantos, y sobre todo las vas frreas,
+á los últimos adelantos, y sobre todo á las vías férreas,
que permiten recorrer en poco tiempo la provincia de
-uno otro confin.</p>
+uno á otro confin.</p>
<p><span class="pagenum"><a name="Page_52" id="Page_52">[52]</a></span></p>
@@ -1687,30 +1671,30 @@ uno otro confin.</p>
<p>Entre nosotros viven los Mateus, los Angladas, los
Anfruns, los Torras, los Sandiumenges, los Martorells,
-los Suols y muchos otros tan diestros como los
-mencionados, cuya aficion la caza raya en delirio,
-lamentndose de verla desaparecer por las causas indicadas.</p>
+los Suñols y muchos otros tan diestros como los
+mencionados, cuya aficion á la caza raya en delirio,
+lamentándose de verla desaparecer por las causas indicadas.</p>
-<p>Lstima es que habiendo tanta predileccion en Barcelona
+<p>Lástima es que habiendo tanta predileccion en Barcelona
por el ejercicio de la caza, carezcan los cazadores
-de un punto de reunion. Aos atrs se abri un
-casino con el objeto de hablar de caceras y hasta para
+de un punto de reunion. Años atrás se abrió un
+casino con el objeto de hablar de cacerías y hasta para
reclamar colectivamente sobre cualquiera infraccion de
-la ley de caza; pero... tuvo que cerrarse por algunas pequeeces
+la ley de caza; pero... tuvo que cerrarse por algunas pequeñeces
y miserias. Resultado de esto es, que el
-que quiere saber algo de las salidas debe acudir los
-establecimientos de los amigos Anfruns y Maci, y all
+que quiere saber algo de las salidas debe acudir á los
+establecimientos de los amigos Anfruns y Maciá, y allí
siempre se coge algo al vuelo.</p>
<p>Algun tiempo servian para el caso algunos establecimientos;
-pero como la poltica lo invade todo, sta
-tiene siempre la palabra, y los cazadores que no estn
-por <i>msica</i>, poco poco han dejado de frecuentar
+pero como la política lo invade todo, ésta
+tiene siempre la palabra, y los cazadores que no están
+por <i>música</i>, poco á poco han dejado de frecuentar
aquellos centros.</p>
-<p>Esto ha contribuido que el noble arte de la caza se
-haya elevado poca altura en Barcelona y que muchas
-de las buenas caceras que todava se llevan cabo
+<p>Esto ha contribuido á que el noble arte de la caza se
+haya elevado á poca altura en Barcelona y á que muchas
+de las buenas cacerías que todavía se llevan á cabo
pasen completamente desapercibidas para el <i>mercado</i>
de los cazadores.</p><hr class="chap" />
@@ -1719,54 +1703,54 @@ de los cazadores.</p><hr class="chap" />
-<h2><a name="MAXIMAS_Y_CONSEJOS" id="MAXIMAS_Y_CONSEJOS">MXIMAS Y CONSEJOS.</a></h2>
+<h2><a name="MAXIMAS_Y_CONSEJOS" id="MAXIMAS_Y_CONSEJOS">MÁXIMAS Y CONSEJOS.</a></h2>
-<p>Los caones de la escopeta deben mirar siempre al cielo.</p>
+<p>Los cañones de la escopeta deben mirar siempre al cielo.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Aunque se tenga la seguridad de que est descargada la escopeta,
-cuando se est en actitud de descanso jams deben apoyarse
-los codos en la boca de los caones, ni dirigirlos nunca en direccion
- ningun compaero.</p>
+<p>Aunque se tenga la seguridad de que está descargada la escopeta,
+cuando se está en actitud de descanso jamás deben apoyarse
+los codos en la boca de los cañones, ni dirigirlos nunca en direccion
+á ningun compañero.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Si una pieza marcha en direccion algun punto que haya la
-ms remota probabilidad de hacer dao, no se le tira.</p>
+<p>Si una pieza marcha en direccion á algun punto que haya la
+más remota probabilidad de hacer daño, no se le tira.</p>
<hr class="tb" />
-<p>En los sitios de pasos peligrosos para las caidas, se pondr el
+<p>En los sitios de pasos peligrosos para las caidas, se pondrá el
disparador de la escopeta al <i>seguro</i>.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Antes de pasar los umbrales de tu casa la de cualquiera, se
-descargar la escopeta.</p>
+<p>Antes de pasar los umbrales de tu casa ó la de cualquiera, se
+descargará la escopeta.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Buscars la caza en verano en los umbriles, y en invierno en
+<p>Buscarás la caza en verano en los umbriles, y en invierno en
las solanas.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Se cazar siempre contra el viento, para evitar que la caza se
+<p>Se cazará siempre contra el viento, para evitar que la caza se
<span class="pagenum"><a name="Page_54" id="Page_54">[54]</a></span>
-aperciba de las pisadas del cazador y ser ms favorable al perro
+aperciba de las pisadas del cazador y ser más favorable al perro
que recibe los vientos de ella.</p>
<hr class="tb" />
<p>Si te has propuesto cazar varios dias seguidos, el primer dia
-debes retirarte temprano, para acostumbrarte la fatiga.</p>
+debes retirarte temprano, para acostumbrarte á la fatiga.</p>
<hr class="tb" />
-<p>No bebas mucha agua, pues hasta cierto punto sta no apaga
-la sed, y s quita las ganas de andar. Lo mejor es <i>tragos</i> de <i>vino
+<p>No bebas mucha agua, pues hasta cierto punto ésta no apaga
+la sed, y sí quita las ganas de andar. Lo mejor es <i>tragos</i> de <i>vino
aguado</i>.</p>
<hr class="tb" />
@@ -1781,22 +1765,22 @@ de ir en busca de nueva.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Cuando obsequies algun amigo cacera, en terreno desconocido
-para l, cdele siempre los sitios de preferencia.</p>
+<p>Cuando obsequies á algun amigo á cacería, en terreno desconocido
+para él, cédele siempre los sitios de preferencia.</p>
<hr class="tb" />
-<p>En las caceras se conoce la buena educacion de las personas.</p>
+<p>En las cacerías se conoce la buena educacion de las personas.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Cuando se vaya alguna cacera en compaa de varios amigos
-y se pregunte al regreso por quin ha muerto ms menos
+<p>Cuando se vaya á alguna cacería en compañía de varios amigos
+y se pregunte al regreso por quién ha muerto más ó menos
piezas, la contestacion debe ser: <i>tantas piezas en total</i>.</p>
<p><span class="pagenum"><a name="Page_55" id="Page_55">[55]</a></span>
-Jams lleves al entrar en los pueblos la caza colgada fuera del
-morral, pues hace muy <i>nio</i>.</p>
+Jamás lleves al entrar en los pueblos la caza colgada fuera del
+morral, pues hace muy <i>niño</i>.</p>
<hr class="tb" />
@@ -1811,24 +1795,24 @@ cambian de escopeta y perro.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Cazador que use anteojos, pocas perdices matar.</p>
+<p>Cazador que use anteojos, pocas perdices matará.</p>
<hr class="tb" />
-<p>No lleves el perro perdiguero en las caceras de conejos.</p>
+<p>No lleves el perro perdiguero en las cacerías de conejos.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Si en algo estimas el perro, no lo prestes nadie.</p>
+<p>Si en algo estimas el perro, no lo prestes á nadie.</p>
<hr class="tb" />
<p>Si alguna vez tienes alguna querella en el monte por asunto
-de caza, transige siempre favor del dueo colono.</p>
+de caza, transige siempre á favor del dueño ó colono.</p>
<hr class="tb" />
-<p>Siguiendo las mximas y consejos indicados, puedes lanzarte
+<p>Siguiendo las máximas y consejos indicados, puedes lanzarte
por esos mundos de Dios, amigo cazador, con toda la tranquilidad
y satisfaccion que requiere el cazar, con escopeta, al vuelo y perro
de muestra.</p>
@@ -1836,74 +1820,74 @@ de muestra.</p>
<p class="p6"><span class="pagenum"><a name="Page_56" id="Page_56">[56]</a></span></p>
-<h2 id="EPILOGO">EPLOGO<br />
+<h2 id="EPILOGO">EPÍLOGO<br />
Dedicado al Teniente general D. Lorenzo Milans del Bosch.</h2>
-<p>Escrita la presente obrita lo que quiera llamarse,
-llega mis manos el libro que V. acaba de publicar,
+<p>Escrita la presente obrita ó lo que quiera llamarse,
+llega á mis manos el libro que V. acaba de publicar,
titulado: <i>La Caza. Utilidad de su conservacion.</i> Doy
- V. la ms cordial enhorabuena por su nueva elucubracion
+á V. la más cordial enhorabuena por su nueva elucubracion
y por el fin laudable que en ella se propone, es
- saber: la conservacion de la caza por medio de una
+á saber: la conservacion de la caza por medio de una
ley previsora que evite su exterminio.</p>
-<p>Cuando le el libro <i>Los Cazadores</i>, su autor D. Enrique
-Prez Escrich, admir el gracejo con que est
-escrito; mas con cunta amargura vle hacer la apologa
-de los reclamos y dar los que los usan el ttulo
-de cazadores! En mi concepto los tales no son ms que
+<p>Cuando leí el libro <i>Los Cazadores</i>, su autor D. Enrique
+Pérez Escrich, admiré el gracejo con que está
+escrito; mas ¡con cuánta amargura víle hacer la apología
+de los reclamos y dar á los que los usan el título
+de cazadores! En mi concepto los tales no son más que
unos <i>fusileros</i>.</p>
-<p>Despues el seor baron de Crtes, en su libro <i>Recuerdos
-de caza</i>, sale indirectamente la defensa del
+<p>Despues el señor baron de Córtes, en su libro <i>Recuerdos
+de caza</i>, sale indirectamente á la defensa del
cazador de buena ley, es decir, con escopeta, al vuelo
y perro de muestra, y por deferencia (no puede ser
-otra cosa) transige con el reclamo; empero condicion
+otra cosa) transige con el reclamo; empero á condicion
y como recurso de la edad madura, pues parece que
-al seor baron ya le fatigan los <i>repechos</i>. Con todo,
-estoy convencido, atendida la vala de ese cazador, que<span class="pagenum"><a name="Page_57" id="Page_57">[57]</a></span>
-no <i>deshonrar</i> las glorias conquistadas en su larga
-carrera cinegtica.</p>
-
-<p>Su libro, seor Milans, vale mucho, y los cazadores
-lo han de reconocer as. La caza va desapareciendo de
-nuestras frtiles comarcas, siendo tanto lo que se
-abusa en el asunto que, como dice V. muy bien, sta
-pronto ser un mito.</p>
-
-<p>Mientras se permita los pastores llevar perros de
-sentido para que lo mejor se dirijan la yacija de
-la liebre y la devoren los gazapos, destrocen las polladas
+al señor baron ya le fatigan los <i>repechos</i>. Con todo,
+estoy convencido, atendida la valía de ese cazador, que<span class="pagenum"><a name="Page_57" id="Page_57">[57]</a></span>
+no <i>deshonrará</i> las glorias conquistadas en su larga
+carrera cinegética.</p>
+
+<p>Su libro, señor Milans, vale mucho, y los cazadores
+lo han de reconocer así. La caza va desapareciendo de
+nuestras fértiles comarcas, siendo tanto lo que se
+abusa en el asunto que, como dice V. muy bien, ésta
+pronto será un mito.</p>
+
+<p>Mientras se permita á los pastores llevar perros de
+sentido para que á lo mejor se dirijan á la yacija de
+la liebre y la devoren los gazapos, ó destrocen las polladas
de las perdices, y que los <i>rabadanes</i> cojan
-los huevos comindoselos en tortilla; mientras por las
+los huevos comiéndoselos en tortilla; mientras por las
fiestas mayores de los pueblos de corto vecindario se
tolere que la juventud se reuna y tome posiciones
-en las eminencias, y, <i>all va, all viene</i>, cansen
-las perdices cogiendo de una vez dos trescientas,
+en las eminencias, y, <i>allá va, allá viene</i>, cansen á
+las perdices cogiendo de una vez dos ó trescientas,
para con su producto pagar el gasto de la fiesta, presidida
-siempre por el seor alcalde; mientras en
-Catalua, y sobre todo en la Segarra, haya tantos
-<i>ramalistas</i> que mansalva y engao, de un tiro
-maten diez doce perdices; mientras en los pueblos
-de Levante se vean tantos <i>ioleros</i> que montones
+siempre por el señor alcalde; mientras en
+Cataluña, y sobre todo en la Segarra, haya tantos
+<i>ramalistas</i> que á mansalva y á engaño, de un tiro
+maten diez ó doce perdices; mientras en los pueblos
+de Levante se vean tantos <i>ñiñoleros</i> que á montones
las estrangulan; mientras haya el <i>caldero</i>, y la <i>linterna</i>
-y la jaula con el <i>reclamo</i>, y pueda salir ste en
-pleno dia vista y paciencia de las autoridades de la
-capital de Espaa; mientras existan gobernadores de
-provincia que telegrafien porque en tal cual sitio se
+y la jaula con el <i>reclamo</i>, y pueda salir éste en
+pleno dia á vista y paciencia de las autoridades de la
+capital de España; mientras existan gobernadores de
+provincia que telegrafien porque en tal ó cual sitio se
ha extraviado un reclamo; mientras un propietario con
-su jaulita y el <i>cuchich</i> pueda atraer su propiedad
-caza que no le pertenece y matarla en cualquier poca
-del ao; mientras los indivduos del somaten se les
+su jaulita y el <i>cuchichí</i> pueda atraer á su propiedad
+caza que no le pertenece y matarla en cualquier época
+del año; mientras á los indivíduos del somaten se les
permita sin licencia de caza piratear por todos los mon<span class="pagenum"><a name="Page_58" id="Page_58">[58]</a></span>tes;
-mientras... esta es la gorda!... anuncien los papeles
-pblicos que en marzo, abril, mayo, junio y julio,
-<i>el seor presidente del Consejo de ministros, etc.,
-con el conde tal cual y el ex-ministro de esa de
-aquella procedencia han salido cazar los montes
-de</i>...; mientras vea V. todo eso, intil que se canse en
+mientras... ¡esta es la gorda!... anuncien los papeles
+públicos que en marzo, abril, mayo, junio y julio,
+<i>el señor presidente del Consejo de ministros, etc.,
+con el conde tal ó cual y el ex-ministro de esa ó de
+aquella procedencia han salido á cazar á los montes
+de</i>...; mientras vea V. todo eso, inútil que se canse en
escribir libros para la conservacion de la caza. Si se
aplicara la ley principiando por los de arriba y por los
que han de dar buen ejemplo, no dude V. que los de
@@ -1912,37 +1896,37 @@ abajo cumplirian mejor.</p>
<p>Mi humilde opinion es que basta la ley que hoy rige
en la materia, con tal de que se cumpliera.</p>
-<p>La que V. propone limita la poca de caza cinco
-meses, y de aprobarse sabe V. lo que sucederia? Que
+<p>La que V. propone limita la época de caza á cinco
+meses, y de aprobarse ¿sabe V. lo que sucederia? Que
los cazadores que observamos estrictamente la ley,
-haramos intilmente el sacrificio de dos meses, mientras
+haríamos inútilmente el sacrificio de dos meses, mientras
que los <i>rateros de monte</i>, el uno por ser propietario,
el otro porque la caza <i>se le come la sembradura</i>
-(ste la extermina en caso necesario hasta con estrignina),
-el de ms all para venderla, la perseguirian lo
+(éste la extermina en caso necesario hasta con estrignina),
+el de más allá para venderla, la perseguirian lo
mismo que ahora.</p>
<p>V. no ignora, mi general, que en nuestro querido
-pas sacan en las fondas perdices cluecas en el mes de
+país sacan en las fondas perdices cluecas en el mes de
mayo, y en julio perdices pollas, lo cual consideramos
-los espaoles bocado delicado, sin rechazarlo enrgicamente.
-As pues, mientras miremos la cosa con
+los españoles bocado delicado, sin rechazarlo enérgicamente.
+Así pues, mientras miremos la cosa con
tanta calma y no se respete la ley, sino que, al contrario,
hasta por lujo se infrinja; mientras, repito, no
-se ponga un correctivo todo esto, sostendr que la
+se ponga un correctivo á todo esto, sostendré que la
ley de caza que rige es buena y retebuena, siempre
-que se cumplan sus artculos, y en este caso, yo
+que se cumplan sus artículos, y en este caso, yo ó
cualquiera, sin ser cazador de fama ni mucho menos,<span class="pagenum"><a name="Page_59" id="Page_59">[59]</a></span>
como los Pepe Real, Ahumada y otros, admitiria por
-mi cuenta, en compaa de mi <i>Pito</i>, el noble desafo
+mi cuenta, en compañía de mi <i>Pito</i>, el noble desafío
con que les brinda V. de matar, en noviembre del 77
y en campo libre, las seis perdices que V. les propone.</p>
-<p>Dispense V. mi osada, seor Milans, en dedicarle
-este eplogo. Si es de su agrado, quedar muy satisfecho,</p>
+<p>Dispense V. mi osadía, señor Milans, en dedicarle
+este epílogo. Si es de su agrado, quedará muy satisfecho,</p>
<p class="p2b center">Su paisano Q. B. S. M.<br />
-Manuel Saur.</p>
+Manuel Saurí.</p>
<p class="i2">Barcelona 15 de diciembre de 1876.</p>
@@ -1952,7 +1936,7 @@ Manuel Saur.</p>
<div class="footnotes"><h2>NOTAS AL CALCE:</h2>
<div class="footnote">
-<p><a name="Footnote_1" id="Footnote_1" href="#FNanchor_1"><span class="label">[1]</span></a> Pueblo situado cuatro kilmetros de Barcelona.</p>
+<p><a name="Footnote_1" id="Footnote_1" href="#FNanchor_1"><span class="label">[1]</span></a> Pueblo situado á cuatro kilómetros de Barcelona.</p>
</div></div>
@@ -1960,17 +1944,17 @@ Manuel Saur.</p>
-<h2 id="INDICE">NDICE.</h2>
+<h2 id="INDICE">ÍNDICE.</h2>
<table border="0" cellpadding="5" cellspacing="5" summary="indice">
<tr>
- <td class="tdr" colspan="2">Pgs.</td>
+ <td class="tdr" colspan="2">Págs.</td>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#PROLOGO"><span class="smcap">Prlogo.</span>&mdash;El porqu de la obra.</a></td>
+ <td class="tdl"><a href="#PROLOGO"><span class="smcap">Prólogo.</span>&mdash;El porqué de la obra.</a></td>
<td class="tdr">5</td>
</tr>
@@ -1995,12 +1979,12 @@ Manuel Saur.</p>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#MODO_DE_TIRAR_A_LAS_PERDICES">Modo de tirar las perdices.</a></td>
+ <td class="tdl"><a href="#MODO_DE_TIRAR_A_LAS_PERDICES">Modo de tirar á las perdices.</a></td>
<td class="tdr">13</td>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#AGOSTO">1. de Agosto.</a></td>
+ <td class="tdl"><a href="#AGOSTO">1.º de Agosto.</a></td>
<td class="tdr">17</td>
</tr>
@@ -2025,7 +2009,7 @@ Manuel Saur.</p>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#VENTAJAS">Ventajas y desventajas de cazar solo acompaado.</a></td>
+ <td class="tdl"><a href="#VENTAJAS">Ventajas y desventajas de cazar solo ó acompañado.</a></td>
<td class="tdr">37</td>
</tr>
@@ -2045,12 +2029,12 @@ Manuel Saur.</p>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#MAXIMAS_Y_CONSEJOS">Mximas y consejos.</a></td>
+ <td class="tdl"><a href="#MAXIMAS_Y_CONSEJOS">Máximas y consejos.</a></td>
<td class="tdr">53</td>
</tr>
<tr>
- <td class="tdl"><a href="#EPILOGO"><span class="smcap">Eplogo.</span>&mdash;Dedicado al Teniente general D. Lorenzo
+ <td class="tdl"><a href="#EPILOGO"><span class="smcap">Epílogo.</span>&mdash;Dedicado al Teniente general D. Lorenzo
Milans del Bosch.</a></td>
<td class="tdr">56</td>
</tr>
@@ -2061,508 +2045,154 @@ Milans del Bosch.</a></td>
-<p class="p6 center ht">FIN DEL NDICE.</p>
+<p class="p6 center ht">FIN DEL ÍNDICE.</p>
-<h2 id="MANUEL_SAURI_EDITOR_BARCELONA">MANUEL SAUR, EDITOR. BARCELONA.</h2>
+<h2 id="MANUEL_SAURI_EDITOR_BARCELONA">MANUEL SAURÍ, EDITOR. BARCELONA.</h2>
-<p class="center">EXTRACTO DEL CATLOGO.</p>
+<p class="center">EXTRACTO DEL CATÁLOGO.</p>
-<p class="p2"><b>El pastelero moderno.</b>&mdash;<span class="smcap">Novsimo manual de pastelera.</span> El ms completo
-de los publicados hasta el dia. <span class="smcap">Comprende</span> las frmulas ms usuales para
-la confeccion de toda clase de pastelera, tanto francesa como italiana, espaola,
+<p class="p2"><b>El pastelero moderno.</b>&mdash;<span class="smcap">Novísimo manual de pastelería.</span> El más completo
+de los publicados hasta el dia. <span class="smcap">Comprende</span> las fórmulas más usuales para
+la confeccion de toda clase de pastelería, tanto francesa como italiana, española,
inglesa y alemana, y el <span class="smcap">MODO DE COCER LOS PASTELES SIN HORNO</span>. Libro de suma
utilidad PARA PASTELEROS Y FAMILIAS. Escrito por una notabilidad en
-el arte.&mdash;<b>Mil frmulas para pasteles y 100 grabados.</b> Un t. 8. mayor,
+el arte.&mdash;<b>Mil fórmulas para pasteles y 100 grabados.</b> Un t. 8.º mayor,
12 reales.</p>
-<p><b>Arte de hacer vinos.</b> Manual Terico y Prctico del arte de cultivar las
-vias, el cultivo y abono de las tierras, eleccion y plantacion de las cepas, sus
+<p><b>Arte de hacer vinos.</b> Manual Teórico y Práctico del arte de cultivar las
+viñas, el cultivo y abono de las tierras, eleccion y plantacion de las cepas, sus
enfermedades y modo de curarlas; de la poda y cava; modo de hacer el vino
-natural y artificial, etc., por D. Nicols de Bustamante.&mdash;Un tomo en 4. con
-una lmina, 12 reales.</p>
+natural y artificial, etc., por D. Nicolás de Bustamante.&mdash;Un tomo en 4.º con
+una lámina, 12 reales.</p>
<p><b>Las plantas industriales.</b> Tratado curioso del cultivo y aprovechamiento
-de las plantas testiles, oleaginosas, tintreas y otras que son objeto de
-la industria; por varios agrnomos. Obra de sumo inters para los tejedores,
+de las plantas testiles, oleaginosas, tintóreas y otras que son objeto de
+la industria; por varios agrónomos. Obra de sumo interés para los tejedores,
estampadores, tintoreros y pintores; para los fabricantes de aceites, vinos, aguardientes,
-licores, sidras, y en fin, para los cosecheros cultivadores de dichas
-plantas.&mdash;Un tomo en 8. mayor, 12 reales.</p>
+licores, sidras, y en fin, para los cosecheros ó cultivadores de dichas
+plantas.&mdash;Un tomo en 8.º mayor, 12 reales.</p>
-<p><b>Manual del diamantsta y del platero.</b> Tratado de las piedras preciosas,
-finas imitadas, de los metales, su aleacion, esmalte, soldadura y dems
-procedimientos relativos estas artes; segunda edicion. Un tomo en 8. mayor,
+<p><b>Manual del diamantísta y del platero.</b> Tratado de las piedras preciosas,
+finas é imitadas, de los metales, su aleacion, esmalte, soldadura y demás
+procedimientos relativos á estas artes; segunda edicion. Un tomo en 8.º mayor,
10 reales.</p>
-<p><b>Manual completo del tintorero.</b> Obra terica y prctica puesta al alcance
+<p><b>Manual completo del tintorero.</b> Obra teórica y práctica puesta al alcance
de los tintoreros, quitamanchas y toda clase de personas, por A. D. Vergnaud;
segunda edicion, refundida y considerablemente aumentada segun los
-adelantos del dia. Un tomo en 8. mayor, con lminas, 20 rs.</p>
+adelantos del dia. Un tomo en 8.º mayor, con láminas, 20 rs.</p>
<p><b>Manual para construir toda clase de relojes de sol</b>, por J. de Arfe,
adicionado con un tratado de los relojes de sol horizontales, verticales, laterales.
Ilustrado con 28 grabados intercalados en el texto para su mejor inteligencia;
-segunda edicion. Un tomo en 8. mayor, 4 rs.</p>
+segunda edicion. Un tomo en 8.º mayor, 4 rs.</p>
<p><b>Manual completo del encuadernador y rayador.</b> Nueva edicion
-corregida y aumentada, con lminas. Un tomo en 8., 14 rs.</p>
+corregida y aumentada, con láminas. Un tomo en 8.º, 14 rs.</p>
-<p><b>Fbulas de Esopo</b>, corregidas y aumentadas con las de otros famosos autores.
-Nueva edicion con grabados <i>sui generis</i>. Un tomo en 8., 5 rs.</p>
+<p><b>Fábulas de Esopo</b>, corregidas y aumentadas con las de otros famosos autores.
+Nueva edicion con grabados <i>sui generis</i>. Un tomo en 8.º, 5 rs.</p>
-<p><b>Historia de la vida y hechos</b> y astucias sutilsimas del rstico Bertoldo,
+<p><b>Historia de la vida y hechos</b> y astucias sutilísimas del rústico Bertoldo,
la de Bertoldino su hijo, y la de Cacaseno su nieto. Nueva edicion con grabados
-<i>sui generis</i>. Un tomo en 8., 6 rs.</p>
+<i>sui generis</i>. Un tomo en 8.º, 6 rs.</p>
-<p><b>El Buffon de los nios.</b> Compendio de Historia Natural. Arreglado para
-la enseanza pblica y adoptado en clase de premio, por D. M. Pons y Fuster;
-tercera edicion con ms de cien grabados, 10 rs.</p>
+<p><b>El Buffon de los niños.</b> Compendio de Historia Natural. Arreglado para
+la enseñanza pública y adoptado en clase de premio, por D. M. Pons y Fuster;
+tercera edicion con más de cien grabados, 10 rs.</p>
-<p><b>El orculo de Napoleon</b>, sea <i>El libro de los destinos</i>. Un tomo en 4.,
-quinta edicion con una gran lmina, 10 rs.</p>
+<p><b>El oráculo de Napoleon</b>, ó sea <i>El libro de los destinos</i>. Un tomo en 4.º,
+quinta edicion con una gran lámina, 10 rs.</p>
-<p><b>Libro del destino</b>, del amor y de la fortuna. Un tomo en 16., 4 rs.</p>
+<p><b>Libro del destino</b>, del amor y de la fortuna. Un tomo en 16.º, 4 rs.</p>
-<p><b>El orculo de las seoras y seoritas</b>, consejero del bello sexo. Rica
-impresion en 8. mayor, 8 rs.</p>
+<p><b>El oráculo de las señoras y señoritas</b>, consejero del bello sexo. Rica
+impresion en 8.º mayor, 8 rs.</p>
-<p><b>El talisman de los sueos y de visiones nocturnas</b>, por Miguel
-Nostradamus, famoso astrlogo: tercera edicion. Un tomo en 8., 6 rs.</p>
+<p><b>El talisman de los sueños y de visiones nocturnas</b>, por Miguel
+Nostradamus, famoso astrólogo: tercera edicion. Un tomo en 8.º, 6 rs.</p>
-<p><b>Juegos de manos</b> sea arte de hacer diabluras, por Minguet, con grabados.
-Un tomo en 8., 4 rs.</p>
+<p><b>Juegos de manos</b> ó sea arte de hacer diabluras, por Minguet, con grabados.
+Un tomo en 8.º, 4 rs.</p>
-<p><b>Flores de invierno</b>; coleccion de juegos de manos. Un tomo en 8. con
+<p><b>Flores de invierno</b>; coleccion de juegos de manos. Un tomo en 8.º con
grabados, 8 rs.</p>
-<p><b>El libro negro</b> la mgia, ciencias ocultas, explicaciones de clebres talismanes,
+<p><b>El libro negro</b> ó la mágia, ciencias ocultas, explicaciones de célebres talismanes,
el arte de adivinar por los naipes y el de ECHAR LAS CARTAS,
-llave de sueos infinidad de grabados: sptima edicion. Un tomo en 8., 10 rs.</p>
+llave de sueños é infinidad de grabados: séptima edicion. Un tomo en 8.º, 10 rs.</p>
-<p><b>Nuevo arte de cocina</b>, terico prctico, adicionado con un tratado de
-hacer conservas y en forma de apndice. El Manual del licorista, por D. Juan
-Altimira: sexta edicion. Un tomo en 16., 6 rs.</p>
+<p><b>Nuevo arte de cocina</b>, teórico práctico, adicionado con un tratado de
+hacer conservas y en forma de apéndice. El Manual del licorista, por D. Juan
+Altimira: sexta edicion. Un tomo en 16.º, 6 rs.</p>
-<p><b>El lenguaje de las flores y el de las frutas.</b> Un tomo en 8. mayor,
+<p><b>El lenguaje de las flores y el de las frutas.</b> Un tomo en 8.º mayor,
con grabados y cromos, 10 rs.</p>
-<p><b>Secretos de la naturaleza</b>, por Jernimo Corts. Nueva edicion refundida
-y aumentada. Un tomo en 8. can grabados, 4 rs.</p>
+<p><b>Secretos de la naturaleza</b>, por Jerónimo Cortés. Nueva edicion refundida
+y aumentada. Un tomo en 8.º can grabados, 4 rs.</p>
<p><b>Ramillete de felicitaciones</b>, para todas las ocurrencias de la vida: novena
-edicion. Un tomo en 16., 4 rs.</p>
+edicion. Un tomo en 16.º, 4 rs.</p>
-<p><b>Cria del conejo domstico.</b> Sistema celular, con ahorro de tiempo y
-dinero segun experiencia de muchos aos, por Manuel Martorell y Pea. Segunda
-edicion aumentada. Un cuaderno con lminas, 4 rs.</p>
+<p><b>Cria del conejo doméstico.</b> Sistema celular, con ahorro de tiempo y
+dinero segun experiencia de muchos años, por Manuel Martorell y Peña. Segunda
+edicion aumentada. Un cuaderno con láminas, 4 rs.</p>
-<p><b>El estado interesante.</b> Manual de la mujer embarazada, remedios fciles
+<p><b>El estado interesante.</b> Manual de la mujer embarazada, remedios fáciles
y seguros para corregir las afecciones del embarazo, por el Doctor D. Antonio
Pons y Codinach, segunda edicion, 4 rs.</p>
<p><b>Manual de la madre de familia.</b> Contiene: afecciones propias de la
-mujer embarazada y medios de remediarlos, con arreglo al sistema homeoptico.
-Consejos las madres. Enfermedades de los nios de pecho, y su tratamiento
+mujer embarazada y medios de remediarlos, con arreglo al sistema homeopático.
+Consejos á las madres. Enfermedades de los niños de pecho, y su tratamiento
por el mismo sistema, por D. Pedro M. Brun, licenciado en medicina y
-cirugia. 1 tomo en 16. 4 rs.</p>
+cirugia. 1 tomo en 16.º 4 rs.</p>
-<p><b>Tesoro de juegos de sociedad.</b> Contiene las reglas y leyes de ms de
+<p><b>Tesoro de juegos de sociedad.</b> Contiene las reglas y leyes de más de
treinta juegos permitidos en toda clase de sociedades, casinos, reuniones particulares
-y cafs. El tresillo, billar, ajedrez, whist, dmino, lotera, chaquete,
-damas, solo, cuidadela, malilla, ecart, batalla, bciga, etc., etc. Segunda edicion
+y cafés. El tresillo, billar, ajedrez, whist, dómino, lotería, chaquete,
+damas, solo, cuidadela, malilla, ecarté, batalla, báciga, etc., etc. Segunda edicion
corregida y aumentada, 6 rs.</p>
-<p><b>Libro de chistes</b>, chascarrillos y bromazos. Un tomo en 16., con grabados,
+<p><b>Libro de chistes</b>, chascarrillos y bromazos. Un tomo en 16.º, con grabados,
4 rs.</p>
-<p><span class="smcap">Enciclopedia higinica de la belleza.</span> <b>Fisiologa descriptiva de las
-treinta bellezas de la mujer.</b> Anlisis histrico de sus cualidades fsicas y
-morales, sus perfecciones imperfecciones, temperamentos, fisonomas, carcteres,
-consejos higinicos para conservar la salud y la hermosura, cuidados del
-tocador, y ramillete de frmulas de perfumera higinica. Obra escrita en francs
-por el clebre mdico higienista A. Debay; traduccion de Mariano Blanch.
-Un tomo en 4., magnfica impresion, 14 rs.</p>
+<p><span class="smcap">Enciclopedia higiénica de la belleza.</span> <b>Fisiología descriptiva de las
+treinta bellezas de la mujer.</b> Análisis histórico de sus cualidades físicas y
+morales, sus perfecciones é imperfecciones, temperamentos, fisonomías, carácteres,
+consejos higiénicos para conservar la salud y la hermosura, cuidados del
+tocador, y ramillete de fórmulas de perfumería higiénica. Obra escrita en francés
+por el célebre médico é higienista A. Debay; traduccion de Mariano Blanch.
+Un tomo en 4.º, magnífica impresion, 14 rs.</p>
-<p><b>Vctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">ltimo dia de un sentenciado muerte.</span>&mdash;<i>El reo de muerte</i>
-y <i>El verdugo</i>, por Espronceda. Un tomo 8. mayor, 4 rs.</p>
+<p><b>Víctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">Último dia de un sentenciado á muerte.</span>&mdash;<i>El reo de muerte</i>
+y <i>El verdugo</i>, por Espronceda. Un tomo 8.º mayor, 4 rs.</p>
-<p><b>Vctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">Hombres clebres.</span> <i>Mirabau.</i> <i>Voltaire.</i> <i>Lamennais.</i> <i>Imbert.</i>
-<i>Galloix.</i> <i>Lord Byron.</i> <i>Valter Scott.</i> Un tomo en 8. mayor, 4 rs.</p>
+<p><b>Víctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">Hombres célebres.</span> <i>Mirabèau.</i> <i>Voltaire.</i> <i>Lamennais.</i> <i>Imbert.</i>
+<i>Galloix.</i> <i>Lord Byron.</i> <i>Valter Scott.</i> Un tomo en 8.º mayor, 4 rs.</p>
-<p><b>Vctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">El ao terrible.</span> 1 tomo en 8. mayor, 8 rs.</p>
+<p><b>Víctor Hugo.</b>&mdash;<span class="smcap">El año terrible.</span> 1 tomo en 8.º mayor, 8 rs.</p>
<hr class="chap" />
<p class="box">Nota del Transcriptor:<br/><br/>
Errores obvios de imprenta han sido corregidos.<br/>
<br />
- Pginas en blanco han sido eliminadas.<br/>
+ Páginas en blanco han sido eliminadas.<br/>
<br />
- La cubierta fue creada por el transcriptor y est
- disponible al dominio pblico.<br />
+ La cubierta fue creada por el transcriptor y está
+ disponible al dominio público.<br />
</p>
<p>&nbsp;</p>
<p>&nbsp;</p>
-<hr class="full" />
-<p>***END OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK LA CAZA DE LA PERDIZ CON ESCOPETA, AL VUELO Y CON PERRO DE MUESTRA***</p>
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-will be renamed.</p>
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-Gutenberg is a registered trademark, and may not be used if you
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-or PGLAF), owns a compilation copyright in the collection of Project
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-must comply with both paragraphs 1.E.1 through 1.E.7 and any additional
-terms imposed by the copyright holder. Additional terms will be linked
-to the Project Gutenberg-tm License for all works posted with the
-permission of the copyright holder found at the beginning of this work.</p>
-
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-work or any other work associated with Project Gutenberg-tm.</p>
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-Gutenberg-tm License.</p>
-
-<p>1.E.6. You may convert to and distribute this work in any binary,
-compressed, marked up, nonproprietary or proprietary form, including any
-word processing or hypertext form. However, if you provide access to or
-distribute copies of a Project Gutenberg-tm work in a format other than
-"Plain Vanilla ASCII" or other format used in the official version
-posted on the official Project Gutenberg-tm web site (www.gutenberg.org),
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-copy, a means of exporting a copy, or a means of obtaining a copy upon
-request, of the work in its original "Plain Vanilla ASCII" or other
-form. Any alternate format must include the full Project Gutenberg-tm
-License as specified in paragraph 1.E.1.</p>
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-
-<p>1.E.8. You may charge a reasonable fee for copies of or providing
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-that</p>
-
-<ul>
-<li>You pay a royalty fee of 20% of the gross profits you derive from
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- Project Gutenberg Literary Archive Foundation. Royalty payments
- must be paid within 60 days following each date on which you
- prepare (or are legally required to prepare) your periodic tax
- returns. Royalty payments should be clearly marked as such and
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- the Project Gutenberg Literary Archive Foundation."</li>
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-<li>You provide a full refund of any money paid by a user who notifies
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- License. You must require such a user to return or
- destroy all copies of the works possessed in a physical medium
- and discontinue all use of and all access to other copies of
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-
-<li>You provide, in accordance with paragraph 1.F.3, a full refund of any
- money paid for a work or a replacement copy, if a defect in the
- electronic work is discovered and reported to you within 90 days
- of receipt of the work.</li>
-
-<li>You comply with all other terms of this agreement for free
- distribution of Project Gutenberg-tm works.</li>
-</ul>
-
-<p>1.E.9. If you wish to charge a fee or distribute a Project Gutenberg-tm
-electronic work or group of works on different terms than are set
-forth in this agreement, you must obtain permission in writing from
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-Hart, the owner of the Project Gutenberg-tm trademark. Contact the
-Foundation as set forth in Section 3 below.</p>
-
-<p>1.F.</p>
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-is also defective, you may demand a refund in writing without further
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-WARRANTIES OF ANY KIND, EXPRESS OR IMPLIED, INCLUDING BUT NOT LIMITED TO
-WARRANTIES OF MERCHANTABILITY OR FITNESS FOR ANY PURPOSE.</p>
-
-<p>1.F.5. Some states do not allow disclaimers of certain implied
-warranties or the exclusion or limitation of certain types of damages.
-If any disclaimer or limitation set forth in this agreement violates the
-law of the state applicable to this agreement, the agreement shall be
-interpreted to make the maximum disclaimer or limitation permitted by
-the applicable state law. The invalidity or unenforceability of any
-provision of this agreement shall not void the remaining provisions.</p>
-
-<p>1.F.6. INDEMNITY - You agree to indemnify and hold the Foundation, the
-trademark owner, any agent or employee of the Foundation, anyone
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-with this agreement, and any volunteers associated with the production,
-promotion and distribution of Project Gutenberg-tm electronic works,
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-that arise directly or indirectly from any of the following which you do
-or cause to occur: (a) distribution of this or any Project Gutenberg-tm
-work, (b) alteration, modification, or additions or deletions to any
-Project Gutenberg-tm work, and (c) any Defect you cause.</p>
-
-<h3>Section 2. Information about the Mission of Project Gutenberg-tm</h3>
-
-<p>Project Gutenberg-tm is synonymous with the free distribution of
-electronic works in formats readable by the widest variety of computers
-including obsolete, old, middle-aged and new computers. It exists
-because of the efforts of hundreds of volunteers and donations from
-people in all walks of life.</p>
-
-<p>Volunteers and financial support to provide volunteers with the
-assistance they need are critical to reaching Project Gutenberg-tm's
-goals and ensuring that the Project Gutenberg-tm collection will
-remain freely available for generations to come. In 2001, the Project
-Gutenberg Literary Archive Foundation was created to provide a secure
-and permanent future for Project Gutenberg-tm and future generations.
-To learn more about the Project Gutenberg Literary Archive Foundation
-and how your efforts and donations can help, see Sections 3 and 4 and
-the Foundation information page at <a
-href="http://www.gutenberg.org">www.gutenberg.org</a></p>
-
-<h3>Section 3. Information about the Project Gutenberg Literary Archive
-Foundation</h3>
-
-<p>The Project Gutenberg Literary Archive Foundation is a non profit
-501(c)(3) educational corporation organized under the laws of the
-state of Mississippi and granted tax exempt status by the Internal
-Revenue Service. The Foundation's EIN or federal tax identification
-number is 64-6221541. Contributions to the Project Gutenberg
-Literary Archive Foundation are tax deductible to the full extent
-permitted by U.S. federal laws and your state's laws.</p>
-
-<p>The Foundation's principal office is located at 4557 Melan Dr. S.
-Fairbanks, AK, 99712., but its volunteers and employees are scattered
-throughout numerous locations. Its business office is located at 809
-North 1500 West, Salt Lake City, UT 84116, (801) 596-1887. Email
-contact links and up to date contact information can be found at the
-Foundation's web site and official page at <a
-href="http://www.gutenberg.org/contact">www.gutenberg.org/contact</a></p>
-
-<p>For additional contact information:<br />
- Dr. Gregory B. Newby<br />
- Chief Executive and Director<br />
- gbnewby@pglaf.org</p>
-
-<h3>Section 4. Information about Donations to the Project Gutenberg
-Literary Archive Foundation</h3>
-
-<p>Project Gutenberg-tm depends upon and cannot survive without wide
-spread public support and donations to carry out its mission of
-increasing the number of public domain and licensed works that can be
-freely distributed in machine readable form accessible by the widest
-array of equipment including outdated equipment. Many small donations
-($1 to $5,000) are particularly important to maintaining tax exempt
-status with the IRS.</p>
-
-<p>The Foundation is committed to complying with the laws regulating
-charities and charitable donations in all 50 states of the United
-States. Compliance requirements are not uniform and it takes a
-considerable effort, much paperwork and many fees to meet and keep up
-with these requirements. We do not solicit donations in locations
-where we have not received written confirmation of compliance. To
-SEND DONATIONS or determine the status of compliance for any
-particular state visit <a
-href="http://www.gutenberg.org/donate">www.gutenberg.org/donate</a></p>
-
-<p>While we cannot and do not solicit contributions from states where we
-have not met the solicitation requirements, we know of no prohibition
-against accepting unsolicited donations from donors in such states who
-approach us with offers to donate.</p>
-
-<p>International donations are gratefully accepted, but we cannot make
-any statements concerning tax treatment of donations received from
-outside the United States. U.S. laws alone swamp our small staff.</p>
-
-<p>Please check the Project Gutenberg Web pages for current donation
-methods and addresses. Donations are accepted in a number of other
-ways including checks, online payments and credit card donations.
-To donate, please visit: <a
-href="http://www.gutenberg.org/donate">www.gutenberg.org/donate</a></p>
-
-<h3>Section 5. General Information About Project Gutenberg-tm electronic
-works.</h3>
-
-<p>Professor Michael S. Hart was the originator of the Project Gutenberg-tm
-concept of a library of electronic works that could be freely shared
-with anyone. For forty years, he produced and distributed Project
-Gutenberg-tm eBooks with only a loose network of volunteer support.</p>
-
-<p>Project Gutenberg-tm eBooks are often created from several printed
-editions, all of which are confirmed as Public Domain in the U.S.
-unless a copyright notice is included. Thus, we do not necessarily
-keep eBooks in compliance with any particular paper edition.</p>
-
-<p>Most people start at our Web site which has the main PG search facility:
-<a href="http://www.gutenberg.org">www.gutenberg.org</a></p>
-
-<p>This Web site includes information about Project Gutenberg-tm,
-including how to make donations to the Project Gutenberg Literary
-Archive Foundation, how to help produce our new eBooks, and how to
-subscribe to our email newsletter to hear about new eBooks.</p>
-
+<div>*** END OF THE PROJECT GUTENBERG EBOOK 44120 ***</div>
</body>
</html>